Los diarios de Caroline I

Capítulo 3 Feliz Cumpleaños Caroline

Querido diario,

Antes de mi sexto cumpleaños mi madre se encargaba de organizar la fiesta, pero cuando cumpli los seis cogi una carpeta y en ella empece a organizar todos mis cumpleaños hasta los dieciocho. ¡Los gloriosos dieciocho! Tenia cada detalle planeado, bueno, eso antes de convertirme en vampiro y haberme quedado anclada en los diecisiete.
¡Los estupidos diecisiete! Lo bueno de cumplir diecisiete es estar a un paso de los gloriosos dieciocho.

Se de sobra que mis amigos han planeado una fiestecita, pero no tengo ganas de celebrar nada.

Hace una semana desde la gala de los fundadores y en unos días es el baile de la década, esta vez son los años 20, mañana mismo toca decorar el instituto.

-Cariño vas a llegar tarde al instituto.

-Ya me voy.

-Feliz cumpleaños hija.

-Gracias, adiós, te quiero.

Nada mas aparcar Tyler me intercepto.

-Feliz cumpleaños Car.

-Gracias.

-¿Qué te pasa? Tu cumple es el mejor dia del año.

-No tengo ganas de celebrar nada.

-Lo que quieras.

Entre, me dirigi a mi taquilla, Elena y Bonnie la habían decorado con serpentinas y un corazón gigante. Uff... cuánto quiero a esas dos, pero hoy no es mi día. Sera mejor que me vaya a casa.

-¡Caroline!

-Hola Stefan.

-Tienes cara triste, ¿qué ha pasado?

-Nada.

-Vamos al Grill y me cuentas que pasa.

-¿Eres adivino? ¡Necesito una copa ya!

-Yo también tengo algo que contarte.

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-Dos cervezas

-¿No vas a tomar ron o bourbon? Quién eres tu y que has hecho con Stefan.

-La cerveza también está bien.

-¿Qué tenias que contarme?

-Tú primero.

-Um... evasivas, es algo gordo.

-Solo estoy siendo educado. Damas primero.

-Está bien. Es simplemente que no me apetece celebrar mi cumple.

-Normal, yo tampoco lleve muy bien celebrar mi primer año como vampiro.

-En tu primer año mataste a medio pueblo. No es anormal que no lo celebrases.

-Hablando del Stefan destripador.

-¿Qué ha pasado?- mi tono adoptaba preocupación- ¿has tenido problemas para controlar al destripador?

-No, no, tranquila, no es eso.

-Que susto joder.

-El problema es que no paro de pensar en Elena, y al pensar que me dejo por mi hermano, tengo ganas de dejar al destripador salir.

-Joder, Elena cometio un error, pega a Damon un puñetazo y luego hablalo con el.

-Aja, primero le pego y después lo hablamos. Es buena idea.

-También podrias romper bloques de cemento, tu solo imaginate que ese bloque te ha jodido la vida.

Ambos estallamos en risa. Bromeabamos y hablamos durante horas, cuando fueron las cinco nos despedimos.