Paper Hearts ❥ Kookmin Omegaverse {Paper Hearts I}

🐱Capítulo 10🐱

Salieron a toda prisa del Instituto.

Jungkook cargándolo en sus brazos después de haberle colocado la mochila en la espalda y haber sacado de ella supresores que después le dió para que los tragara. El olor menguó poco a poco gracias a ello, y menos mal, porque Jungkook sentía que con cada inspiración perdía más y más la cordura.

Jimin cada vez era más cachorro que adulto y era peligroso que estuviera fuera de casa.

Era peligroso que estuviera en celo, en general.

Llegaron a la moto y Jungkook trató de sentarlo en ella. No pudo evitar sorprenderse un poco cuando el Omega opuso resistencia a separarse de él, entrelazado sus dedos todavía más fuerte alrededor de su nuca.

-Jimin tienes que montarte.

Sacudió su cabeza en negaciones rápidas y descompasadas. Sus ojos abiertos del susto y mirada aturdida.

-Ya te has subido en ella antes ¿y a qué no fue para tanto?

Si Jungkook pudiese escucharse desde fuera, se sorprendería con lo suave que estaba surgiendo la voz de su garganta.

Jimin se acurrucó de improvisto contra él. Se aferró con más ímpetu a su cuerpo y coló su rostro en su cuello tatuado.

La boca del Alfa se secó.

Si quería montarlo en la moto en ese estado, estaba jodido.

-No podemos quedarnos aquí ¿comprendes, Jimin? Vamos, atiende- lo sacó con cuidado de su cuello, pero rápidamente refunfuñó y volvió a esconderse- Ha venido tu celo y tienes que estar en casa. Y para poder llevarte a casa tienes que subir en la moto.

Su nariz se coló entre su piel y el cuello de la cazadora.

Genial.

De pronto, el Omega comenzó a olisquearlo agitado. Recorrió con su nariz su torso, alejándose y mirándolo a los ojos con la cabeza inclinada, y después volvió a olerlo de forma completamente descarada.

-Wow, a ver- ek Alfa jadeó abrumado tratando de alejar su rostro rápido y escurridizo de todo él- Jimin, ¿qué estás ha...?

El Omega sacó la bolsa de gominolas.

Las malditas chucherías.

El Alfa exhaló aliviado.

-Así que era eso- suspiró. Jungkook afianzó el agarre de Jimin con su brazo izquierdo y con el derecho se dirigió a la bolsa y se la arrebató. Una idea surcando su mente.

-¿Las quieres? - Jimin asintió rápidamente. El Alfa hubo de contener una sonrisa- Entonces son todas tuyas...- las manos del Omega se dirigieron rápidas a la bolsa cuando está fue elevada en el aire- ...si te subes en la moto. En cuanto te deje en casa te las doy ¿vale?

En aquellos momentos, el Alfa se sentía más negociando con un crío pequeño que con un chico de sólo tres años menos que él. Pero en el fondo, Jungkook siempre había sabido que Jimin era todo un cachorro. No podía estar demasiado sorprendido de que en su celo se comportara así.

Aún así no dejaba de ser algo curioso de ver. Porque se lo había imaginado teniendo celo bastantes veces, sobretodo desde que vió los supresores en su mochila, y nunca habría pensado que serían así de... tiernos.