El Trato y El Sacrificio 🎭

Capítulo 12 "Pesadillas"

- ¿Pero cómo lo hiciste sin... - pregunto Derek mirando al casillero y a todas las máscaras allí escondidas.

- ¿Sin dañar a nadie? - terminó la pregunta y aquel rostro de sorpresa de él chico pronto se transformó en uno de indulgente ambición. "Ella era perfecta".

- Tus valores son irrompibles.

- Lo son. Y si vuelves a amenazarlos - se acercó - Lo vas a lamentar - sentenció enseñándole el plateado encendedor en su mano el cual hizo una pequeña chispa en la oscuridad iluminando su rostro.

Una sonrisa también interna también obtuvo Derek. Él ya no tenía dudas, aquella estudiante sería su sacrificio perfecto.

- ¡Felicidades! - exclamó - Ya comienzas a sonar como una verdadera jugadora - agregó sonriendole diabólicamente.

Rachel entonces se apartó en seco sintiendo como un escalofrío le bajaba por su espalda hasta la planta de sus pies.

- ¿Que? ¿Dije algo malo? - preguntó a drede. Comenzaba a adorar la forma en la que sus palabras la afectaban y con ellas las reacciones tan indisimulables que esa estudiante le regalaba - Es algo de lo que deberías de estar orgullosa - explicó.

- No. No lo es - afirmo - Tú tienes una forma muy retorcida de ver las cosas - lo culpó.

- Y tú una muy ingenua - dijo y se puso a recoger las máscaras - Tarde o temprano vas a caer en este juego seas o no una jugadora.

- Tengo la esperanza y mas que nunca la seguridad de que no, es una lastima que tú no puedas tener lo mismo - refutó.

- ¿Y quién dijo que no? - reprochó - Aquí tengo mi fé y esperanza - explico elevando su pistola y luego apuntandose a si mismo.

La expresión de Rachel en vez de volverse molesta o divertida fue triste porque ella bien podía ver a través de esos ojos sin brilló; el vacío y la desesperanza ocultados solo tras el orgullo y la autosuficiencia.

- ¡Oh si. Seguramete estás salvado! - comentó con sarcasmo - Mejor continuemos - ordenó y el sin poder refutar lo hizo.

*********🎭********

El putrefacto aroma que ya le resultaba familiar les recordó a ambos que avanzaban hacia el mismo pasillo de antes.

- Estamos dando vueltas en círculos.

Rachel detuvo el paso ante su comentario.

- Eres peor que un niño malcriado - murmuró con disgusto - Y además... estoy algo cansada - avisó chocando su espalda contra un azul casillero. Estaba dispuesta a descansar; pero un sobre rojo capturó su atención. El mismo escapaba de debajo de un libro en el sucio suelo.

No sabía cómo. Pero de todos los libros y papeles tumbados en aquel pasillo sabía que ese era importante y que de alguna extraña manera ella conocía con exactitud la textura de él, su peso incluso sin haberlo cargado antes. Simplemente sabía que ese papel le era conocido y la había estado llamando hasta ese lugar, porque quería ser encontrado. Entonces estiró el brazo hacia él y lo tomó.

Cuando sus dedos lo tocaron Rachel se tambaleó hacia atrás solo leyendo él nombre escrito en letras oscuras: "Jonathan". Y como si aquello fuera a hacerle daño lo soltó rápidamente.