Narra Alba
-¡Estoy hasta en coño ya!- Dije tirándome al sofá de la casa de África y Damion.
-A ver, ¿y a ti que te pasa?- Me dijo Afri saliendo de la cocina con dos tés.
-Gracias Afri.- Agradecí a mi amiga cuando me dio una de las tazas.- Un alumno la ha tomado conmigo. No hace más que reventarme la clase. Está toda la mañana dando por culo y lo peor de todo es que no deja vivir a Marcos, otro alumno.- Suspiré frustrada a la vez que me frotaba las sienes.
-¿Qué le hace el chaval a Marcos?- Preguntó mi amiga con curiosidad.
-Lo ha crucificado. Se ríe de él por sus maneras y por su forma de vestir. Además se burla de Marcos por ser gay abiertamente.- Murmuré apenada.- Sé que no debería meterme, está en la universidad, ya son mayorcitos. Pero no me puedo quedar con los brazos cruzados cuando veo lo que le hace.
-Ay, pobre.- Dijo Afri dejando su taza en la mesa de cetro.- ¿Y si hablas con los padres? Sé que esto no es como el instituto pero creo que el problema hay que cortarlo de raíz.- Resopló África mirándome.- A lo mejor si hablas con los padres pueden hablar con él y convencerlo para que deje en paz a Marcos.
-Puede ser buena idea.- Susurré pensativa.
-O cabe la posibilidad de que el chaval tenga problemas en casa y por eso se comporta así.- Me dijo mi amiga mientras se levantaba a dejar las tazas vacías en la cocina.
-Cabe esa posibilidad.- Respondí.- El padre tiene pinta de pasar poco tiempo con su hijo y a la madre no la conozco.
-¿Es qué conoces al padre Alba?- Dijo volviendo a sentarse a mi lado.
-Que va, solo de vista.- Respondí echándome para atrás en el sofá.- Ha venido un par de veces a las exposiciones de la facultad.
-¿Y cómo es?
-Si te soy sincera me recuerda a los empresarios de los que nos reíamos la Mari y yo de pequeñas.- Ambas soltamos una carcajada.- El hombre tiene dinero, se le nota. Cuando iba a las exposiciones miraba con desprecio a todo el mundo que no fuera importante.- Hice comillas con mis dedos mientras África me miraba atentamente.- Creo estuvo intentando convencer a Roberto de dejarle subvencionar la facultad pero este se negó según me contaron los Javis.- Afri asintió.
-Vamos que sería la última persona del planeta con la que Alba Reche se tomaría un café.- Sentenció riendo.
-Sí la verdad.- Me reí con ella.- Aún que se me ocurren ciertas personas que estarían por delante de él, la verdad.- Ambas volvimos a reírnos comprendiendo por donde iban los tiros.
Estuve un rato más hablando con Afri hasta que tuve que volver a la universidad. Me cité con el padre del chaval a las 4 de la tarde. Esa mañana tenía clases toda la mañana menos durante dos horas, que las aproveché para ir a ver a África.
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Somos instantes - Albalia
Teen FictionAlba Reche y Natalia Lacunza llevan siendo amigas desde que tienen uso de razón. Quedan cuatro meses para que Alba se case con el que creé que es el hombre de su vida.Quedan cuatro meses para que Natalia vea casarse al amor de su vida. Pero un drást...