90 días junto a ti [Noah Schnapp Y Tú]

Estas loco

El ensayo había terminado. Era una noche de viernes y no tenía planes. Sé que suena extremadamente normal, en mi no, pues no olviden que soy un     "niño famoso". Pero, esto también se debía a mi ausencia de mportancia en el medio  actualmente.

Esto era perfecto, por fin tenía tiempo para estar conmigo, con mis amigos y más importante, con _____.

- Fue un placer sr. KingWell - _____ se despidió con la mano-

- Igualmente _____-

- ¡ ______ !

- ¿Si? - se dio la vuelta después de tocarle por el hombro-

- ¿Estás libre hoy?- mierda, no puedo ser más obvio-

- ¿Es una invitación? - dijo enarcando una ceja-

- Si así lo quieres ver- sonreí nervioso mirando hacia el suelo-

- Claro que s...-

El fiat de su tío se aparcaba nuevamente, y se oponía a la respuesta de _____

- Me tengo que ir- susurró sin verme -

- Es un no, entonces. - dije sin ánimos-

Ella me dio la espalda y subió sin mirarme al auto. Esté arrancó y me quedé como idiota viéndola marcharse. Cómo si ella me leyera la mente, 2 segundos después de que el auto se fuera desvaneciendo en la acera recibí un mensaje:

Nena💜:

-Yo nunca dije que no.

Eso me dio una idea.
También esperanzas.

______'s POV:

Era la primera vez qué mi tío pasaba por mi a un ensayo. En todo el trayecto no me dirigió palabra, para ser sincera sabía que no era correcto que él y yo estuviéramos así, pero yo ya no podía ser más la niña qué el había criado. No por que el lo hiciera mal , si no por que el camino que yo tomé, no era el que yo quería tomar. Esté nunca fue mi camino. Yo era lo que él quería que fuera.

Aunque gracias a el conocí a Noah.

Tan pronto como nos estacionamos salí del auto y me dirigí a mi habitación.
Cerré la puerta y fui a buscar ropa para cambiarme e ir con Noah.

Noah😂❤:

- Te veo a las 7.

Al ver ese mensaje me apresuré aún más, tiré un vestido holgado en la cama, en eso, oí a mi tía llamar a mi puerta.

- Un segundo..- dije apresurada a guardar la muda pero ella entró primero-

- No eres muy discreta cielo. - dijo con su voz dulce- Cariño... no es necesario hacer esto. - dijo y se sentó en la cama- Ven - palpó el colchón indicandome que me sentará.

Me senté a su lado y ella acarició mi hombro.

- Ese muchacho... ¿Noah? - preguntó y yo asentí- Noah. Es muy tierno.

- ¿Tu no estás en contra de él?

- ______, le hice una promesa a tu madre, yo nunca podría estar en contra de tu felicidad, y estoy segura, de que Noah te hace muy feliz-

No pude evitar sonreir, pues era cierto.

- Escucha, ______, tienes mi permiso de salir hoy, PERO , regresando tienes que contarme todo, con pelos y señales.

- Por supuesto- sonreí de oreja a oreja-

- Y te quiero aquí mas tardar a las 10-

- No hay problema- saqué mi ropa y me vestí-

- Oye...- dije aún con los jeans abajo- ¿No tendrás problemas con mi tío, verdad? -

- Tu tío tendrá que aceptar está situación tarde o temprano-

- Te amo -

- Yo también, apresurate mujer-

Terminé de vestirme y arreglarme muy poco, estaba a punto de correr hacia la puerta, cuando un golpe en mi balcón me lo impidió.

- ¿¡ Qué carajos te pasa Schnapp?!

- Lanzó rocas a tu balcón - dijo colgado de la enredadera de la pared- ¿Estás lista? - dijo con un tono persuasivo-

- Estás loco- reí al ver su expresión alumbrada por la luna-

- Y tu muy cuerda ¿No? - dijo con sarcasmo-

-Aún puedo tirarte- amenacé tomando su mano-

- Tu ganas - dijo subiendo hasta el balcón-

- Y...¿ Qué gano?- dije ayudandolo a subir totalmente-

Quedamos frente a frente, encontrándonos miradas, la luz de la luna sólo hacía el momento más incómodo.

O más perfecto.

Me encontré sus ojos verdes en medio de un suspiro.

Sus ojos se encontraban con los míos y luego bajaron a mis labios rápidamente.

Hice lo mismo y tragué saliva.

Quería gritar, pedir auxilio.
De sentir esto.
Sabía que no era correcto.

Fue entonces que se inclinó y tomándome de la cintura me plantó mi primer beso.
Ahí
Bajo la luz de la luna
En un balcón.

Ví mil destellos en el cielo, sentí aquellas mil mariposas que yo creía muertas. Lo sentí todo.

Fue entonces que él separó sus labios de los míos. Su mirada era enigmática, guardaba mil palabras que yo no lograba descifrar, pero no me importó mas y le devolví el beso.

Me lancé hacía el tomándolo de la nuca enredando mis dedos en su cabello. Él correspondió tomándome nuevamente de la cintura abrazandome hacía el.

Nos separamos a falta de aire, miré nuevamente esos hermosos ojos verdes y me dí cuenta que había resuelto aquel enigma.

El me sonrío de la manera mas hermosa posible y yo lo hice igual.