XV

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Infantilización

Llegamos de nuevo con Rebeca, tuvimos que pasar la noche ahí, a la mañana siguiente, todos teníamos clases temprano, así que comenzamos a prepararnos, Rebeca prendió la tele mientras desayunabamos, Meryl aún no bajaba, lo cual me preocupó

"Oye Rebe, ¿y Meryl?"
"Aún debe estar dormida, ahora voy a despertarla"

Me empecé a percatar de que a lo lejos se oía mucho ruido, se oían sirenas de patrullas y ambulancias, además de que pasaban helicópteros más seguido de lo normal; Rebeca se levantó de la mesa y subió las escaleras

"¿Se le habrán pasado ya los efectos?"
"¿Qué?"
"A Meryl, de las mamilas de ayer"
"Ah, puede ser, dijo que sólo duraba unas horas"
"¡Ay, Meryl!" gritó Rebeca a lo lejos y azotó la puerta, bajó de nuevo al comedor, zobándose la mano
"¿Qué pasó?"
"A Meryl aún no se le pasa lo de las mamilas, y no sé porqué, pero me mordió"
"Déjame ver" le dijo Cynthia

Rebeca le mostró la mordida a Cynthia, se la revisó y le dió un breve diagnóstico, afortunadamente no fué nada grave, aunque si fué bastante fuerte.

El programa que estábamos viendo lo interrumpió repentinamente un noticiero

*Noticiero en la televisión*
"Lamentamos la interrupción de su programa, le traemos una alerta roja y la actualización de lo que los médicos le han llamado “infantilización”, la cual se ha salido de control, y para ello, tenemos al doctor Barragán en el estudio para explicarnos que es lo que está pasando"
"Si, claro, antes que nada, les sugerimos que no salgan de sus casas, es de vital importancia, ya que no sabemos de qué manera se transmite éste virus, comenzaron a llegarnos casos desde la madrugada de hoy, lo que pensamos que eran simples casos de incontinencia, al presentarse los primeros pacientes con lo mismo, supimos que era algo más, empezamos a indagar más en ello, pero al poco rato, comenzaron a perder el habla, el hospital se llenó rápidamente y ahí comenzó a perderse el control, aún no sabemos la forma de transmisión, pero muchos de los pacientes de al rededor de las 2 de la mañana en adelante, presentaban mordidas, no todos, claro, pero lo importante de esto, es que eran mordidas profundas, ahí fue cuando empezamos a creer que era a través de las mordida que se pasaba aquel virus, pero lo extraño era que no todos presentaban la mordida, la tercera fase de los pacientes era una disminución de habilidades motoras, principalmente en las extremidades, seguimos investigando, pero la recomendación es que no salgan de sus casas"
"Muchas gracias doctor, y pues, ya lo escucharon, protejanse, y nosotros los mantendremos informados"

Cynthia y yo volteamos a ver a Rebeca, que tenía la cara pálida y llena de angustia

"No, no, no creo que..." Rebeca cayó al piso
"¿Qué hacemos?" me preguntó Cynthia
"No podemos asegurar nada"
"Pero tampoco negarlo"
"¿Qué pasará ahora? Meryl y yo estamos infectadas"
"Tranquila, debe ser una coincidencia"
"No creo... Debe de ser..."
"¿Qué?"
"Las mamilas"
"¿Cuáles?"
"Las que te di, y le dí a Meryl..." Rebeca comenzó a llorar "Perdóname"
"Descuida, no me las tomé, pero... ¿Crees que sea el origen de todo esto? ¿No dijiste que nosotros éramos los primeros?"
"Tienes razón, puede ser que no sea eso"
"Ahora queda pensar que haremos, no podemos salir de aquí, por lo menos hasta saber más sobre lo que está pasando"
"Yo, estoy algo cansada, iré a descansar a mi habitación, pueden tomar lo que quieran, están en su casa" Rebeca se levantó y se fué a su habitación, mientras Cynthia y yo nos quedamos ahí viéndonos

Transcurrieron las horas, el día se veía más claro, dejamos la televisión prendida para estar al pendiente, tomamos unas galletas de la alacena de Rebeca, que pronto nos acabamos por la ansiedad

Dieron las 12 de la tarde, y el desorden en la ciudad se había ido, o al menos ya no se escuchaba tanto estruendo como en la mañana

Rebeca y Meryl aún no bajaban, decidimos ir a buscar a Rebeca, y al pasar por la habitación de Meryl, escuchamos como balbuceaba y gateaba, seguimos a la habitación de Rebeca, llamamos a la puerta pero no respondía, nos empezamos a preocupar, y entramos, intentamos despertarla, y  nos di cuenta por el aroma, y la mancha en la cama, que se había hecho del baño

"Vámonos" le dije a Cynthia, jalándola del brazo hacia afuera de la habitación, cerré la puerta y bajamos de nuevo a la sala, prendí de nuevo la tele, y estaba el noticiero

*Noticiero en la televisión*
"Le sugerimos que si se encuentra con uno de los gateadores, se mantenga alejado, evacue de inmediato y...*

La transmisión se cortó, y la tele se quedó en negro

"¿Hacia dónde vamos?" me preguntó Cynthia
"¿Qué?"
"En la tele dijo que evacuemos"
"Pero no podemos dejar a Meryl y Rebeca"
"Tampoco podemos llevarlas"

No teníamos muchas opciones, tomamos nuestras mochilas, las vaceamos y tomamos algunas cosas, comida, pañales, etc.

"¿Sabes manejar?" le pregunté a Cynthia
"Hace mucho que... Puedo intentarlo"

Tomamos las llaves del coche de Rebeca, y nos subimos en el, Cynthia condujo sin rumbo por un momento, hasta que le sugerí ir a mi casa, cuando llegamos, lo primero que pensé, fué en buscar a mis padres, pero ninguno de los 2 estaban, ni siquiera habían llegado anoche, tomamos más cosas y nos subimos de nuevo al coche, y justo antes de arrancarlo, Caleb se acercó al coche, parecía huir de algo, se veía desesperado, se subió al coche y nos gritó que avanzaramos, Cynthia lo dudo por un momento, pero vió a un gentío gateando velozmente hacia nosotros

"¿Qué carajos está...? ¡Vámonos!"
"¡Arranca!" gritamos Caleb y yo

Cynthia arrancó, y nos alejamos de ahí rápidamente, manejó sin rumbo, ninguno de los 3 sabíamos a dónde ir, y así continuamos por varios kilómetros

Fugas en PañalesWhere stories live. Discover now