Capitulo 38: Socializando.

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Hola todos! Ayer me fue imposible subir este cap! Pero aquí lo teneisss por fiiin!

Espero que os guste, leer bien el cap, o dara una pista hacía lo que puede pasar en el proximo cap.! =D y hasta aqui puedo leer! ;)

Esta cap se lo quiero dedicar a Unicornio15, porque me pidio que leyera su historia, que por cierto, me encanta, os recomiendo que la leaís, y además esta leyendo todos los caps de mi historia y comentando en cada uno de ellos :D gracias guapa!

No os entretengo más y dejo que leaís el cap. No le queda mucho a la historia, no se cuantos caps quedan por que cambio cosas, los hago mas largos, pero no le quedda mucho. De todas maneras, en mi cabecita ya hay otra historía ala espera de ser contada! =D

Nos vemos mañana con el siguiente cap!.. Os quiero!

Votar comentar y gracias por leerme. Gracias tambien a esa gente que lee y no comenta, a los que animo a hacerlo, sea buena o mala vuestra opinion sobre mi historia, me gustaria saberla. Admito criticas, siempre desde el respeto eso si :)

Hasta mañana!

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Me sentía cansada, dolorida, y con pocas fuerzas. Tenía un costipado, que derivo a unas anginas con placas, realmente dolorosas. Apenas podía tragar la comida, la bebida tenía que ser templada, y ya no hablemos de la terrible voz de camionero que tenia.

Me acababa de despertar, un día mas en cama, con fiebre, tos, la nariz como la de Rudolf de tanto sonarme, y una maraña de pelo, con la última moda en peinados de nidos de polluelo.

-Princesa, hora de doparse y desayunar.- Dijo Raúl entrando a la habitación.

-Raúl no entres por favor, no quiero que me veas así. Estoy horrible.- Dije tapándome la cara con el edredón.

-No seas tontita. No estás horrible, estas mala que es distinto, y me da igual como de roja tengas la nariz, te quiero igual y me gustas igual. Tienes tu morbillo.-Dijo provocando que sacara mi cabeza de y dejara a la vista mis ojitos.

-Pervertido.- Dije riendo.

-Venga, tomate la medicación y te pondrás buena en dos días..- Dijo acercándome el antibiótico.

Llevaba mala dos días, a los cuales había faltado a clase claro. Me aceptaron en la universidad, de momento lo llevaba bien, aunque era agobiante, mucho más que el instituto.

Raúl se encargaba de cuidarme, día y noche. Hasta se levantaba de madrugada para ver si tenía fiebre, o necesitaba agua, leche caliente. Se estaba portando genial conmigo.  Siempre lo hacía, pero nunca me había puesto mala estando con él y... Esto era nuevo para mí.

Cuando termine de desayunar, me metí en la ducha para quitarme los gérmenes que tenía en mi, Lavar mi pelo para que volviera a ser normal y  todo sea dicho, estar guapa para Raúl.

Cuando salí del baño ya con un pijama limpio, me habían cambiado las sabanas y abierto las ventanas para airear la habitación. Esperándome estaba Raúl, sentado en la silla.

Sentimientos encontradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora