Perfect: Un amor bajo la sombra [EN EDICIÓN]

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Capítulo 1. "Olor satisfactorio"

Venus Sallow.

El día de hoy desperté, debo admitir que me costó muchísimo trabajo levantarme de la cama, como todas las mañanas, muy mala idea fue quedarme practicando ballet hasta las tres de la mañana.

Casualmente tengo la costumbre de dormir entre diez a once de la noche, el único problema es que últimamente no he podido consolidar el sueño, por un motivo desconocido.

Miré la hora, eran las seis de la mañana, aún no salía el Sol, normalmente despierto a esa hora, ya que me da tiempo de arreglarme o cosas por el estilo, aunque realmente estoy acostumbrada a ese horario ya que de niña siempre mis padres me obligaban a hacer lo que pedían, pero que puedo hacer.

Tomé una ducha, me cambié e hice todo lo que implica "arreglarse" en una mujer, cuando miré el reloj únicamente habían pasado treinta minutos desde la última vez que lo miré, me preguntaba, ¿qué clase de chica normal se baña, cambia y se arregla en tan solo treinta minutos sin que aún salga el Sol? fue entonces cuando recordé... No soy una chica normal.

La verdad no me sorprende, siempre he estado acostumbrada a hacer todo lo más rápido posible, ahora solamente era cuestión de bajar a desayunar, cosa en la que tardo demasiado, no porque coma mucho, sino porque es la única cosa que puedo hacer en un largo periodo ya que -comer despacio es más saludable para el cuerpo humano e incluso hace que pierdas peso-, me repetía a diario mi pediatra en mi niñez.

Me senté a desayunar, mis padres como siempre no estaban, así que prácticamente desayunaba sola ya que los empleados no me dirigen la palabra aunque yo les hable, recuerdo que un día comencé a hablar con el jardinero y el completamente me ignoró, según mis padres, para lo único que debemos de mantener contacto es únicamente para asuntos de mi menú del día, cosa que jamás me dejan planear por mi misma, así que prácticamente no hablo con nadie en la mansión.

Mientras desayunaba pensaba en lo antisocial que soy respecto a la escuela, no tengo amigos y la única amiga que tal vez tuve en la vida le dejé de hablar debido a que me dijo que ella era mucho más importante que yo, lo divertido es que en aquel entonces tenía cinco años y a pesar de eso le dije que no era una persona normal si creía que era el centro del universo, pero ahora me río de eso ya que si hablamos de "normalidad" termino perdiendo.

Terminé el desayuno, observé el reloj y marcaba las siete de la mañana, tomé mi mochila y salí de la casa dirigiéndome a la limusina, había gente fuera de mi casa esperando que salieran mis padres, muchos de ellos paparazzi exigiendo ver a mi padre, un multimillonario, empresario que se ganó la vida con ayuda de el apellido de mi tatara tatara tatara abuelo George Sallow, un inglés que vino a Estados Unidos a conocer Washington y terminó llegando a unas tierras en Oregón, a las que nombró Llowburg en honor a su propio apellido y al pasar el tiempo esas tierras se convirtieron en un pueblo y más adelante en una ciudad con una población de más de trescientos mil habitantes.

Mi padre era dueño de más de la mitad de la ciudad y era dueño de una empresa que se extendía por todo el país acerca de tecnología y muchas otras cosas, mientras que mi madre era una diseñadora muy conocida en Europa y América del Norte, lo único que no entiendo es... ¿Porqué decidieron tener una hija? Es obvio que fui no deseada, así como muchas personas que en este mundo, aunque honestamente hubiera preferido que me dejaran en un orfanato y que me adoptara una familia feliz, a diferencia de tener que pasar parte de mi vida sola en una mansión gigante y con un gran vacío en el corazón.