Narra Alba
No me gustaba mentirle a mi mujer. Me sentía realmente mal ocultándole la verdad a Nat pero era totalmente necesario. Salía de la universidad tras dar mi primera clase para encontrarme con Sabela. Estaba muy nerviosa, esto podía salir o muy bien o muy mal.
Por fin llegué al sitio donde había quedado con mi amiga. Sabela me esperaba en la puerta del local mirando el teléfono. Aparqué el coche y me bajé de él cogiendo el bolso. Sentía que los nervios me consumían por dentro y que en cualquier momento me iba a caer al suelo.
-Hola Alba.- Me dijo Sabela sonriendo.
-Hola Sabeliña.- La saludé y le di 2 besos.
-¿Preparada?- Dijo mientras se dirigía a la puerta de la clínica.
-No lo sé Sabela.- Nos sentamos en las sillas de recepción a esperar.- ¿Y si esto sale mal? ¿Y si sale bien y Nat me odia por ocultárselo? ¿Y si no quiere?
-Alba respira, que te aceleras que en tu estado no es bueno.- Me dijo mi amiga pasándome un brazo por los hombros.- A ver yo no sé si va a salir bien o no, soy enfermera no ginecóloga.- Ambas reímos.- Y si no sale bien, por lo menos lo has intentado.- Me dejé caer en su hombro.- En cuanto a tu mujer, no te preocupes. Natalia te quiere con todo locura sería incapaz de odiarte y menos por quedarte embarazada.- Asentí algo más tranquila.- Además, cuando vinimos la semana pasada me dijiste que Nat quería tener hijos contigo.- Asentí recordándolo.
Flashback
-Creo que a este ritmo Miki y Helena van acabar odiándonos.- Rió mi mujer mientras se sentaba en el sofá.
-Oye no digas eso.- Respondí volviendo de la cocina con un té para cada una.
-Muchas gracias, reina.- Me dijo Nat dándome un beso.- Además sabes que llevo razón Albi, mimamos demasiado al niño.
-Bueno somos las tías guays, ¿qué quieres?- El hijo de Miki, Víctor, se había quedado con nosotras el fin de semana porque sus padres se iban de viaje. Víctor llegó a nuestras vidas hace un año, poco después de mi boda con Nat. El niño solo tenía un año pero sabía que mi mujer y yo no podíamos evitar consentirlo. Por ese motivo, siempre que nos juntábamos todos se venía con nosotras. Sus padres nos habían dicho un par de veces que lo mimábamos mucho.
-Por supuesto que sí cielo.- Ambas reímos y nos acurrucamos un poco más en el sofá. Estuvimos hablando de todo en general, cuando decidí preguntarle a Nat lo que llevaba rondándome la cabeza toda la semana.
-Oye Nat, ¿a ti te gustaría tener un bebé algún día?- Esa pregunta me la hice cuando vi a Natalia por primera vez con Víctor y este finde sirvió para volver a planteármela. Se la veía tan feliz con él.
-La verdad es que sí que me gustaría tener un hijo.- Me respondió sinceramente mi mujer.- Antes no me sentía preparada pero creo que ahora sí.- Asentí.- Y si lo tuviera contigo sería una maravilla.- Me dijo y luego me besó.
YOU ARE READING
Somos instantes - Albalia
Tínedžerská beletriaAlba Reche y Natalia Lacunza llevan siendo amigas desde que tienen uso de razón. Quedan cuatro meses para que Alba se case con el que creé que es el hombre de su vida.Quedan cuatro meses para que Natalia vea casarse al amor de su vida. Pero un drást...