Diana la sombra más oscura

Raimond

*Aitor*
La boca me sabía a sangre, cada parte de mi cuerpo me dolía, pero jamás le dejaría llegar hasta ella...
¡Vamos Alfa, defiendete! -gritó Raimond Surker, el Alfa de la manada dark blood,un lobo gris y blanco enorme , con un corte desde su oreja izquierda hasta su hocico,pasando por encima de la cuenca vacía de su ojo. -eres patético... Sin tu Luna no eres nada...
Raimond era famoso por ser el primer licántropo caníbal. Literalmente se comía a sus enemigos.
¡Callate y ataca de una vez!-grité enseñandole los dientes.
Se hechó a reír.
¿Tienes prisa en morir? -dijo rodeandome con su Beta y Delta, eran tres contra uno, como de costumbre Raimond no atacaba solo.
¿Sabes? E oído que tu Luna es muy hermosa... -dijo Abraham el Beta- no te preocupes, después de tu muerte yo cuidaré de su hermoso culito.
Fué demasiado para mí.
Me lancé a su garganta,apretaba cada vez más, mientras Raimond y Luka, su Delta, mordían mis patas y cuello. Los tenía a los tres encima,eran enormes, apenas podía respirar...
Sentí como los dientes de Raimond atravesaban la carne de mi cuello, era mi fin... O eso creía yo, pues de golpe los tres lobos salieron despedidos.
Luka se dió contra un árbol desnucandose , Raimond, se levantó lentamente mirando aterrado detrás de mí, volví la vista a mi espalda, viendo una enorme loba dorada, con Abraham colgando de su hocico como un trapo.
Lo dejó caer, dejándome ver el enorme hueco donde debería estar su garganta.
¿Cristal? ¿Cuando se había hecho tan grande? Era tan grande como yo...
Caminó amenazadoramente hasta Raimond, el cual estaba paralizado por el miedo.
Se paró y me miró con sus enormes ojos rojos, yo conocia esos ojos...
En ese momento aparecieron Diego, Daniel, Gisela y... ¿Cristal?
¿Dos lobas doradas?
La loba dorada de ojos rojos siguió andando,donde pisaba dejaba unas enormes huellas negras, como si quemase el suelo, la hierba y las flores se marchitaban donde ella pisaba... Una suave brisa removió el pelaje de la loba, haciendo llegar su olor hasta mí.
¡No podía creerlo!
Diana... Su familia la miraba tan asombrados como yo.
¡Lárgate de aquí y llévate a tus chuchos contigo si no quieres morir! - rugió , era como si hablasen miles de personas a la vez.
Eso tengo que verlo -dijo lanzándose contra ella.
Salté cayendo sobre él, desencajandole la mandíbula, haciéndole caer.
Estaba furioso, pero feliz de que estuviera despierta.
Mi amor estas muy débil, dejame a mí sacar la basura de nuestras tierras-dijo poniendose delante de mí-ya has luchado bastante.
Me quedé de una pieza
¿Habia dicho "mi amor"?
Te lo repito, lárgate o sufre las consecuencias... -dijo Diana, pero Raimond no estaba dispuesto a rendirse.
¡Nunca!-gritó lanzándose contra ella.
Como quieras -dijo enganchando su cuello en el aire y cerrando la boca a su alrededor.
Se escuchó un ruido sordo y después otro, seguido de un borboteo .
Diana se dió la vuelta dejándome ver una imagen escalofriante, el cuerpo de Raimond estaba en el suelo,de su cuello salía sangre a borbotones, mientras su cabeza se balanceaba colgando de la boca de Diana.
Cristal vomitó sobre la hierba detrás de mí, cuando su hija pasó por su lado para después lanzar la cabeza de Raimond justo delante de su Luna.
Una mujer famosa por secuestrar y comerse a los bebes de las manadas vecinas después de quemarlos vivos, solo porque ella no podía tener hijos...
La pelea entre los lobos paró de golpe.
La manada entera y su Luna huyeron al ver a Diana con su pelaje dorado lleno de la sangre de su Alfa.
Todo había terminado...
Me acerque a su lado, toda nuestra manada aulló al ver que ambos estábamos bien.
Diana empezó a temblar a mi lado.
Nunca vuelvas a asustarme así...-dijo escondiendo su cara en el pelaje de mi cuello.
¿No estás enfadada conmigo? -dije sin explicarme porque no salía huyendo del monstruo que la atacó, osea yo.
¿Porque , por dejarme en coma cinco años? -dijo mirándome, aún con los ojos rojos-no, me has ahorrado tiempo de espera, para dejar de ser una niña... ¿O sigues considerandome una niña Aitor?
Otra vez Aitor... Iba a hacer que aborreciera mi nombre...
Empezó a lamer la a heridas de mi cuello y mi cara, haciéndome estremecer.
¿Vas aborrecer tu nombre, solo porque yo te llame Aitor? -dijo la voz de Diana en mi cabeza, haciéndome dar un respingo.
¿Como podia ser ? Esto solo pasaba cuando yo, permitía que entrasen en mi cabeza...
Soy tu Luna so tonto-dijo haciendo que mi estómago diera un vuelco,mientras seguía frotando su cara contra mi cuello-esto es lo normal ¿no?.
¿Estaba soñando o había dicho "Soy tu Luna"?
Sombra, aullaba de alegría y podía sentir la felicidad de Ángel .
Estas muy flaco-me regaño Diana -sucio y además hueles horrible. Vamos volvamos a casa, hay que ducharte y haber como hago para engordarte un poco, pareces un esqueleto ambulante.
Siguió regañandome mientras íbamos hacia casa con la manada,yo solo la miraba y daba gracias a la Diosa por devolverme a mi amor.
Llegamos a casa y fuí directo a bañarme, mientras el médico revisaba a Diana, ya que ella había prometido, ir diciéndome por el link lo que el médico le fuese diciendo. Me sumergí en el agua, relajado, después de estos cinco años, sabía que cuando volviese al salón ella iba a estar esperandome allí para hacerme rabiar...