TORMENTA

✔️(Capitulo 26) Falsa felicidad.

Daniel Randal.

- No puedo ir... no sin Alex y Matt — me detuve antes de llegar a los filtros de seguridad del aeropuerto… estaba a punto de irme a Australia junto a mis padres.
- Pero hijo, debemos ir, Annie nos necesita - dijo mi padre mientras intentaba jalarme del brazo.
- Es muy lejos papá, estaré bien si me quedo solo. – el hombre asintió y sacó su billetera, decidió no insistir porque estaban atrasados.
- Toma... usa el dinero en comida y lo que necesites, ¿Estarás bien...?
- Sí papá, solo son 2 semanas, no toda la vida... – reí nostálgico.
- Te amamos Dany – dijo mi madre mientras jugaba con mi cabello - asiste a la escuela y aliméntate bien.
- Los echaré de menos...
- Hijo, no estés triste, Alex necesita a sus padres, piensa en que está bien, ya deberías hablar con él... — dijo mi padre.
- Uhm... necesito más tiempo.


Me ponía nervioso siempre que mencionaban a Alex, porque él se fue y no hemos hablado desde entonces.

- Demuéstrale que eres su amigo... - continuó mamá - es un buen niño... y dale esto a Matt de mi parte – me dio una pequeña caja con listón - ya presentía que pasaría esto... pórtate bien Dany.
- Suerte... los quiero – mis padres abordaron el avión, me quedé mirándolos partir con tristeza, la última vez que había pisado ese lugar fue cuando rompieron mi corazón, y ahora mis padres estarían en otro continente. Estaba solo.

...

Los días pasan y pasan, estar solo en casa me hace sentir aún más deprimido, apenas y hablo con Matt.

En la escuela a veces me encuentro con Alex, es peor cuando no puedo evitar verlo en una de mis clases, pero no nos atrevemos a cruzar palabras, el aspecto de Alex es algo descuidado, las chicas lo siguen, pero él ya no les presta ninguna atención por lo que poco a poco se ha quedado solo.

A Matt siempre lo encuentro durante mis descansos, el ahora pelinegro insiste en que me veo deprimido pero no tanto cómo Alex y al contrario de él, está molesto porque me hago indiferente en su presencia.

Cómo todos los días sin falta, llegue a casa y me recosté en la cama que solía usar Alex haciéndome bolita, su olor corporal aún sigue ahí, sentí a mis ojos arder al recordar a mi amigo tocar el bajo cada tarde cuando llegábamos juntos de la escuela, y ahora sin él se siente un gran vacío.

Sin querer busque entre las sábanas y debajo de la cama algo de él, deseaba tener una escusa para poder al menos preguntarle cómo estaba pero no tenía con que.

Este mundo puede llegar a ser extraño...

Encontré su bajo... estaba escondido pero siempre había estado ahí... tenía una nota entre las cuerdas.

"Mi amado Dan...
Lo menos que puedo hacer para agradecerte todo lo que haz hecho por mí, es dejar a mi primer amor contigo... cuídalo bien.
Te quiero...
Alex."

No me pude contener, las lágrimas pronto comenzaron a correr por mi rostro, y sin dudar, guarde el bajo en mi estudio, me dolía la manera en que estaba actuando con Alex. No era para tanto.

...




Alexsy Taylor.

He regresado a casa, al principio Claudia me preguntó si todo estaba bien... pero no quería seguir dando explicaciones, estaba preocupada por Dan, pensaban que era por la partida de esa chica... pero no, yo sabía el porqué, y no podía decirle a su madre tan fácil... "Dan esta molesto conmigo porque piensa que le fui infiel..." ¿Cuántas explicaciones tendría que dar...? Tendría decir que salgo con él desde que compartimos la habitación y que además... nos acostamos cada vez que podemos... no podía decirle... "Mamá, amo a tu hijo, ayúdame a que él regrese conmigo..."

Le llamé a mi padre, le dije que había tomado una decisión y que aceptaba regresar, el mismo día llegó en su auto y me ayudó a llevar mis cosas de vuelta a casa, me preguntó por el bajo pero... simplemente no podía traerlo conmigo... mi padre cambio un poco a lo largo de estos meses, me trata mejor, él mismo me pidió que regresara después de las audiciones, no quería provocar más problemas y decidí enfrentarlo nuevamente.

Mi habitación seguía igual, mis cosas también, todo en perfecto orden desde que me fui... me pregunto... ¿Cómo es que la vida cambia en un abrir y cerrar de ojos...?

Un día tienes todo lo que quieres y al otro de nuevo no tienes nada...

Eso es lo que me pasó con Dan...

¿Me preguntó si ya encontró a mi amante de cuerdas...?

Decidí que era mejor dejar mi bajo con él porque lo único que le di en el transcurso de nuestra relación fueron lágrimas e inseguridad... quería que al menos se quedara con mi objeto más preciado, sé que lo puede usar, y que lo cuidará bien...

Mi padre me pidió perdón, algo extraño de él es eso, pedir disculpas y sinceramente estaba tan abrumado que acepté para no escucharlo más, “mamá” cómo siempre no dice nada, nuestra relación es casi nula.

Mi rutina es casi la misma, ir a la escuela, estudiar a medio día, regresar a casa, y dormir, lo único que cambió fue que casi no hablo con Matt y Dan, desde que rompió conmigo me la paso encerrado en mi habitación, las primeras veces lloré hasta quedarme dormido, después de un tiempo simplemente lo acepté, no podía seguir aferrado a alguien a quien he lastimado mucho.

Mis días en la escuela son a veces insoportables, cada vez que me reencuentro con Dan, él desvía la mirada o ignora mi presencia, duele tanto que Matt me ha dicho que lo reprende por ello, Matt me ha consolado desde eso, finalmente él sí me cree, pero eso no cambiara mis sentimientos hacia él, no así, no aún.

Los días parecen pasar lentamente, mi semana fue realmente horrible sin él...

Lunes...
Mi padre me dejó en la entrada de la escuela, me dio algunos billetes y me deseó "un buen día..." ¡Uh...! Ni quién te crea viejo.

Primero matemáticas... aburrido, eso era tan sencillo que terminé dormido a la mitad de la clase.

Después filosofía... el profesor hablaba pero simplemente no ponía atención, seguía pensando en Dan, lo extrañaba tanto que sin querer solté un suspiro y toda la clase volteó a verme, el profesor preguntó si me había gustado la lectura que leía en ese momento y sólo me limité a decir que sí...

Biología... la profesora hablaba de la reproducción sexual... rayos, era tan incómodo escuchar los detalles que terminé por hacerme bolita, no dejaba de pensar en lo que habíamos hecho...

Al finalizar mis clases decidí esperar por mí padre en el mismo lugar donde me había dejado y... ahí estaba Dan, quizá esperaba a Matt, pero al notar mi presencia se alejó, estaba sonrojado, quería decirle al menos "hola..." pero mi padre había llegado...

Martes...
Inglés... Estaba tan decaído que solo miraba a un punto fijo mientras que el profesor hablaba sobre una película que quería que viéramos en ese instante, me parecía algo bobo, pues desde pequeño he sido instruido en tres lenguas diferentes por insistencia de mi padre...

- Señor Smith, ¿Está prestando atención...? - preguntó molesto el profesor al notar mi ausencia de atención en las imágenes que reproducía aquel proyector de luz.
- Sí... - respondí mientras dirigía de nuevo mi vista hacia el.
- Dígame... ¿de qué trata la película...? - sería un estúpido si no lo supiera... la había visto cuando era un niño aún...
- De desamor... - respondí con indiferencia - y si me pregunta más, me limitare a responder qué es realmente aburrida... - dije en un francés tan fluido que el profesor terminó por cansarse de mi mal humor y me hizo salir de su clase... en casa me reprenderían por ello pero no me importaba en ese momento...

Caminé hacia la biblioteca, necesitaba hacer algo, así que entré al lugar y tomé un libro de una de las muchas estanterías, quería leer cualquier cosa que me hiciera olvidar por un momento el vacío que sentía sin él pero nada... sólo pasaba las páginas del libro sin interés...

Sentí una presencia, era él... quizá por desear tanto verlo, había aparecido ahí... pero ni siquiera me notó, parecía llevar prisa, pude ver cómo guardaba en su mochila tres libros y salía casi corriendo...

~ Siempre fuiste tan dedicado en tus estudios... ~ pensé.

Miércoles...
Historia... era mi clase preferida, siempre que tenía esa clase hacía mis propias notas de autoestudio, podría decirse que incluso al profesor le agradaba que tuviera interés en poner atención...

- Alex... ¿Puedo hablar contigo un momento...? - me preguntó el profesor, era algo joven, no pasaba de los 30 años...
- ¿Sí...?
- Está semana te he notado distraído, tus notas siguen siendo de las mejores, pero si no prestas atención no vas a pasar los exámenes que vienen...
- Claro que presto atención... pero me esforzaré más...
- Alex, si tienes algún problema puedes decírmelo, no todos los profesores somos malos, puedo entender a mis alumnos porque alguna vez también fui uno...
- Uhm... - lo pensé un momento, quizá mi única distracción era Dan, pensaba en él día y noche, a veces me costaba mucho dormir por la noche a causa de ello...
- Todos en algún momento necesitamos ayuda... - me dijo mientras borraba las notas del pizarrón.
- Yo... hace días mi novio me cortó... - el profesor me miró perplejo.
- ¿Novio...? - preguntó a penas con un hilo de voz.
- Sí... - me sonrojé - salía con... - no podía decirle quién... - un chico, pero todo terminó muy mal... quizá aún me sigue afectando... porque lo extraño mucho...
- Oh, vaya... - quizá no sabía que decirme porque tomó su barbilla con nerviosismo por un segundo - ¿Por qué te terminó...?
- Es algo de lo que no quisiera hablar... un malentendido, y... ah...
- Oh, Alex... - repitió - pensaba que... salías con alguna de las chicas que suelen perseguirte... - reí, porque no les prestaba atención casi nunca...
- No... yo salía con él desde hace meses.
- ¿Un malentendido con tus padres, quizá los de él...? - negué con la cabeza.
- Un retorno tormentoso... mala suerte probablemente y quizá... que alguien más no estaba de acuerdo en nuestra relación a pesar de que no dañábamos a nadie, porque... a decir verdad yo lo sigo amando, era la primera vez que quería enamorarme... - el profesor me sonrió.
- Entonces... ¿Salías con Randal...? - preguntó al momento en que guardaba sus cosas.
- ¿Cómo lo...? - palidecí, ¿Cómo lo sabía...?
- Amor es amor... - suspiró - hace días que no te veo con él, siempre que terminaba la clase te dirigías con prisa a la salida para verlo... ¿No? Y ahora ni siquiera te viene a buscar cuando te tardas un poco... - aclaró su voz - Daniel suele ser muy solitario y callado, pero cuando está junto a ti y el chico de la moto se la pasa riendo y quita su expresión tan fría...
- Pero con Matt hace lo mismo... - dije tratando de que él olvidara lo que dije.
- ¿Así se llama...? Uh... parece llevarse bien con él, pero he notado que se ponen rojos como un par de manzanas cuando lo encuentras esperando por ti aquí afuera... - quería ocultar mi rostro, sentía cómo mis mejillas ardían, siempre fue muy obvio que nos gustamos y quizá... que sin él no me siento completo.
- ¿De que sirve hablar de Daniel si ni siquiera me quiere ver...? - pregunté con frustración.
- Sirve porque así no guardas tu dolor y te puedes liberar... ¿Él fue quien te hizo eso...? - señaló la herida que aún se veía en mi labio.
- No... fue Matt... pero está bien. - el profesor me dio una última sonrisa.
- Alex, a veces para amar a alguien tienes que aprender a amarte a ti mismo primero... - dijo y me dejó solo en el salón.

Quizá tenía razón en ello, mi deseo tan egoísta por tener a Dan había provocado problemas mientras salíamos pero con el tiempo los habíamos solucionado... lo extrañé más que nunca en ese momento, sentía una sensación horrible dentro de mi, quería llorar pero no salió ninguna lágrima, quería abrazarlo pero... quizá Dan no quiera verme en mucho tiempo...

Jueves...
Mi tiempo libre... Por alguna razón tenía sueño, era la última hora pero no tenía clases, no quería llegar antes a casa, decidí esperar a mi padre cómo había quedado con él, me dirigí a una de las tantas jardineras que se encontraban alrededor de los salones, en realidad era mi lugar favorito para estar tranquilo, antes solía estar con Dan ahí, era un lugar solitario y era lindo estar con él mientras besaba sus labios...

Dormí por algún tiempo, me sentía tranquilo después de no haber podido conciliar el sueño la noche anterior, desperté al sentir como una mano se posaba sobre mi frente...

- Alex... - murmuró suavemente - despierta... - su voz era conocida para mí, cuando abrí los ojos él estaba ahí... el azul de sus ojos me hizo reaccionar rápidamente.
- Matt... hola - dije mientras tallaba mis ojos.
- ¿Qué haces aquí...? Es tarde, dentro de poco cerrarán la escuela... - dijo mientras se sentaba a mi lado.
- Yo... tenía sueño... - él rió.
- ¿Cansado de huir de las chicas...? - preguntó divertido.
- Desde hace tiempo que ya no me acosan tanto... - bufé con cansancio.
- Ah... a mí no me dejan solo ni para ir al baño...
- Es porque quieren ver tus encantos - bromee.
- Jajaja rayos, que cosas dices... - sonreí, Matt se veía muy tierno cuando se sonrojaba.
- Gracias a ti, al menos puedo dormir tranquilo, probablemente si me descubrieran aquí, ya me hubiesen despojado de mi ropa... uh... - Matt soltó una carcajada, alguna vez me sucedió algo así... pero en cambio una chica me había robado mi celular cuando dormitaba en una clase, y la condición para devolvérmelo era... darle su primer beso... que chica tan rara... Matt logró que me lo devolviera, la sedujo pero nunca llegaron a nada...

Matt tiene un tipo de magia hipnótica...

- Y... ¿Cómo has estado...? - preguntó de pronto - no te he visto mucho...
- Bien... creó, mi padre no molesta tanto como antes...
- Ah... al menos...
- ¿Cómo esta Dan...? - pregunté con pena, sabía que a Matt podría afectarle el como me preocupo por el ojiverde.
- Mal... no hablamos mucho esta semana, sólo las veces que lo dejo en casa... - suspiró.
- Lo siento... - dije mientras pasaba mis dedos por su cabello.
- ¿Porqué...?
- Porque te pregunto por él cuando sé que... - él sonrió.
- No. No lo sientas... sé que lo quieres... y no es razón para que me moleste si no es mi asunto... - sentí un vuelco al escuchar eso... Matt hablaba así por mi culpa... - él parece estar bien pero está muy dolido, su madre está preocupada, me llamo desde Australia, dijo que cuando se fueron, Dan estaba muy decaído y aunque él puede ser todas sonrisas, sé que por dentro está roto...
- ¿Sus padres ya están allá...?
- Sí... se fueron el sábado en la noche, Dan me dijo que cuando estaba a punto de abordar el avión simplemente no pudo...
- Oh... vaya...
- Claudia te extraña mucho ¿Sabes? Me ha dicho que ahora cuando cocina, se siente un vacío sin ti... - sonreí con melancolía, al final de todo a mamá le agradaba, probablemente no se hubiera molestado si le decía que salía con Dan...
- Mañana es tu cumpleaños, ¿Cierto...? - pregunté desviándome del tema.
- Sí... mi padre también regresará y quería que fueras...
- No lo sé amigo...
- Por favor... deberías venir... es mi cumpleaños Alex...
- No... no puedo, no es buena idea, Dan no me quiere ver... - ¡Demonios...! De nuevo salió el tema...- necesito que pase más tiempo, no quiero que se sienta peor de lo que yo.
- Estará bien porque somos amigos... ¿Cuánto tiempo más planeas estar así...? - preguntó el ojiazul.
- No lo sé... - bajé la mirada.
- Alex... lamento haberte lastimado... - dijo mientras acariciaba mi rostro - fue algo muy estúpido, no sabía lo que hacía...
- Pero casi ya no se notan... - dije señalando en mi cuello una leve marca roja - y yo también te lastimé... no debí hacerlo, lo siento - me disculpé, eran más evidentes las marcas en su piel al ser tan clara.
- Ah... ¿No puedo hacer nada para que vayas...? - negué con la cabeza.
- Feliz cumpleaños amigo... - lo abracé tiernamente - espero que todos tus sueños se hagan realidad... Te quiero.
- Suenas como mi madre...
- Soy algo maternal... - reímos...
- Me tengo que ir... - dijo él mientras se ponía de pie.
- También yo... - mi celular comenzaba a vibrar dentro de mis pantalones, era mi padre, estaba esperándome afuera...




...