Capítulo 4: Dead Sea

572 22 1
                                    

Se fue. No dijo absolutamente nada, cogió su bolso y se fue. Dinah me miró en estado de shock y yo no sabía que tenía que hacer. Me quedé varios minutos de pie pensando, hasta que reaccioné. Salí corriendo a buscarla y llovía una barbaridad. Era Central Park ¿Como mierda se supone que iba a encontrarla? Empecé a dar vueltas sin rumbo alguno, comenzaba a estar desesperada no podía creer que probablemente no la volvería a ver. Busqué pero no la encontré. Me dirijí de nuevo al restaurante ya que me acordé de que había dejado a Dinah sola, y fue entonces cuando la ví. Estaba de bajo de un árbol, intentando no mojarse aunque estaba completamente empapada, al igual que yo. Hacía un poco de frío y noté como temblaba. Se frotaba los brazos con sus manos intentando entrar en calor. Me acerqué lentamente, no quería otra cachetada. La verdad es que me sentía bastante mal, se veía tan indefensa,tan pequeña y yo fui tan idiota.

-Lo siento. No debí haberte pegado, soy una idiota,perdón.-Le grité a lo lejos ya que no me atrevía acercarme a ella.

Me miró, sus ojos ardían,estaba muy enfadada. Poco a poco me fui acercando.

-Camila perdóname, vuelve con nosotras a comer y...

No pude continuar, me empezó a tirar cosas del suelo. Literalmente, todo en cuanto encontraba (suerte que tiene una punteria muy mala) creo que hasta en una ocasión me tiró un carácol. Por no hablar de los palos y las piedras que lanzaba mientras que yo itentaba esquivarlos como podía.

-Para Camila Para!

No me hizo ni caso, me los empezó al contrario me los empezó a tirar con más fuerza. Que hija de puta.

-Joder Camila! Basta!

Me estaba haciendo bastante daño, pero sabía que si le empezaba a tirar piedras se enfadaría más. Así que hice un sprint esquivando todo esos obstáculos que me lanzaba, hasta que quedé en frente de ella y le cogí los brazos para que parase. Pero no paraba de moverlos y la verdad la noté muy nerviosa.

-Camila para por favor lo siento lo siento!

Pero seguía moviéndose, intentado pegarme, así que la envolví en un abrazo. Al principio se negó, se seguía moviendo, pero poco a poco se fue relajando. Mis brazos la envolvían ¡Olía tan bien! Me sentía como nunca, la tenía entre mis brazos, llovía, sentía su aroma, me sentía segura y frágil al mismo tiempo era como si había encontrado mi lugar perdido.

-Eres una estúpida.- Me dijo Camila. Era un reproche pero en su voz noté un tono dulce.

-Lo sé.- Seguía abrazada a mí. Tenía su cabeza metida en mi cuello y noté como inhaló mi aroma- ¿Está absorviendo mi perfume? ¿ Acaso le gusta mi olor? Mi piel se erizó de immediato.

Sacó su rostro de mi cuello y me miró fijamente.

-Escuchame nunca jamás vuelvas a pegarme NUNCA!

-Está bien pero es que tu...

-NUNCA!- Me alzó la voz.

-Vale, calma, lo siento, pero no me grites.

-Prométemelo Lauren, nunca. Sé que te pegué, pero porfavor haga lo que haga,diga lo que diga, no me pegues, no me pegues nunca.

Me pareció extraño, había dolor en esas palabras, yo no pensé que fuera para tanto pero me sentía como una mierda por haberle hecho daño.Ella tenía diecisiete años, solo era una niña, y yo ya tenía casi treinta, quizá le habría asustado- Bien Lauren, no puedes ser más idiota

-Lo siento mucho Camila prometo no volver hacerlo nunca más.

Me estaba mirando a los ojos como si buscasé verdad en ellos y volvió otra vez a mi cuello. Nos seguiamos abrazando y quizá llevabamos demasiado tiempo. La lluvía caía encima de nuestras cabezas y mis brazos rodeaban su cintura y yo no pensaba soltarla nunca. Pero entonces me acordé ¡Dinah!

I want to hold your hand (Camren)Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum