La Bestia (Camren)

Capítulo 41

Pov Externo

Era demasiado, no sé cuánto podría soportar. Odiaba que esto me pasara a mí. No era una mala persona y aun así la vida se empeñaba en golpearme una y otra vez.

Sentí nuevamente mi estómago estrujarse. La acides y el asco recorrió mi garganta haciendo que mi cabeza buscara de nuevo el inodoro. Expulse lo poco que aun quedaba en mi estómago, no podía dejar de tener arcadas y mi cuerpo se estremecía por el esfuerzo.

Cuando al fin pude controlarme. Abrace mi mis piernas haciéndome un ovillo sentada en la esquina de aquel cubículo. No podía dejar de llorar. Era demasiado, solo quería que todo acabara.

-Abby. ¿Estás bien?- escuche detrás de la puerta.- Sé que no es fácil pero no puedes quedarte mucho tiempo aquí, ellos no deben verte así podrían despedirte.

-Solo dame 5 minutos más.- mi voz salió entre cortada.

-Está bien, te espero afuera. Estaré vigilando que nadie venga.

-Gracias.- susurre viendo cómo se alejaba de ahí cerrando la puerta que daba acceso a aquellos baños.

Cubrí con mis manos mi boca amortiguando un grito. Ver todos esos cuerpos ser cremados. ¡Dios mío, Qué clase de lugar era este!.

Salí del cubículo y moje mi rostro con agua eliminado las lágrimas. Me vi en el espejo encontrando una mujer sin vida aferrándose a una esperanza. Apreté el mármol del lavabo con fuerza y decidida salí de ahí.

No podía ser débil, tenía que buscar la manera de ser fuerte y seguir aguantando.

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Miami Florida

Camila sintió su cuerpo ser jalado hasta la orilla de la cama. Lauren se posiciono sobre su cuerpo sentándose a horcajadas sobre sus piernas, su centro húmedo mojando la piel morena. Se deslizo por su cuerpo besando su cuello, pasando por su clavícula sacando su lengua delineando el pezón derecho de la morena y metiéndolo en su boca succionándolo con fuerza.

Camila tomo la cabeza de Lauren evitando que dejara de darle placer a su sensible pezón. Arqueo su espalda dejando salir un jadeo. Mientras la boca de la ojiverde se entretenía con sus pechos su mano derecha bajaba con lentitud hasta acariciar sus labios mayores pasando su dedo índice sobre la línea sin adentrarlo, empapándose con la necesidad de Camila.

-Demonios Lauren. Por favor...- susurraba de manera entrecortada.- te necesito.

Lauren sonrió sobre su pecho. Con su nariz acariciaba el contorno del pezón izquierdo, con sus dientes lo sostuvo dando pequeñas lamidas con la punta de su lengua a la vez que adentraba su dedo acariciando de forma suave su clítoris. Camila cubrió su boca con su mano para amortiguar sus gemidos. Por suerte su cuarto se encontraba lejos de los demás.

Siguió descendiendo por el cuerpo de la morena dejando un camino de besos húmedos por su piel. Se arrodillo en la orilla de la cama tomando las piernas de la morena jalándola hacia ella para acomodarlas en sus hombros. Su boca descendió por la cara interna del muslo sintiendo el calor que desprendía el sexo necesitado de Camila.

Su lengua recorrió desde la entrada hasta el inicio de su pubis recolectando el líquido que emanaba ya de el, sintiendo el dulce sabor en su boca. Volvió a ubicar su lengua sobre la abertura de su entrada y la adentro sin más preámbulos penetrándola hasta donde podía y moviéndola por sus paredes vaginales.

-¡Maldición!- Llevo sus manos a la cabeza de la pelinegra empujándola más a ella.

Lauren subió su lengua hasta el clítoris de la morena empezando a morder y chupar con necesidad. Camila movía sus caderas restregándose en la boca de la pelinegra. Arqueo su espalda sintiendo el orgasmo formándose en su vientre.