07. Triste Decepción

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Aquellos chicos estaban en sus mundos, Felix probaba su nuevo celular y aquel simplemente acomodaba sus cosas. El silencio aparcaba pero, no había incomodidad por alguna razón.

—¿Sabes los horarios hospitalarios?— pregunto Changbin para romper ese silencio.

—Si— respondió Felix.

—¿Podrias prestarmelos para copiarlos?— saco su celular para tomarle una foto o sino, copiarlo en sus notas.

—Lo siento, no los tengo aquí — mintió el australiano.

—Sabes— se levantó a un lado de la puerta— las mentiras crean un vacío y mientras más digas mas te caes a el.

si.. Espera— lo miro con mucha atención — ¿de donde sacaste esa frase?

—Pues, la leí en alguna parte— excusó Changbin.

—Mientes— respondió Felix algo nervioso.

—No nos conocemos, puedo mentirte como sea—dijo el pelinegro sin importancia.

Changbin  miraba al australiano de una manera tan sobrenatural, con rabia, molestia pero de repente, este bajo su cabeza sentando de golpe en el piso empezaba a frotar desesperada mente su cuello.

Cuando Felix iba a acercarse este subió la vista de golpe, dejando a el peliarena quieto en su lugar, Felix ahora tenia miedo, su cara había cambiado, ya no tenia mirada asesina sino, una sonrisa sínica que le provocaba demasiado miedo.

¿Sufrirá algún transforno de doble identidad, o bipolaridad en altos niveles?

Felix sólo quedó quieto y prefirio acostarse a dormir o almenos intentar.

12:59 am

Dejo de soñar, al escuchar uno que otro quejido, volteo lentamente para ver si su compañero se hayaba ahí pero no, la luz del baño estaba encendida, obligando a que el chico cerrara sus ojos, se levantó despacio hasta al baño y encontrarse cierta escena que ya ha visto en un de sus amigos.

—¿Porque te cortas?— dijo de repente asustando al chico.

—Se toca oiste— sin importarle su opinión seguía cortando sus brazos.

—Pues estaba abierta— se agacho quedando enfrente del pelinegro — dame la ojilla.

—¿Porque debería?— lo miraba sin despegarse de tan hermosos ojos.

—Un amigo también lo hacia y ahora se arrepiente— aquel chico no tuvo más que darsela, le daba miedo la expresión del australiano— ves así esta mejor.

Se levanto para dejar a aquel en el baño pero derepente este preguntó.

—¿De que sufre?— dijo Chabgbin. Felix fruncio el ceño ante aquella pregunta del pelinegro.

—¿Que sufre que?— cuestionó.

—Tu amigo— dijo un poco apenado.

— el sufre de depresión, se llama JeongIn— se acerco para levantar al pelinegro — que tal si mientras te curo me dices de que sufres tu— dijo dulcemente sin siquiera darse cuenta de su tono de voz.

—Esta bien— dijo sin más ChangBin.

Sus heridas ya estaban limpias y con vendas, pero el tema nuevamente surgió.

—Sufro de Bipolaridad, y doble identidad constante— admitió de golpe el pelinegro.

—Interesante— dijo sin ánimos, lo que había pensado si era lo que tenia.

—¿Y tu?— felix quedo viendo al pelinegro no sabia que decirle.

—No lo se, ni siquiera yo mismo lo se— Felix hablo sin ganas, teniendo encima una mirada falsa del mayor.

—¿Como no vas a saber de que estas enfermo?— Changbin pensaba que era un broma de su compañero, pero aquel lo veía serio— ¿enserio no sabes?— felix negó — vaya... Lo siento.

—No te preocupes casi es costumbre — le sonrió.

—Bueno, si me disculpas— Changbin se levanto.

Felix pensaba que iba a dormir, pero no este se tiro en su cama para luego sacar un cuaderno de su mochila, eso alarmó a felix.

—Oye y....¿ ese cuaderno?— pregunto nervioso.

— A este, lo encontré en el patio, por unos arbustos, sabes— se levanto nuevamente y se sentó al lado de Felix para ragalarle una sonrisa— son los dibujos, frases y anotaciones más hermosas que he visto.

—Es un asco— murmuro Felix.

—¿como?— Changbin escuchó clara mente— ¿Que dices?, para mi es los hermoso, y sabes este es mi favorito— hojeo hasta un dibujo reciente de felix reflejando un hermoso atardecer.

—¿Enserio te gustan esos enfermos garabatos?— dijo felix asqueado.

—¿y porque no?— seguía hojeando el cuaderno — me siento afortunado.

—¿Porque?— veía al pelinegro extrañado.

—Pues esto es lo más especial y bonito que he visto— admitió Changbin — y a pesar de no conocer a tan valioso artista, lo felicito por tan hermoso talento.

—¿Talento?—  felix ya no sabia que pensar,aquel chico estaba viendo parte de su enfermedad Como ¿Un talento?

—Si, esto es talento no es nada más — siguió hojeando

—Es lo mas horrendo que puede existir— susurro para si mismo.

—Felix... Tus obras, frases y apuntes son el arte que ahora se ha vuelto mi favorito— abrió los ojos como platos, al recordar lo que había hecho, Changbin Estaba en la ultima pagina donde el había recordado escribir su nombre y habitacion— y te has vuelto mi pintor favorito, no te avergüences de eso, me encanta y almenos  me tienes como admirador.

Después de hermosos alientos y palabras del pelinegro, le devolvió su cuaderno a Felix y con una sonrisa se dirigió a su cama para reconsiliar el sueño.

Felix no sabía que decir o sentir, se había quedado en shoock después de las palabras tan lindas de Seo Changbin, su corazón latía demasiado rápido.

Dijo que mis dibujos son hermosos, y que soy su pintor favorito.

Por algún motivo parecía un niño... Su sonrisa no desaparecía.

Enfermedades ©Where stories live. Discover now