Katawa Shoujo: Cicatrices del Corazon

Acto IV. Té y Una memoria

Saliendo de la universidad mi cabeza no para de darle vueltas a lo sucedido hace algunos momentos, de verdad me siento como un verdadero estúpido por haber preguntado eso, de seguro Miku pensara que lo hice para burlarme de ella. Eres un verdadero tonto Hisao.

Continúo caminando hasta estar a unos metros del instituto de Hanako, llevándome una gran sorpresa al ver que ella estaba afuera y se la nota muy ansiosa.

Apresuro mi paso hacia su dirección y apenas me ve se acerca a mi casi corriendo.
—¡Rapido Hisao!— sin darme tiempo a nada estoy siendo jalado del brazo mientras trotamos en dirección al apartamento. No puedo entender la emoción de Hanako, pero no se ve necesariamente asustada o preocupada. Podría jurar que parece una niña a la que le han dado una gran noticia.

—¡Están ahí!— Hanako suena más emocionada que antes. Dirijo mi mirada hacia la dirección en la que ella avanza a paso rápido y firme, casi corriendo, para ver a dos mujeres de cabello rubio.

La primera lleva un traje elegante, bien arreglado y mantiene las manos en sus bolsillos con una gran sonrisa. Por su parte, la otra lleva un hermoso suéter color marrón claro combinado con una falda hasta los tobillos color rojo. Son Lilly y Akira, realmente es una agradable sorpresa.

Hanako casi parece correr hasta que abraza a Lilly asegurándose de no hacerla caer.
Hace mucho tiempo que no veía escena, para ser más exacto, desde mis días en Yamaku. Es algo sin duda conmovedor y nostálgico a la vez.

—¡Lilly!— Hanako casi pareciera sollozar —Te echaba de menos—.
Lilly muestra esa sonrisa tan característica en ella y acaricia el suave y largo cabello de Hanako.
—Tambien te echaba mucho de menos Hanako—. Da una leve risita —Obvio que a ti también Hisao—.

—Haha.. que gusto verlas de nuevo Lilly Akira— camino en dirección hacia las chicas, pensando si fue buena idea usar la palabra "ver", a veces olvidó su ceguera.

Por suerte una sonrisa aparece en el rostro de Lilly a pesar de mi inoportuno comentario.

—¿Que hacen por aquí? Pensé que que vendrían al comienzo de las vacaciones.—

—Oh el equipo de las hermanas Satou siempre logra liberarse antes de tiempo— Akira guiña su ojo con aires de superioridad.

—jaja ya veo...— caigo en el hecho de que seguimos fuera.
—¡Por favor pasen si gustan!— Hanako no se despega de Lilly mientras Akira y yo las seguimos por detrás.

La casa es lo suficientemente espaciosa como para que los cuatro entremos sin problemas.
Antes que pudiera ofrecer asiento Lilly llama la atención de lo presentes.
—Hanako me harías el favor de acompañar a Hakira a buscar algunas cosas al auto— lo dice con tanta naturalidad, que Hanako asiente con una leve sonrisa y salen de la habitación en silencio. Es ese preciso momento dónde la dulce expresión de Lilly se torna algo sería.

—Hisao, respecto a lo que hablamos...— Lilly da un leve suspiro cambiando su expresión por una de preocupación.
—No es la primera vez que sucede en realidad...— se muestra realmente apenada —los primeros años en Yamaku, cuando yo la conocí, estos episodios eran más frecuentes— se toma un tiempo, como si pensara cada palabra antes de hablar.
—Muchas veces tuve que dormir con ella para que se calme... Y que ahora me digas que volvieron a ocurrir... Me preocupa— la expresión de Lilly es de una preocupación completa —Mucho... Por el bien de Hanako..—

Ayudo a Lilly a tomar asiento delante mío.

—Estuve averiguando algunas cosas—.
Mi comentario se gana una nueva de curiosidad.
—sobre el hogar del cual fue adoptada Hanako... Creo que di con una de sus compañeras...—.