Abrí los ojos de golpe. Miré a mí alrededor. Había luz y estaba en el jardín. Intenté sentarme y la cabeza estuvo a punto de explotarme. Grité mientras me agarraba la frente con ambas manos y volví a acostarme.
-Al fin, flaca por dios como dormís- Escuché la voz de Sebastián. -Son casi las ocho de la noche, por un momento flashe que estabas muerta.
Cerré los ojos para calmar mi mareo. Él se sentó a mi lado y, recién en ese momento, me di cuenta de que estaba acostada en un colchón inflable, casi al lado de la pileta.
-Resumí todo- Rogué.
No tenía ganas de escuchar muchas cosas pero sí de, al menos, entender que había pasado.
-Comimos, estuvimos en la pileta, merendamos...Mauro propuso que te traigamos acá por si fallecías.
Negué con mi cabeza. No era eso lo que quería saber, ¿cómo había llegado hasta la habitación? ¿Qué había pasado después del "tengo ganas de hacer otra cosa"?
-¿Y Tomás?- Pregunté casi desesperada y me odié por ello.
-Tomás, ¿qué?
-Yo...yo estaba con Tomás allá- Expliqué mientras señalaba el jardín trasero.
-Ah, sí- Rió. -Lo vomitaste, Valeria- Largó una carcajada.
Por un momento creí desmayarme de la vergüenza.
-¿Qué cosa?- Miré a mí alrededor. Con tanto verde podía hacer un pozo y enterrarme viva en donde quisiera.
-Yo estaba preparando tragos y vino a buscarme. Estaba todo lanzado y te arrastraba para todos lados- Se rió una vez más y le pegué.
-Me debe odiar, más que antes
-No creo que te odie tanto- Agregó. Me estiró su mano y la tomé con firmeza. Hizo fuerza con cuidado y me ayudó a levantarme lentamente.
-¿Por qué lo decís?
Se encogió de hombros.
-Te llevo hasta arriba, te baño, te vistió
Abrí los ojos sorprendida. Estaba muerta de vergüenza pero tenía ganas de recordar aunque sea un momento de la noche, para revivir como me había tratado.
-Dormiste dos horas y vomitaste otra vez. Nos despertaste a todos wacha. Cuando fui al baño él te sostenía el pelo. Creo que te quiere- Sintetizó.
Largué una carcajada irónica.
-No me banca.
Hizo un gesto. Pensé un segundo.
-¿Con quién dormí?- Indagué cerrando los ojos. No sé si quería saber la respuesta.
-Con él, supongo.
-No- Exclamé rápidamente. No podía ser cierto. -No, no, no- Negué con mi cabeza. Lo observé a Seba, tenía una ceja levantada.
-¿Qué te pasa, loca?
-Nada- Dije mientras me levantaba. Cerré los ojos para no marearme. Sebastián se paró para sostenerme. Pasó su brazo por mi cintura y en ese momento me percate: tenía puesta una remera de hombre.
No podía ser posible que Tomás haya dormido conmigo. No lo hizo el día que habíamos estado juntos, no iba a hacerlo un día en el que lo vomité vaya a saber él cuantas veces. Y, si habíamos dormido juntos, tampoco era posible que yo no lo recordara. Creo que lo recordaría incluso hasta si me borraran la memoria; más aún después del malestar que me provoco que se haya ido a dormir a otro lado la última vez.
-Estoy hecha bosta- Exclamé cuando Seba me ayudó a dar los primeros pasos.
-Veo, ¿qué tomaste?
-Que se yo, todo- Maldije en voz alta. Hizo un gesto y buscó algo en su bolsillo trasero. Estiró su brazo para alcanzarme mi celular y yo lo tomé casi al segundo. Apreté el botón principal para mirar la hora. ¿Cómo qué había dormido hasta las ocho de la noche? Negué con mi cabeza y lo desbloqueé. Tenía un Whatsapp de él de la mañana.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
-Que vergüenza- Exclamé apenas terminé de leerlo. Se lo mostré a mi amigo.
-Se la bajaste pero mal- Reí.
-O te quiere dar o te quiere. No hay otra posibilidad. Yo te hubiese dejado ahí quebrada.
-Ya me dio- Agregué sin vergüenza. Neo era como mi hermano.
-Entonces te quiere seguir dando.
Había cambiado la foto de Whatsapp y estaba admirándola mientras caminaba con dificultad. Estaba sobre una moto y, aunque no se le veía la cara, parecía estar sonriendo.
-Y se ve que vos también querés seguir dándole- Agregó entre risas.
Resumí todo lo que quería decirle en pocas palabras.
Me quedé mirando el celular al ver que estaba en línea. No tardo en vibrar.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Sonreí. No por la situación ni por su propuesta. Era una respuesta que no me esperaba, al igual que su actitud anoche. Estaba distinto. No sabía bien que pero algo había cambiado.
ustedes dicen que van a terminar aflojando y le van a contar que es lo que pasa con tomi?
