– ¿Skander que fue todo eso? – Su tío se acercó – ¿a quién mato o intento matar?

Se sentó tras su escritorio con todos viéndolo y esperando explicaciones – Aquel chico cuyo cuerpo encontraste. – Vio al Capitán – También de la muerte de las demás personas en los otros reinos – Nadie parecía entender por qué realmente la culpaba – Sin olvidar que intento matarlos – Aiden vio que Skander parecía aturdido, parpadeaba más de lo normal.

– ¿Qué? – Miles no le creía – Ella nos ayudó.

– ¿Cómo supo donde estarían y así enviar "ayuda"? – Nadie supo que decir – Lyssandra y yo hemos hablado de lo que sucede y Jade es realmente sospechosa, todo apunta a que ella es la culpable.

– ¿Lyssandra? – Kenneth soltó una risa – Ella ni siquiera se ocupa de su propio reino, dudo que su padre la quiera cerca. No has recibido ninguna carta pidiendo que ella vuelva o ¿Si? – Apretó la mandíbula – No te has puesto a pensar en el ¿por qué? – Se quedó callado.

– Está vez ella te manipuló. – Zeth se sentó.

– Y tú te dejaste. – Continuo Killian.

Su tía tomo lugar junto a su esposo – No puedes dejarla ahí, es una Reina. Al menos la hubieras confinado a su habitación. – Su mirada era de preocupación. – Falta día y medio para Yule.

– Jade no hizo esas cosas y entiendo que dudes, pero ella no lo hizo – Aiden había guardado silencio – Ha estado en el castillo todo el tiempo, cómo podría ir y venir de reino a reino matando y dejando cuerpos a propósito – recordaban aquel secreto que eran obligados a guardar, era una asesina. – El cuerpo del chico estaba lleno de tierra y de cosas que apuntaban que el lugar donde murió fue en el bosque y ella ayudo a salvar a mi familia.

Se levantó – ¿Ahora la defiendes? – No contesto – Déjenme solo – pidió sintiéndose muy cansado.

Aiden caminó a paso apresurado – ¿A dónde vas? – Miles lo alcanzó.

– A ver a Jade – quería dejarle en claro que él no había tenido nada que ver con todo esto.

– Voy contigo.

***

La encerraron no sin antes encadenarla de manos y pies – Cuánta seguridad – se burló, pero ellos solo rieron en su cara, lo que le quitó la sonrisa de la suya.

Bajaron una pequeña palanca haciendo que Jade sintiera una intensa descarga que le recorrió todo el cuerpo, dejándola aturdida –Será mejor que te comportes – la chica le advirtió con diversión – Creí que eras más fuerte, ¿No lo eran los Puros?– Volvió a soltar una descarga.

***

Beth se acercó a la entrada pero la detuvo un guardia – No puedes pasar.

– Pero... – no tenía poder sobre ellos – por favor, solo unos minutos – se negó poniéndose en medio de la entrada de forma intimidante.

Él sabía quién era y que venía con Ian, el príncipe desertor – Vete o también te encerrare.

– Si tú lo haces, yo mismo te llevaré a las Minas – se acercó a él – y me encargaré que todos sepan que eres un guardia, son muy odiados por allá.

El chico se enderezó – ¡Capitán! – Ahora era él quien estaba intimidado – Una disculpa, no sabía que venía con usted.

– No importa con quién venga, trátala con más respeto. – Beth se sintió rara al ser defendida de esa manera, no había establecido ningún tipo de relación con Aiden o alguien más de la familia de Ian.

Guardianes: El Legítimo Rey.Where stories live. Discover now