¿Por qué lo recordaría? [Rusia x Alemania]

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—Bueno, si le enviamos flores se le entregará en media hora... ¡Perfecto! Que buen servicio.— decía el europeo emocionado parecía como un niño.

El ruso solo sentía impotencia por qué simplemente le daba pena disculparse, no es que digamos que es su estilo—ay... Bueno ya que— dijo suspirando el eslavo mirando a la alfombra rosa que tenía.— ¡Oh! Bueno este ya que lo vas a enviar a mi nombre quisiera ponerle mi estilo, ¿Puedo?— dijo emocionado el ruso puesto que las flores eran para Alemania y podría empezar de nuevo.

—adelante, que te diviertas.— dijo el irlandés dándole su teléfono para después mirar cómo se emocionaba eligiendo los colores, después los dos empezaron a modificat el color, el tipo de papel, los detalles pequeños para que fuera perfecto, hasta que empezaba a oler a quemado.—¡Oh chispitas, mis galletas!—dijo tocándose los cachetes con asombro para irse a la cocina.

Rusia seguía eligiendo colores, le fascinaba hasta que vio que podía elegir las flores lo cual no ignoro, puso tantas flores como podía, digamos que cuando caminaba con Ucrania siempre le contaba nuevas flores que encontraba valieron la pena olvidar sus audífonos o no ignorarlo, además conocía flores que hacía sonreír al alemán puesto que cuando se veían a escondidas pasaban por el jardín de Francia e Inglaterra, el alemán le brillaban los ojos al ver las flores que crecían por ahí.

— no, no, no, ¿Por qué no puedo hacer nada bien?— se escuchaba los quejidos del irlandés al tratar de arreglar sus galletas.

Mientras de un rato eligiendo las flores, solo faltaba el mensaje. "Perdón:( Tqm" "Unas flores para una flor <3" "escogí estas flores por qué son bonitas, en realidad a mí no me gustan, pero creí que a ti sí te gustarían, por qué tú sí que eres bonito".— no, no, no, no— decía estresado el ruso por no poder elegir una oración para a completar, simplemente no podía sin verse obvio que le gustaba, en broma escribo "с любовью, Россия uwu ". Sin darse cuenta que en vez de borrarlo lo envío. Rápidamente se asustó, su respiración era agitada, estaba dudando frío, por un momento se quedó paralizado, recapacitando que había hechos, ¿Acaso no podía ser más estúpido? Se decía. sus ojos se nublaban hasta que cerro los ojos y se dió unas respiraciones profundas se tranquilizó un poco tiró el teléfono al otro lado del sillón mientras se acariciaba sus piernas.—Mira, ya lo hiciste, no pasa nada, creo ¡Ay!— sus consuelos propios no podían tranquilizarlo, se estaba deprimiendo en el sillón deslizándose hasta poner su torso en el asiento. "Talvez no tome en cuenta el mensaje". Después de eso llegó el irlandés con una bandeja en las manos con galletas semi quemadas con forma de conejito y limonada rosa, poniéndolo en la mesa.

El europeo recogió su teléfono y vio que las flores ya las había enviado, podía ver el mensaje pero al ver la expresión del euroasiatico decidió ignorarlo y guardo su teléfono en su bolsillo del pantalón. —Vamos a jugar— dijo Irlanda trayendo los controles de la consola, lo cual ánimo al ruso puesto que amaba jugar y destrozar a sus amigos.

.......

El alemán se encontraba durmiendo se Tando en el sillón abrazando uno de los miles peluches que tenía, claro todo esos peluches eran de Japón que aveces venía a tirarlos en la casa del tricolor por qué ya eran varios, en fin, ahí m se encontraba mientras la ventana estaba abierta con el sol alumbrando y acariciando la piel del alemán, lo mantenía cálido y con el dulce olor de chocolate caliente que estaba preparando el suizo.

El suizo se encontraba en la cocina, combinando los dulces chocolates llegando atraer hasta los mapaches por el dulce olor. Amaba cocinarle al alemán puesto que siempre le hacían cumplidos de lo cual maravilloso era. Tardo en media hora en terminar el desayuno y una que otra vez tomándole fotos pues se veía tan tierno durmiendo era como un pequeño gatito que simplemente le dolería si se despertara.