Crystallize

XXVIII

De pronto, dejó de sentir frío, ya no siente que se estaba ahogando ¿será que ya está muerta? No lo sabe, pero parece que no está dentro del agua; abre poco a poco los ojos, está oscuro, no puede ver nada ¿será que aún está dormida?

No. Hay algo más. Burbujas, hay burbujas, es extraño, a pesar de estar oscuras, puede ver aquellas gotas de aire en el vacío; una pequeña luz le llamó la atención, esa luz viene de uno de los brazaletes, es el que tiene forma de alas que rodea un pequeño cristal color amarillo, entonces no está muerta, sigue en el agua helada, pero ¿cómo es que dejó de sentir frío de repente? Y los más importante ¿cómo es que puede respirar bajo el agua?

La luz de la superficie se aleja cada vez más, así que se incorpora y comienza a nadar arriba, pero en eso, el brazalete le indica que debe ir más a fondo, una línea brillante le dice que debe seguir bajando, no está del todo segura, pero es probable que otro de los chicos se encuentra allí.

Judai venció al hombre que venció a Rei, está furioso que sus ojos cambiaron de color amarillo opaco, estaba a punto de saltar al agua, pero es detenido por Yusei.

Yusei: ¡No! ¿Eres imbécil? Morirás.

Judai: ¡Rei está allá! Necesito salvarla.

Reiji: ¡Necesito más apoyo!

Asuka: Estoy atorada aquí.

Sora: ¡Qué obstinados!

Judai aprieta los dientes mientras llama a un monstruo para ayudar a sus compañeros.

Yusei está seguro que Rei no sobreviviría en bajas temperaturas del agua, pero por lo menos hay que salvar su cuerpo, en eso, aparece Kuriboh alado.

Yusei: Kuriboh.

La bola de pelos hace sus movimientos cómo tratando de decirle algo.

Yusei: ¿Qué sucede?

En eso, un nuevo rayo aparece y logra noquear una parte de los soldados, el rayo viene desde el cielo, era nada más ni menos que Yugi que llamó su mago oscuro junto con un caballero blanco con alas.

Aterrizaron dónde Judai y Yusei, Yugi fue bajado por su monstruo.

Judai: ¡Yugi!

Yugi: Disculpa la tardanza.

Yusei: Necesitamos apoyo.

Yuma: ¡La ayuda va en camino!

Judai: Rei está en el agua helada, si no la sacamos a tiempo...

Yusei: Tranquilizate, la vamos a sacar.

Pero el Kuriboh le impide que haga eso, le da pequeños golpecitos en su mejilla.

Yusei: ¿Qué intentas decirme?

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Rei seguía nadando abajo, con la ayuda del brillo del brazalete, puede ver exactamente dónde dirigirse; llega a ver una especie de cueva subterránea, entra allí hasta que logra salir de agua, pues hay una burbuja de aire dónde el agua no logró inundarla, al fin tierra. Sube a la orilla y ve que dentro de la cueva no hay más que grutas, el brazalete seguía brillando, no queda de otra que seguir.

Después de atravesar una que otra roca que le impedía el paso, llega a una pequeña cámara dónde por alguna extraña razón, pequeños brillos decoran las paredes de la cueva, cómo si fuera un cielo nocturno. Más adelante había trozos de cristales minerales, grandes y pequeños, parece que tiene luz propia, pues iluminan la cueva cómo un escenario de espectáculo.