Era el día del juicio de Cameron, shawn seguía en casa, instalado en la habitación de Cameron, en otra ocasión hubiese fangirleado, pero no estaba el horno para bollos. Desayuné de correprisas y me vestí, pantalón negro, camisa blanca y converse blancas. Nos subimos en el coche y llegamos al juzgado como veinte minutos antes de que empezase todo aquello. Cameron estaba en una sala de espera, con Nash.
-¡Cam!.- dije cuando entré corriendo a abrazarle.
-¿cómo estás?.-preguntó sonriendo.
-Nerviosa por ti.- contesté.
-Tranquila, todo va a salir bien.- contestó acariciando mi mejilla y sonriendo.
-Eh tú, ¿no me dices nada?.-preguntó Nash.
-A parte de que eres un hijo de puta, erm, no.- contesté.
-¿Os conocéis?-preguntó Cameron extrañado.
-Más o menos, jugaba en el equipo de un instituto del norte de San Diego, es un auténtico gilipollas.- respondí.
Cameron lo miró de arriba a abajo y le apuñaló con la mirada.
-Por tu cupa me echaron del equipo.- replicó Nash.
-No fue mi culpa que dijese que eras un gilipollas.- le contesté.
-¿Qué te hizo?.-preguntó Cameron.
-A mi nada, pero si a mis amigas y a muchas otras chicas, pero supe como hundirle.- respondí.
-Cameron, ya es hora- dijo un guardia.
Cameron se levantó y se fue.
-Que te quede claro preciosa.- dijo Nash acercándose a mí.- Tu me hundiste a mí, y sabía que él es lo que más quieres. Te voy a hundir.- me susurró al oído.
-Hijo de puta.- respondí.
-Ya lo sé, ¿por qué te crees que se divorciaron?.- dijo Nash.
-Púdrete en el infierno.- dije antes de salir de la sala.
-No dijiste eso en el baño de mi instituto.- chilló Nash.
Pegué un portazo y me fui a la sala del juicio. Me senté junto a mi padre y le cogí la mano. Cameron entró con su abogado y el juicico comenzó, Nash entró poco después. Los dos contaron su versión y varios testigos, incluido Shawn testificaron. a la hora de todo aquello el juez se retiró, anunció un receso de media hora.
Cameron vino y me dio un abrazo.
-¿Estás bien?.- pregunté.
-Si, de esta salgo limpio, seguro.- respondió.
-Más me vale, quiero que vuelvas a casa.- dije.
-¿Sabes el tiempo que llevo sin mirarte a los ojos?.-preguntó.
-Demasiado.- contesté.
-Si, bueno, me voy, cuando todo esto acabe nos vemos.- respondió.
Me senté junto a Shawn en la puerta del juzgado mientras charlábamos e intentábamos relajarnos.
-¿Cómo está Austin?.-preguntó.
-Está interno haciendo terapia en un centro, sale en un par de meses.- dije.
-Te dije que ese centro le vendría bien.- respondió.
-Si, tengo ganas de darle un abrazo cuando salga.- respondí.
-Chicos, van a entrar enseguida.- dijo mi padre.
-hawn me ayudó a levantarme y entramos de nuevo a la sala. El juez entró unos instantes después, se sentó y comenzó a leer varios veredictos. Cameron salió limpio de todo aquello, y Nash por varios delitos anteriores iba a ser enviado a un centro de menores hasta los 21 años. La gente se retiró de allí y nosotros salimos afuera.
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The A Team
Teen Fiction¡Qué alguien me mate! Eso es justo lo que pensé cuando mi padre me llamó aquel día y me dijo que su novia vendría vivir con nosotros. No me malinterpretéis, Loren era muy buena, incluso le tenía cariño; la quería mucho porque siempre se portaba sup...
