La Quinta Ola - El Inicio (Ben Parish)

Capitulo 4

-¿Cómo creen que será?- pregunta Ben.

-¿Cómo será qué cosa?

Estamos los tres recostados en el césped del campo de fútbol, con las bandejas del almuerzo junto a nosotros. La práctica de fútbol americano quedó suspendida, al igual que todas las actividades escolares al aire libre. Es como si los profesores no quisieran que estemos expuestos ante la imponente presencia de la nave nodriza.

Pero nosotros, al igual que la mayoría, vinimos a almorzar afuera para observarla, tal vez esperando que mágicamente suceda algo. Después de tres días la mayoría empezó a perder el miedo y a sustituirlo por curiosidad, ya que no todos los días una nave alienígena se detiene a flotar sobre tu ciudad. A otros les daba igual, lo que era entendible ya que desde que había llegado no había hecho nada. Solo se quedó ahí, suspendida en el cielo.

Yo no me encontraba en ningún grupo en particular, no sentía miedo, aunque sí desconfianza. Lo que me sucedía era algo distinto, la situación era tan surrealista que por momentos no creía que estuviese pasando. Una parte de mí quería ignorar todo, pero otra parte de mí no. Respeto, eso me provocaba. No miedo, no desinterés, tampoco demasiada curiosidad, no estaba ansiosa con que sucediera algo.

Comenzamos a llamarles los otros. Otros, así, con mayúsculas. Solo eso podíamos hacer, darles un nombre y especular, idear teorías conspirativas, compartir videos en internet, publicar un tweet sobre como podrían lucir... las noticias comenzaron a parecer sacadas de una película, todo pasó a segundo plano para mí, o al menos eso intentaba. No quería que mi vida girara en torno a ellos.

Aun así no lo podía evitarlos, a veces con Ben y Daniel, con mis padres, con mis compañeros de curso... era imposible escapar de todo aquello. Siempre aparecían, no importaba de qué se tratara la conversación, en algún momento hablabas de los Otros.

-La invasión- me responde Ben.

-¿Invasión?

-¡Vamos, Liv! No creerán que solo vinieron para quedársenos viendo- dice él.

-No, claro que no. Tal vez solo quieren nuestra agua, así como en esta película... no recuerdo su nombre, pero... sí, probablemente quieren algo de nosotros- Daniel había estado en silencio hasta ese momento, ocupado con su celular. Él era de los que sentían curiosidad y leía teorías en foros de internet.

-Si, nuestro planeta. Así que van a exterminarnos para quedárselo- digo yo.

-Como en el "Día de la Independencia".

-Daniel, ya basta de películas.

-Bueno, pero tal vez alguna de ellas nos ayude a sobrevivir, y vas a necesitar un maestro de la ciencia ficción, Parish- dice Daniel sonriente -. Y no voy a compartir mis secretos de supervivencia contigo. Con Liv sí, vamos a ir juntos a cazar aliens por todo el planeta.

-Está bien- digo sonriendo ante lo ridículo de la idea.

Nos quedamos en silencio unos segundos, observando el cielo. -¿Y qué haremos ahora?- pregunto.

-Pues nada. Continuar con la rutina- dice Ben.

-¿Amigo, estás hablando en serio? Hay una puta nave alienígena sobre nosotros - Daniel se incorpora.

-Sí, Ben. No podemos ignorarla y continuar como si nada- digo.

-¿Entonces que podríamos hacer?

-Bueno... no lo sé. Reunir comida y encerrarnos en nuestras casas a esperar el apocalipsis. Podemos reunir gente, ya saben, que tengan habilidades superiores y salir a patear traseros extraterrestres, claro, en caso de que tengan traseros...