❝𝐓𝐨𝐱𝐢𝐜❞ || 𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐲 𝐂𝐡𝐥𝐨𝐞

𝟑𝟑. 𝐅𝐮𝐞𝐠𝐨

- ¿Draco Malfoy? — me preguntó Lavender en la sala común de Gryffindor.

- Si, me gusta él. — contesté con una dulce sonrisa pensando en él.

- Lo sabía. Todos lo sabíamos Chloe. — Lav rió levemente y me abrazó - Estoy muy contenta por ti. Que lo vuestro sea mútuo.

- Ya. Pero hay un pequeño problema... Aún le gusto a Oliver Wood. 

- Joder, ese cabrón no ha tenido suficiente eh...

- No no Lav... Pansy le dió amortentia, él nunca ha querido romper conmigo. — dije por primera vez en voz alta. Realmente me sentí mal, si no hubiese sido por Pansy, aún estaríamos saliendo. Además, a mí realmente me gustaba mucho Oliver. Pero llegó Draco... Y el mundo se puso patas arriba.

Lavender y yo nos despedimos, yo me fui a estudiar en la biblioteca. Teníamos un examen de pociones y no había tenido tiempo de estudiar. Cuando llegué, vi como Pansy estaba allí, levantó la mirada rapidamente de su libro y me miró.

- Vaya vaya... — dijo suavemente

- ¿Qué te pasa conmigo? — me acerqué a la mesa y la miré seria.

Ella se levantó y se puso delante mío, fijando su mirada en mis ojos. Me cogió de la muñeca y me arrastró entre dos estanterías, donde apenas nos podían ver.

- ¿Tienes novio? — me preguntó ella, cosa que me sorprendió mucho.

- Más o menos, supongo que sí — nunca lo habíamos confirmado pero en teoría... Supongo que Draco y yo estábamos saliendo.

Pansy colocó sus manos en mis mejillas, y se acercó aún más.

- ¿Qué haces? — susurré

- Shh — sin que me lo esperase, lentamente se acercó a mi labios y me besó lentamente.

- Espera ¡¿Qué?! — no pude evitar gritar un poco.

- Has sido tú todo el tiempo. No iba a por Draco, ni a por Oliver, iba a por ti. Me gustas tú, no sabes cuánto... — pasó su dedo por mis labios, mirándolos con deseo. Entonces, le devolví el apasionado beso que ella me dió minutos antes. Ella colocó sus manos en mi cintura, acercando mi cuerpo al suyo. Notaba como mis mejillas estaban rojas y calientes, Pansy empezó a darme besos por el cuello. Yo cerré los ojos, pero entonces pensé en Draco. Mierda, ¿Qué estaba haciendo?

- Esto... Esto no está bien — dije en voz baja

- ¿Ahora quieres parar? — contestó Pansy casi susurrando.

- Si... Ya hablaremos — me separé y volví a la mesa dónde había dejado mis cosas. Pansy también volvió a su mesa, con su mirada clavada en mí, no podía negar la tensión sexual que teníamos.