Especialᴼᵗ⁸

19K 2.2K 3.4K
                                    

Era el primer día de curso para muchos estudiantes coreanos.

Hyunjin se encontraba bastante perdido entre el mar de estudiantes que estaban a su alrededor. Acababa de tocar el timbre que indicaba que comenzaba el descanso, pero él no sabía muy bien dónde ir a pasar esos minutos.

Se encontraba de pie en el pasillo, cerca de una de las paredes para no estorbar a la gente que quisiera pasar. Miraba a los lados en busca de algún lugar tranquilo en el que pudiera sentarse a esperar, sin ser molestado por nadie, a que el timbre volviera a sonar y él pudiera regresar a su aula.

Mientras miraba hacia uno de sus costados, notó como alguien, con timidez, le tocaba el hombro para llamar su atención, causando un brinco de sorpresa por parte del azabache, que se alejó con velocidad de aquella persona mientras se giraba, pudiendo así encontrarse cara a cara con Kim Seungmin.

Nunca habían hablado, pero se conocían desde que entraron a primaria. Compartieron un par de asignaturas en esos años, pero nunca cruzaron más palabras que alguna por cortesía.

El castaño aún mantenía su mano sobre el hombro contrario, incomodándolo por sobremanera, consiguiendo que se alejase unos metros para apartarse del contacto.

No lo soportaba. Hyunjin no conseguía tolerar el contacto, lo intentaba y no podía, se angustiaba al no hacerlo. Se sentía mal.

–Uh, ¿Necesitabas algo? –Indagó el azabache, mirándolo con desconfianza. Hacía mucho que no mantenía una conversación real con alguien de su edad, se le hacía raro estar a punto de comenzar una.

–Bueno, no... Pero... –Kim se rascó la nuca lleno de nervios. Había notado la tensión del contrario y tenía miedo de estar incomodándolo.– Nos ha tocado este año juntos en el mismo salón –Comenzó a explicar, bajo la atenta mirada de el del lunar.–, y he pensado que, ya que nos conocemos desde siempre, podríamos empezar a ser amigos –Su voz comenzó a volverse un murmuro bajito a medida que continuaba con su diálogo.–... para no sentirnos solos en clase.

Hyunjin lo miró en silencio, dubitativo. Lo que le decía Seungmin era que, después de tanto tiempo, comenzase a relacionarse con sus compañeros.
Le tentaba la idea de negarse a esa ofrenda, pero ya estaba cansado de pasar solo los recreos, por lo tanto, sin darle muchas más vueltas de las que ya le había dado, procedio a dar su afirmativa:

–Uh, vale –Asintió. Seungmin sonrió complacido, dispuesto a colocarse más cerca de él, pero se detuvo al notar el cuerpo del alto aún en tensión. Hyunjin tampoco se sentía cómodo con la cercanía de otro cuerpo.– Esto... Prefiero no estar muy cerca de cuerpos ajenos. –Masculló, avergonzado. Seungmin ni si quiera pudo sentirse mal al haber escuchado eso, pues notaba que el azabache no lo había dicho con mala intención.

El castaño no preguntó la razón, sentía que era algo bastante personal y que, siendo el primer día que hablaban, no le correspondía indagar en el tema. Aún así, en ese momento, pudo comprender por qué Hwang siempre estaba solo.

–Está bien –Se encogió de hombros, quitándole importancia al asunto para que el azabache no se sintiera mal.– ¿Quieres que vayamos afuera? –Ofreció, viendo que Hyunjin tampoco parecía muy cómodo en el pasillo.

–Por favor. –Murmuró, causando una suave sonrisa en la expresión del castaño que él, con timidez, consiguió corresponder.

–No sabes hacer nada, Felix, en serio –Se quejó Changbin, observando, cansino, como el balón volvía a ir hacia una dirección en la que él no estaba.

–No soy bueno jugando al fútbol, ¿De qué te sorprendes? –Respondió el pecoso, dejando caer las manos sobre sus propios muslos, con pesadez.

Just a little kiss || HyunIn Donde viven las historias. Descúbrelo ahora