Vuelta por el Universo| Soda Stereo

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Entraron a mi pieza y yo ni siquiera me volteé a ver quien era, no quería ver a nadie.
-Toma hija, ponete esto encima de tu ropa y anda igual.- Esa voz suave era la de mi mamá.
La miré y me dió mi campera negra con pelitos artificiales sobre la punta de la capucha. Me la puse y no dudé ni un segundo en sí irme o no, solo me fuí.
Llegué recién para la segunda canción, estaba repleto de gente, casi no podía caminar, traté de llegar al frente del escenario lo más que pude para que Gustavo me viera, y así fue, me vió y sonrió. Apenas terminó la canción hicieron una pausa.

-Pensé que no ibas a venir- Me saludó
-Casi, perdón por llegar tarde.
-No pasa nada, quedate por acá hasta que terminemos, ¿dale?
-Sisi
Desde estaba solo alcanzaba a verlo a él, escuchaba la música y de vez en cuando sentía como una adrenalina media rara, quería bailar como una loca.
Lo veía a Gustavo tan bien, tan concentrado, tan feliz por lo que estaba haciendo, ese era él, era música. Todo lo que sentía era música, era hermoso.
Terminó el concierto, yo me había cantado todas las canciones como siempre.

-¿Vos que vas a hacer ahora?-Me preguntó Gustavo.
-Supongo que volver a casa
-Ah bueno, está bien.
-¿Por?
-Porque tenemos que tocar en otro lugar ahora y quería que vengas- Me miró. Es bastante especial e importante
-Si, voy
-¿Segura? Es más tarde y lejos.
-No importa, voy.
Esto de pensar ni un segundo a veces salía bien. Estaba yendo a otro show con los chicos y yo casi no hablaba porque no podía creer lo que estaba pasando.
Al llegar fuimos a un sector donde ellos se cambiaron y se maquillaron un poco, bien a su onda. Los chicos comenzaron a tocar, otra vez las mismas canciones y la gente super eufórica. Gustavo en un momento dice, "Les queremos presentar una canción nueva que estuvimos practicando banstante. Es un lento, les recomiendo buscarse a alguien especial para bailarla"
¿Que canción habían estado practicando? ¿Un lento? Un lento... ¡TRATAME SUAVEMENTE!
En ese instante en el que él termina de hablar se voltea y me mira. Fueron 5 segundos en los que sentí presenciar un universo ante nuestras miradas. Aunque cada momento con él era importante, yo sentí que este fue el más especial.
"Quiero que me trates suavemente"
No podía quedarme callada, era la primera vez que la presentaban y yo estaba ahí. Gustavo era cada vez más increíble y yo estaba viendo de cerca lo increíble.
Estallaba de emociones, quería sentarme en algún lugar y llorar de la emoción.

-Estuvieron geniales chicos, como siempre.
-¿Vos estuviste llorando? ¿Por qué lloras?- Me decía Zeta. Me largué a llorar peor y lo abracé.
-Ay, soy muy sensible, perdón- Los tres se rieron y me abrazaron.
-Deja de llorar nena, se te va a correr todo el maquillaje- Se reía Charly.
-Tenes razón- Me reí
-Bueno, basta de risas y vayamonos de acá- Gustavo me dió mi abrigo y me agarró la mano. Es por si te perdés, tenemos que pasar por la multitud.
Zeta y Charly iban atrás mio, y Gustavo iba adelante agarrandome la mano. En ningún momento me soltó, me agarraba muy fuerte pero era porque había muchísima gente. Todos les gritaban cosas, obviamente eran halagos sobre el talento que tenían, pero las chicas estaban locas por la belleza que cargaban Gustavo, Charly y Zeta. Nos empujaban y parecía que no llegábamos más a la salida. Derrepente siento como si me hubiera estallado la cabeza contra la pared, pero no, alguien me había pegado exageradamente fuerte. El golpe fue tal que me hizo caer al suelo dándome la cabeza contra el mismo. Estaba totalmente mareada y sentía un leve silbido en mis oídos. En el instante que caí Gustavo se dió vuelta y vió que era una mujer, solo escuchaba gritar "¡¿Vos estás loca!?". Zeta, en ese instante me agarró y salió corriendo hacia la salida, mientras que Charly trataba de calmar a Gustavo hasta llevarlo a la salida.
De verdad no podía explicar lo fuerte que me había pegado aquella mujer, por poco no quedó inconsciente.
-¡¿Gustavo vos estás loco!?- Le gritaba Charly. Es una mujer, no podes reaccionar así.
-Ya sé, pero no parecía una mujer, aparte no me di cuenta, mirá como la dejó.
-Bueno ya está, Tranquilicense- Dijo Zeta.
Los tres se subieron al auto, y yo solo podía escuchar a Gus llamarme.
-Delfi, ¿Estas bien? Por favor, decime algo.
Sonreí y canté como pude un poquito de esa canción que me había hecho emocionar muchísimo. Gustavo sonrió y me siguió la canción un poco, luego se quedó hablándome al oído hasta que llegamos a su casa.

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Gracias por leer.
Pronto publico la continuación. <3