Savage •Y.M• [En Pausa]

🌴 Q U I N C E 🌴

—¿Solicitaste nuestra presencia?— preguntó el moreno apenas entraron a la casa del Jefe, dentro ya se encontraban YoonGi y JungKook.

—Los ancianos planean darle una fecha a la ceremonia de unión...

Los tres hombres quedaron en silencio ¿Qué podían decirle a su amigo en esta situación? ¿Qué todo estaría bien? Porque no era así, todo era una mierda muy jodida.

—¿Pues que mejor que comenzar a cortejar a JiMin? No hay nada que te lo impida, ni siquiera los ancianos podrían— opinó HoSeok.

—No lo sé HoSeok... Es... Yo siento algo... No se describirlo, es como si me detuviera de cualquier cosa que pudiera hacer.

Los guerreros fruncieron el ceño confundidos ¿Algo que lo detenía?

—¿Pero qué te detiene hombre? Eres el jefe, nadie puede decirte que hacer y que no. No es cómo si los ancianos te fueran a hechar de la tribu o algo parecido— le recordó NamJoon.

El pelinegra lo pensó por algunos segundos.

¿Que lo detenía? Era el chico perfecto en el momento correcto.

—Creo...— comenzó a hablar —Creo soy yo el que me detiene...

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—Gracias por la ayuda SeokJin Hyung, estos escritos nos ayudarán mucho con la investigación— comenzó hablando el joven rubio.

—Si, de no ser por usted aún seguiríamos observando plantas inútiles por horas— dijo en el pelirrojo en forma de reproche.

El castaño intentó ocultar su sonrisa sin éxito, ambos chicos eran muy divertidos.

—No hay de que, es todo lo que puedo darles por hoy, pero mañana me traerán más provisiones para la casa de reposo, así que los espero ahí a primera hora.

Jin observó como ambos jóvenes se alejaban y entró de nueva cuenta a la casa.

Aún tenía la mayor parte del día libre, una tarde recostado en su hamaca fuera de la casa viendo a los pajarillos ir y venir no se escuchaba nada mal.

Cambió sus ropas de trabajo por telas más frescas y sueltas y  dispuesto a relajarse, se recostó en la cómoda tela meciendose de un lado al otro con uno de sus pies.

A lo lejos escuchó pasos calmados acercarse a su hogar, no entró en pánico y que solo había una persona que lo visitaba a esas horas de la tarde.

—Comienzo a pensar que NamJoon lo tiene muy consentido Hyung...— comenzó a burlarse por la forma tan relajada en la que había encontrado al mayor.

—Solo disfruto los maravillosos placeres de la selva muchacho malcriado— respondió sin abrir sus ojos.

Escuchó cómo el sonido de una de las sillas de madera que tenía fuera de casa era arrastrada ligeramente cerca de él para posteriormente ser ocupada por el joven hombre.

—Bueno, admito que el lugar donde Nam Hyung construyó su casa es realmente agradable.

—Lo sé, aunque admito que también tuve algo que ver en ello— el castaño sonrió y comenzó a abrir los ojos calmadamente para acostumbrarse a la luz del sol que aún estaba presente en el cielo —Supongo que vienes por la medicina de tu abuelo ¿Verdad?— preguntó una vez que acostumbró su vista.