[Finalizado] A través del Tiempo [Temporada 2]

[14] Donde todo muere y alguien renace

Alhena sintió un retortijón en el estómago completamente nerviosa sin saber reír o llorar por la mera burla de aquel titan como si fuera el gran chiste del momento; la angustia le afligió el alma en lo más recóndito de su ser, intentó buscar una salida, pero solo recibió una bofetada que por un instante pensó en perder sus dientes.

—¿No vas a llorar? —indagó el rubio bajo la expresión negativa de la chica—. Esa solo fue una caricia, no deberías quejarte.

—"Suelta y verás de lo que soy capaz". Es lo que dice—la pelirosa dio dos pasos atrás sin cambiar su expresión seria y vacía—. Todos ustedes ¿Qué esperan? Vayan y acaben con todo ser vivo que encuentren en el camino.

El ejército que acompañaba a los tres titanes corrió apresuradamente entre las sombras. Aquellas eran criaturas de un aspecto antropomorfo, otros mismos demonios y algunos no poseían una forma solida por lo que Alhena supo que estaban en graves aprietos. Intentó levantarse, hacer lo que fuese necesario para llamar la atención de todos allí más sus posibilidades decaían a cada segundo en especial al ser sugestionada por Iapetos a mantenerse de rodillas aun adolorida por el golpe en la cara; sin embargo, lo más básico y ordinario fue lo que se le ocurrió hacer en esa situación tan terrible, y fue lo que llevó darle un cabezazo al rubio en toda la cara, se puso de pie y le azotó un puñetazo a Thea, más a la pelirosa no tuvo sentido pegarle sino aprovechar para correr.

Los dos titanes bramaron en furia siendo que la menor se quedara de pie sin hacer nada, porque sabía que sus hermanos se lo habían merecido, aunque tal vez su lealtad hacia Kronos le obligaba a no atentar contra Alhena por ello solo estiró su mano para permitir que su ejercito fuera colina abajo hacia donde el castillo de Pandora.

—De encontrarse con el caballero de Géminis, quítenle la armadura y no permitan que alguno de mis hermanos lo hiera mortalmente. Lo necesito con vida.

De su sombra, unas masas oscuras comenzaron a manifestarse y con ello salir huyendo a una increíble velocidad que supuso nadie lograría darse cuenta de sus soldados; ella era mística, pero también buscaba no llevarse siempre de la situación más desde que abrió los ojos como una titan tuvo una visión acerca del poder de aquel caballero de Athena y lo que sería capaz contra un dios como Kronos, aunque no podía mitigar la inquietud que le generó el comportamiento del viejo sabio con respecto a la vida de ese mismo humano.

—Él ya lo conoce, seguramente sabe quien es en realidad el viejo sabio.

Mientras la pelirosa mantenía su mirada hacia el castillo, pudo percibir que un cosmos iba acercándose a velocidad a la zona donde sus hermanos y esa mujer corrieron. Sus intenciones estaban lejos de obedecer al hombre que aconsejaba a su hermana mayor por tal motivo que prefirió ignorar toda batalla innecesaria dado que su única intención recaía en buscar opciones que la llevaran a encontrar cualquier indicio de traición, y, cerrando los ojos se enfocó en perseguir a la chica que huía despavorida por el bosque, la cual no hacia más que evadir los ataques de Iapetos.

Alhena podía ser bastante torpe e imprudente, más su sentido de protección era lo bastante coordinado como para correr por su propia vida; su fin solo era darles más tiempo, cualquier que pudiera ser, lejos de las manos de los enemigos, aunque tampoco aseguraba atraer a la chica de cabellos rosado que más atraía su temor.

Una explosión la hizo volar por los aires cayendo de espaldas casi sintiendo que uno de sus huesos se rompió. La lluvia caía torrencialmente, casi empapándola completamente aunado al lodo que cubrió gran parte de sus ropas y su rostro.

"Te restringiré la sensación del dolor", había dicho el ente que moraba en su interior, por su timbre de voz supo que estaba bastante preocupado. "No podemos hacerles frente a dos de ellos"