CAPITULO 24

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-Gun.. - tome sus manos con delicadeza, ya no quería causarle más sufrimiento pero él tenía que saber esto -quiero que escuches con atención lo que voy a decir y por lo que más quieras, trata de mantener la calma-

-Off, porfavor no me asustes-

-Tu madre Gun, tu madre no está muerta- su cara tuvo un cambio drástico y cayó de rodillas mientras lloraba.

-¿Por qué?... -¿Por que me hacen esto?, creo que ya no puedo soportarlo más- sus ojitos llenos de tristeza encontraron los míos, quería acabar pronto con esta situación y ver nuevamente esa sonrisa que iluminaba su rostro y mi vida. 

-Amor, puedes soportarlo, por favor tienes que ser fuerte, por nosotros, por nuestros hijos...mira ahora lo que haremos es ir a tu casa y sacaremos a los niños de ahí... Jum y Maly nos están esperando, tenemos que ir por ellos, amor tienes que ser fuerte, no podemos dejar que se los lleven- mis palabras lograron remover algo en él, con cuidado lo ayude a ponerse de pie.

-Vamos Off, vamos a traer a casa a nuestros hijos- respondió y asentí con una sonrisa.   

Los cuatro pensamos en una manera de sacar a los niños  de casa de Mond, era un plan perfecto no podía fallar, después de que nuestros hijos estuvieran bien nos aseguraremos de que Mond y el padre de Gun pagarán por el daño que nos causaron y finalmente regresaremos a Tailandia y buscaremos a la madre de Gun, con respecto a eso aún me sentía algo temeroso de la reacción de Gun, no le había dicho toda la verdad, su madre está viva pero ahora se encontraba en un centro psiquiátrico. 

Salimos en el auto de New y a medida que nos íbamos acercando la mano de Gun apretaba con fuerza la mía, intenté relajarlo acariciando su mano, dejándole saber que todo estaría bien.

-Ya casi llegamos- dijo cuando New dio vuelta la calle y se detuvo frente a un edificio. 

-Gun intenta estar lo más tranquilo que puedas y si ves que algo sale mal por favor no intentes hacer las cosas por tu cuenta, ven y buscame, juntos encontraremos otra solución- asintió dejándome saber que había entendido, aun asi mi corazón se sentía inquieto, quería ser yo el que fuera por los niños pero Mond me vería y solo complicaría las cosas.

Como lo habiamos planeado Gun y New salieron mientras Tay y yo movimos el auto unos metros más hasta esperar la señal que nos daría New para ir por ellos. Gun tenía que entretener a Mond hasta que los niños estuvieran abajo y luego él bajaría.

Seguí con la vista a Gun hasta que ya no lo vi, mi corazón empezó a martillar fuerte en mi pecho, New se quedó en la puerta esperando a los niños. 

Los minutos siguieron pasando y estaba por enloquecer, quería salir y ver qué era lo que les tomaba tanto tiempo .

-Tay esperame aqui, voy a ver qué sucede- dije

-Estas loco no puedes moverte de aquí, solo espera un poco más si Mond llega a verte se dará cuenta-

-Tay entiende no puedo esperar más....- Y cuando estaba por salir el silbido de New nos dio la alerta, pronto Tay movió el auto...

Mi corazon latio fuerte cuando vi a los dos pequeños de pie junto a New, Maly tenía una mochila pequeña que colgaba una muñeca sobre sus hombros y Jum jugaba con un pequeño oso, los dos se veian preciosos eran iguales a Gun.   

Sin darme cuenta el momento exacto ya estábamos fuera del edificio, abrí la puerta y New hizo que mis pequeños entrarán, una corriente de electricidad y alegría recorrió todo mi cuerpo al verlos de cerca.

-¡él señor de la sonrisa bonita!- sus ojitos se iluminaron cuando dijo eso, era mi pequeño y Maly gritaba junto a él.

Se ven tan inocentes y felices, ni siquiera sabían lo que estaba sucediendo, viven en su mundo, donde nada malo sucede y estoy feliz por verlos así, a pesar de la tristeza y angustia en este momento una luz de felicidad brilla y nos contagia a todos.

-Bien, ahora tenemos que espera a Rome... perdón Gun- New me sacó del momento feliz en el que estaba cuando me recordó que Gun aún no estaba con nosotros.

Esta vez nos estacionamos más cerca solo para esperar a Gun e irnos de aquí, New se quedó en el mismo lugar para darnos la señal, pero los segundos se convirtieron en minutos eternos.

-Papii, se quedo adentro podemos regresar- pregunto Maly.

-No pequeña, Papii estará aquí en un segundo- me obligue a pensar que así sería pero los minutos seguían pasando y él no salía.

En un momento mi celular empezó a sonar dejándome saber que un mensaje había llegado, de mala gana lo saqué de mi bolsillo esperando ver el contacto de algún socio pero no era así.

-Off vete, llévate a los niños y por favor cuida bien de ellos-

-Que te sucede- escuche a Tay decir. pero no podía reaccionar, Tay me quito el celular y leyó el mensaje mientras yo intente salir del auto, pero no pude Tay puso los seguros.

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si puedo mas tarde subo otro cap

 

Tu sonrisa, Tu mirada - finalizadaWhere stories live. Discover now