CAPÍTULO 0

3.6K 316 17
                                    


El silencio del bosque se rompe ante gritos, voces pidiendo ayuda, gruñidos, cosas y objetos volando por los aires aterrizando en el suelo en miles de pedazos, seguido de fuertes y resonantes aullidos, indicando una sola cosa.

Su llegada...

La llegada de grandes e imponentes lobos con brillantes ojos rojos, con bocas llenas de filosos dientes listos para ser encajados en los cuellos de sus oponentes.

Saltando y atacando sin piedad, manchando el suelo y sus cuerpos de un líquido rojizo que sólo los anima a seguir. En el aire se siente el miedo, la angustia, la rabia, la ira, el poder y sobre todo muerte.

—Corre...

No muy lejos de ahí, dos niños corrían tratando de escapar.
El mayor con 14 años metió al menor de tan solo 7 años en el tronco de un árbol, con la esperanza de que nadie lo encuentre.

—No vayas a salir hasta que yo vuelva

—No te vayas — el pequeño toma el brazo del mayor impidiendo su partida.

—Voy a volver —acarició la mejilla húmeda por las lágrimas que caían de esos lindos ojos grisáceos que tanto le gustan.

—No, no... No me dejes... —sollozando.

—Cariño... —tomó el cálido rostro del más pequeño entre sus manos, antes de dejar un suave y casto beso en sus labios —Voy a volver, te lo prometo

El menor solo asiente con la cabeza esperando fervientemente que esa promesa se cumpla.

Viendo como el cuerpo del mayor, se va alejando perdiéndose entre los árboles...

—Tienes que volver... Tienes que volver por mí —susurra para si mismo.

El tiempo pasaba pero nada, solo un silencio absoluto, el más pequeño estaba a punto de salir cuando escuchó unos ligeros ruidos y diferentes olores mezclándose en el aire.

El niño de los ojos grisáceos, se escondió entre las hojas secas lo mejor que pudo, rogando que esas personas no capten su olor... Conteniendo la respiración y con su corazón palpitando ferozmente en su pecho, reza para que esas personas se vayan.

1...2...3...4...9...

Contando en su mente, ya había pasado un tiempo.
Soltando un suspiro de alivio, pensó que todo había terminado, cuando de pronto sintió como una mano se introdujo dentro de su escondite tomando su tobillo con fuerza, antes de darle una fuerte tirón, sacándolo por completo.

—Suélteme... —Pero aquella persona solo apretó su agarre.

El niño miraba a todas las personas a su alrededor, tres grandes hombres y dos mujeres le sonreían de una forma que al menor le causó escalofríos.

Una mujer, de cabellos oscuros, piel blanca y ojos verdes, se arrodilló frente a él.
Alzando su manos para sujetar su rostro.

—¿Eres omega? — preguntó mirándolo a los ojos.

—... —Negando con la cabeza.

El menor... No lo sabía, su lobo se daría a conocer cuando cumpla 15 años.

—Min —llamó una de las otras mujeres —Parece que aún es muy pequeño para saber...

—Hum, sabes Mel, tengo un buen ojo para esto —Min apretó más el rostro del menor —Daría mi cabeza a que es un omega ¿puro? O un ¿gamma?

Los ojos grisáceos del niño se llenaron de lágrimas, al sentir como los fuertes brazos de un hombre lo alzaban del suelo, llevándolo a un destino desconocido.

—¡Déjeme! —gritó, antes de tomar una rama perforando la mejilla del hombre e intentando liberarse de su agarre.

Pero lo único que consiguió fue un fuerte dolor cuando aquel hombre de cabello rubio lo tiró con fuerza sobre el suelo.

—¡Maldito niño!

Sintiendo como ese dolor se intensificó en todo su cuerpo, en especial en su cabeza.

—Detente Ald...—sujetándolo para impedir que siga con los golpes al cuerpo inconsciente del niño en el suelo —Puedes matarlo

—No lo viste Lea...pudo sacarme un ojo.

—No exageres... Eso no te hizo ni cosquillas —girando los ojos — Solo querías golpearlo.

Ald se encogió de hombros antes de volver a tomar el frágil cuerpo.
Sabían que en el mercado negro iban a pagar muy bien por un niño como éste.

En especial si las palabras de Min era ciertas, al final del día tendrían una buena cantidad de dinero en sus bolsillos .

🌼

Un joven de cabellos negros corría a más no poder, a todo lo que sus piernas soportaban...

Debía llegar, debía volver...

Lleno de sangre corría por todo el bosque acercándose locamente a ese lugar donde había dejado a su pequeño.

Acercándose al lugar podía sentir el olor a vainilla con fresa, que hacía que su corazón salte de alegría, la cual le fue arrebatada en segundos cuando encontró el tronco vacío.

Solo impregnado del dulce olor de su mate.

Despertado comenzó a buscar por los alrededores, su olor...pero el aroma de lluvia, la sangre y de otros lobos le dificulta su búsqueda.

Al los minutos dos grandes lobos uno café y otro negro, se pararon frente a él, no se asustó los reconocía, era su madre y el otro su tío.

— Tenemos que volver —la suave voz de su madre. Le habla mediante su vínculo.

—Mamá... Tengo que encontrar a Kit... —sus ojos avellana se cristalizan de dolor e importancia.

—Sing...,tú madre tiene razón. Tenemos que volver, la manada nos espera y...

—¿Cómo puedes decir eso? —grita con furia —Es tú...hijo....

–Sé que es mi hijo... —suspira —pero ahora no podemos hacer nada, si vamos tras ellos nos mataran.

—No puedes dejar que se vayan... No... —Su voz se rompe a la sola idea de dejar a su pareja.

—Hijo...lo siento...pero ahora la manada nos necesita, tu eres el futuro jefe.

—No...no voy a buscarlo –camino lejos de ellos.

Al dar dos pasos sintió como su camiseta fue sujetada por la boca de un gran lobo que por su olor a uva, sabía que era su madre.

—¡Déjame ir! Lo voy a encontrar —gritó, odiando aún no poder transformarse en lobo.

—Singto... Se que es difícil, pero cuando todo se solucione lo buscaremos.

—Tío... —unas lágrimas rodaron por sus mejillas —No me pidas que lo deje...

—Te prometo que lo vamos a buscar hasta debajo de las rocas si es necesario... —dijo antes de volver a su forma animal, soltando un gran aullido de tristeza.

—Te encontraré... Krist, lo haré.

Así se adentraron en el bosque en busca de su manada, la cual estaba muy abatida por el ataque de la manada Mersh, que quedaba al norte del bosque pasando el río.

No entendía por qué los atacaron, llevan años en paz...

Pocos conocían que la bruja del oeste, había realizado una predicción asegurando que de la manada Prawat iba a surgir el Bolga, el alfa de los alfas y que su mate iba ser igual de poderoso que él. Siendo esto el detonante para el ataque.

🌸
Gracias por leer

-Bolga\ alfas de los alfas. Su linaje es puro tienen algunas habilidades ciertas habilidades que otros no, pueden poseer algún don velocidad. Leer mentes, se dicen que son indestructibles.

Te Encontré Where stories live. Discover now