CLAN ALDER: Capítulo IV

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—Aun no—dijo uno de los alphas de un clan y Lauren dirigió sus ojos hacia él. Rafael Doodle; uno de los alphas que a pesar de nunca decir nada estaba muy en contra de tener una figura femenina como líder suprema—. El líder es Lucas, hasta que te ceda el mando. Solo respondemos ante sus órdenes. De lo contrario, eres una futura alpha como cualquiera de nuestros hijos.

—No se atrevan a contrarrestar mi poder—Lauren se alzó orgullosa—. No voy a dejar que nadie de esta reserva me quiera hacer pensar que no soy suficiente. Yo soy la que da las órdenes y ustedes obedecen. Nadie va a tocar a mi hermana, nadie va a hacerle daño. No es nuestro objetivo. No pierdan de vista lo que son—vio a su hermano fijamente—. No dejen que su alma se llene de rencor. Si lo hacen, la magia oscura habrá ganado sobre nuestra manada.

—¡Está con una vampira! —gritó otro—. El alcalde nos ha sentenciado si no entregamos a Clarisse. Ella podría estar de acuerdo con la vampira para hacernos parecer culpables de los asesinatos. No podemos confiar en alguien que se ha juntado con esos seres oscuros.

—Es un alpha que jamás va a reproducirse—dijo Rafael a los demás mientras Lauren volvía a tratar de moverse, pero sentía el agarre firme de Ian y ahora de Normani que estaban a su lado—. Se ha involucrado con otra mujer. Una vampira ni más ni menos. Eso es inaceptable.

Algunos lobos concordaron mientras Claudio observaba a Lauren impotente. Lauren sintió que su mandíbula se contraía. Sus ojos se volvieron de su verde habitual y se llenaron de dolor.

Se había ido menos de una hora en busca de su loba, y en ese momento no tenía ni a su loba, ni a su manada. Por primera vez desde la muerte de su madre, se sintió completamente sola.

<<¿Dónde estás, amor?>> preguntó observando el cielo tratando de callar las voces a su alrededor. <<Por favor, Camila>> le rogó <<No me apartes>>

—La mayoría de los clanes está de acuerdo en la ejecución de Clarisse Alder—volvió a hablar Rafael.

—¡No pueden hacer eso! —volvió a decir Lauren—. No es la solución. Deben darme la oportunidad de crear un plan. Necesito tiempo.

—El consejo de pueblo vino una hora atrás—volvió a hablar Rafael—. Fue Alex quien nos convocó. Tú ni siquiera estabas en la reserva. No te interesa nada de nosotros. No somos tan importantes como tu preciada chupa sangre.

Lauren le gruñó con furia y Rafael dio un paso atrás. Los ojos de Lauren volvieron a su habitual dorado haciendo que la mayoría de los lobos que la rodeaban dieran un paso atrás ante el poder que desprendía.

—Creo que las decisiones de esta reserva deben ser tomadas por nuestra alpha suprema—habló Claudio finalmente—. Vamos a respetar lo que Lauren decida. No habrá nadie que se le oponga. Luego el consejo y yo nos reuniremos con ella para llegar a un acuerdo que no involucre matar a una de los nuestros.

—¡Allagi dice que debemos eliminarla! —dijo Alex—. Ella no puede volver a recuperar su alma pura. No podemos arriesgarnos a que la oscuridad nos consuma. Clarisse dejó de ser mi hermana desde que ese demonio de maldad se apoderó de ella. Pero...—hizo una pausa viendo a su hermana—, haré lo que Lauren decida. Sin embargo, si esta manada ha de perecer—la vio con dolor y Lauren sintió la traición de su propia familia—, que pese sobre ella y su alma eterna—Lauren sintió el golpe directo a su pecho y su alma dolió.

Su propio hermano. Su propio hermano le había dado la espalda.

Lauren vio como algunos lobos la veían con cinismo mientras se giraban , y otros la miraban con respeto. Estaba pasando realmente, la manada se estaba dividiendo.

The Midnight Chronicles TrilogyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora