Always and Forever

Capítulo 16 "Cuando estoy contigo el resto del mundo me sobra"

Zach abrió la puerta y vi las caras de Rob y Alex que también iban a entrar. Rápidamente cogí la americana de Austin que estaba al lado mío y me la puse. Austin les miró con cara de que salieran, y fue lo que hicieron los chicos al momento. Austin me miró a los ojos y buscó mis labios rápidamente. Yo me dejé besar mientras permanecía inmóvil de pie.
- Austin, abre-gritó Michele desde fuera. Se me puso un nudo en la garganta y Austin se separó de mí y se quedó con los ojos como platos.
- Ponte ahí detrás del sillón-susurró Austin-cogí mi ropa rápidamente y me puse detrás del sofá. Austin se acercó a la puerta y la abrió.
- ¿Qué pasa, mamá? Me estoy cambiando-le dijo sin dejarla pasar.
- Sal en cinco minutos que nos vamos al hotel-dijo Michele- ¿Dónde está Jessy?-Michele sabía que yo estaba ahí, son esas cosas que saben las madres no sé cómo.
- Está con Alex creo, no sé-dijo Austin serio.
- ¿Os habéis enfadado? Porque me parece muy raro que no esté contigo-suspiró Michele.
- Ya salgo mamá-dijo Austin cerrando la puerta y la conversación, mientras yo me vestía rápidamente-Vamos Jessy-me dijo Austin tras vestirse abriendo la puerta. Salí rápido y luego él, pero en ese momento apareció Michele.
- Austin espera que se me olvidó coger la chaqueta que la dejé en el camerino-Michele entró y al buscar la chaqueta sonó un "clac" en suelo. Miré abajo y vi que era el preservativo que había abierto Austin antes.
- Mamá, no hemos hecho nada-dijo Austin antes de que Michele pudiera decir algo-pero no te dije que estaba aquí porque no quería que pensaras algo así.
- ¿En el camerino, Austin? Podrían haberles pillado-la madre nos miró seria-Lo digo a los dos.
- No hicimos nada-dije con la voz tensa. No quería que mi "suegra" pensara que soy de esa manera.
Michelle se quedó en silencio y salió del camerino y nosotros detrás de ella. Nos subimos al coche y llegamos al hotel a la noche. La madre de Austin se fue directa a su habitación, sin decir nada, y nosotros entramos en nuestra suite. Los chicos habían salido a tomar algo por ahí porque hoy había partido. Austin se sentó en el sillón que había en la suite y miró al suelo. Me senté a su lado y entrelacé sus manos con las mías.
- Mañana todo estará bien, cariño-dije mirándole a los ojos. Sabía que estaba mal por lo de su madre-ella sabe que no hicimos nada.
- Es que vi que estaba decepcionada conmigo, y en parte lleva razón, fue una locura-dijo Austin mirando al frente.
- Pero si no pasó nada-suspiré. Me parecía que estaban haciendo una montaña de un grano de arena.
- Si no fuera porque entraron hubiera pasado algo ahí-sonrió Austin mientras se mordía el labio.
- ¿Qué dices? ¿En un camerino? Eso no es romántico-sonreí mirando a Austin. En parte tenía razón porque me había dejado llevar pero no quería que nuestra primera vez fuera ahí. Eso era muy cutre.
- Pero si fuistes tú la que cogiste el preservativo de mi bolsillo. Que no te pudiste resistir, y lo sabes-dijo antes de darme un beso en la mejilla.
- Eres más tonto-dije golpeándole el brazo.
- A ver, pues dime donde te gustaría que fuera-dijo Austin sin parar de sonreír. Se estaba riendo de mí pero yo le quería igual.
- En una playa o en una habitación con velas y eso-dije entrelazando nuestras manos.
- Y pétalos de rosa-añadió Austin entre risas.
- También-dije pensando el momento- No te rías de mí, que sabes que a ti también te gustaría.
- Ay, mi niña-Austin puso su brazo alrededor de mi cuello y yo me abracé a su cintura-¿Qué va a pasar después?
- ¿Como que después?-pregunté extrañada mirando a Austin.
- Cuando volvamos a San Antonio-Austin miró al frente y le vi con la cara bastante seria. Yo también tenía miedo pero prefería vivir el presente- No suelo tenerle miedo a nada, pero todo lo que tiene que ver con perderte me da pánico.
- No vas a perderme, eso ni lo digas ¿vale?-me separé de Austin y le cogí su mano. No quería verle preocupado-No pienses en lo que pasará, piensa en lo que estamos viviendo ahora.
- Es que cuando empezamos, cuando fui a tu casa a decirte que te vinieras conmigo, me gustabas pero ya está, y sinceramente yo estaba a verlas venir-Austin miró al frente mientras hablaba. En ese momento me sentí fatal, yo aquel día ya sentía cosas por Austin y él por mí nada.
- ¿Cómo que no sentías nada? ¿Me dijiste que me fuera contigo y no sentías nada por mí?-le miré extrañada. Me había sentado como una jarra de agua fría.
- A ver, tú me gustabas y quería algo contigo pero no sentía lo que siento ahora-dijo Austin sonriendo. A mí no me hacía mucha gracia pero suspiré y lo dejé pasar.
- ¿Y qué sientes ahora?
- No sé cómo definirlo, pero cada vez que te veo quiero estar contigo todo el rato, o me pongo histérico cuando veo a algún chico mirándote-sonreí al oír las palabras de Austin porque yo sentía lo mismo que él- Cuando estoy contigo el resto del mundo me sobra-callé a Austin con un beso, pero no fue un beso como los de hacía unas horas, llenos de pasión, si no que fue un beso con sentimiento. Le quería decir que yo también sentía lo mismo pero apenas me salían las palabras.
- ¿Te has enamorado alguna vez?-le pregunté.
- Me enamoré una vez y me dije que ya no quería enamorarme más hasta los treinta por lo menos-dijo Austin mirando al suelo.
- ¿De quién?-pregunté curiosa.
- De Taylor. Era una chica rubia, con los ojos azules y me volví loco por ella, pero me hizo daño, prefiero no recordarlo-Austin quería cambiar el tema y yo no iba a preguntar más. Creo que esas cosas son pasado, y no hace falta que me cuente todas las chicas con las que ha estado antes que yo.
- Pues yo soy morena y con los ojos marrones así que tú me dirás-dije entre risas.
- No tengo un prototipo, hay chicas morenas muy guapas y rubias muy guapas también.
- Claro porque te gustan todas-exclamé.
- Pero sólo me encantas tú-dijo Austin besando mi frente.
En ese momento volvieron los chicos y salimos todos a cenar a una pizzería. Como una familia.

Si les ha gustado este capítulo, porrrrrrrrrrrrr favor comenten porque no sé si dejar la historia o seguirla, muchas gracias por leer!!!!