CAPÍTULO 1.

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POV. BAEKHYUN.

Desperté en un lugar oscuro, mis muñecas ardían, sentía algo cálido resbalar por mi cabeza  y la comisura de mis labios. No quería creer que esta persona estuviera diciendo la verdad…

Mi padre no sería capaz de traicionarme de esta manera, ofreciéndome como carnada a un grupo mafioso, al cual le debía dinero, abandonándome allí y dándome por muerto al no poder pagar esa deuda.

-Tu padre te vendió para saldar una pequeña deuda que tenía con nosotros, asi que, trabajarás para mí desde hoy. Bienvenido a tu nuevo hogar Byun BaekHyun.- Esas fueron las palabras que esa persona utilizó antes de que sus hombres me encerrarán en este lugar tan frío. Uno de ellos se acercó nuevamente a mí para desatarme y dejarme sobre la pequeña cama de la habitación.

Para luego retirarse pero antes de salir se volteó a verme y me sonrió con pena, como si tal vez se estuviera disculpando, para terminar de salir seguido de los demás. Me acurruque en una de las orillas donde lloré hasta que mis ojos se negaron a derramar más lágrimas, para finalmente quedarme dormido.

POV. CHANYEOL.

[A la mañana]

-¿Cómo es posible que huyera y que nadie aquí lo hubiese visto hacerlo?- Preguntó uno de lo tres hombres que jugaban a las cartas mientras que otro de los hombres sólo observaba en silencio desde la punta de la mesa.

-Si lo supiéramos…¿crees que aún estaríamos aquí jugando cartas?- Le constestó el otro dándole un zape en la nuca.

-Pero…- Se quedó en silencio mientras un puchero se formaba en sus labios. -¿Usted qué piensa Jefe?- Preguntó ahora fijando la mirada en la tercer persona en la mesa.

¿Qué era lo que yo creía? Pues, que obviamente mataría a ese bastardo por haber huído llevándose consigo mi dinero. Que además, como no lo creyó suficiente, vendió a su “querido” hijo. Aún sabiendo las consecuencias que eso tendría para ese niño…Puto bastardo listo.

-Creo que se terminó el juego.- Dejé las cartas sobre la mesa demostrando así que había ganado y mientras un suspiro se escapaba de la mesa, me puse de pie comenzando a caminar al otro lado de la habitación, para luego mirar la hora en ese viejo reloj de pared frente a mí. –Hora de tomarse un descanso.- dije viendo como todos salían corriendo.

Festejando porque finalmente irían a descansar despúes de largas horas encerrados aquí trabanjando. Caminé por la casa aburrido, pensando que tal vez debería haberme ido a beber con los demás, terminé frente a la puerta de la habitación del hijo del bastardo traidor.

Ingresé en esta en completo silencio y recorrí el lugar con la mirada buscando al enano sin encontrarlo, hasta que escuché un muy leve sollozo proveniente de una de las esquinas de la habitación. Me acerqué lentamente sentándome a su lado pero el silencio permanecía allí, sólo se oían sus sollozos en esta habitación rodeada de oscuridad y más de esta misma.

-¿Por qué me hizo esto?- Preguntó entre sollozos. –Soy su hijo…- le miré en silencio y luego abrí la boca para contestar. Sabía que él no podía verme por la oscuridad de la habitación.

-No creo que le interesará eso al momento de dejarte en nuestras manos.- contesté poniéndome de pie, ya que el descanso estaba por acabar y los muchachos no tardarían en volver.

-¿Te irás también?- Preguntó dejándome inmóvil en mi lugar por un momento. ¿Cree que voy a quedarme porque él diga eso? Pff…Debe estar bromeando.

-¿Por qué me quedaría?- Contesté avanzando hasta la puerta, cerrando esta detrás de mí al salir y yendo nuevamente por el pasillo hacia la sala para dormir un rato. Porque realmente deseaba que mi comportamiento de hace un rato antes, estuviera relacionado con mi falta de sueño.

POV. BAEKHYUN.

Me había quedado dormido luego de que esa persona se fuera de la habitación. No podía entender porque le dije eso a él, ni siquiera lo conocía como para pedirle tal cosa. Aunque su voz me parecía conocida. Byun BaekHyun aún eres niño idiota. Me regañe entre sueños.

Cuando puedas dame una oportunidad. - ChanBaekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora