Capítulo 5.- Primeros pasos

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Lan XiChen alzo la cabeza levemente y meditó todo aquello, recientemente había ocurrido lo del juicio, que de pronto se casaran implicaría una investigación, le preocupaba en cierta medida este asunto, sin embargo si por ejemplo las investigaciones comenzaran en el instituto todo el mundo ahí daría fe de que ellos han tenido alguna especie de relación desde siempre, e incluso a muchos no les sorprendería, no quiso decir esto en voz alta para no preocupar innecesariamente a Jiang Cheng.
- Bueno, tu sabes mucho más que yo sobre todo esto, solo debemos tratar de dar prisa a cada etapa – a Lan XiChen le dolía realmente llamarle “etapa” a lo que sería el día de su matrimonio con él - permíteme solicitar a mí la hora para el matrimonio en la alcaldía.

- Si – Jiang Cheng no intervino, como todo en la vida, un alfa tendría mejores oportunidades, incluso al intentar hacer un trámite.

- Y ahora… ¿cuál será nuestra casa? – pregunto Lan XiChen con una sonrisa.

- “nuestra casa”- pensó Jiang Cheng poniéndose rojo y un tanto nervioso – por-por supuesto que la mía, desde siempre he tenido una habitación decorada y equipada para Jin Ling, ahora debemos hacer parecer que el lugar es de ambos…

Desde siempre hubo ahí un espacio para su sobrino, aun se encontraba en esa habitación la cuna, bajo una manto plástico, una preciosa cuna que nunca pudo cobijar al bebé para quien fue hecha, así como quedaron un montón de cosas que Jin Ling no llegó a usar, ahora todo estaba ahí como un recordatorio de los fracasos de Jiang Cheng por recuperar a su familia, ahora tendría que remodelar todo, adecuándolo a un joven de dieciséis años.

- En ese caso, ¿por qué no hacemos lo que podemos en este mismo instante? Vamos a mi departamento y comencemos a llevar algunas cosas.

Lan XiChen era un especialista en Jiang Cheng, podía adivinar que algo tan simple como iniciar la fachada del plan haría sentir a Jiang Cheng que realmente estaba sucediendo, que esta posibilidad estaba ocurriendo, y por eso sin esperar respuesta fue a la cocina donde el matrimonio platicaba en susurros.

- Hermano, Wei Wuxian, queremos despedirnos, tenemos cosas que atender.

Lan Wangji asintió y Wei WuXian se plantó frente Lan XiChen.

- No cometas el error de presionarlo o matarás toda aquella posibilidad que tienes, en este momento él necesita un amigo con tu poder y tus contactos, no un amante, ya habrá tiempo para lo demás.

- Lo sé, créeme no podría perdonarme si arruino esto para él – sonriendo sinceramente salió de la cocina seguido del matrimonio.

a Lan XiChen le hacia muy feliz que Jiang Cheng tuviese un amigo como Wei Wuxian.
Se despidieron en la puerta y así Lan XiChen y Jiang Cheng cada uno en su auto condujeron hacia el departamento del primero, cargaron ropa, pertenencias básicas, un par de fotos y algunos artículos personales de Lan XiChen.

Luego ambos dentro de la casa de Jiang Cheng comenzaron a ambientar el lugar, zapatos de Lan XiChen pulcramente ordenados bajo la cama, algunas camisas perfectamente colgadas en el closet, pantalones en un cajón, ropa interior en otro, decidieron ser detallistas, ninguno sabia hasta qué punto verificarían su unión, artículos de baño, dos reconocimientos de Lan XiChen en la estancia y así poco a poco fueron generando aquella ilusión de vida en pareja. Parado en el centro de su casa Jiang Cheng miró a su alrededor y su casa ya no parecía suya… Lan XiChen había dejado su huella en todo lo que le pertenecía e incluso él mismo con todo este favor parecía sentirse como si le debiera parte de su alma. No resistió más todo el torbellino que atacaba su corazón y se precipito a sentarse en el sofá, se inclinó hacia adelante cubriendo su rostro y comenzó a llorar.

Lan XiChen preocupado corrió a su lado y lo rodeo con sus brazos.
- ¿Qué ocurre? ¿Qué es lo que pasa, fue demasiado para ti hacer todo esto? Podemos ir más lento.
- No, no, no – decía entre sollozos el omega- esta todo bien, ver tus cosas aquí me hace sentir que he dado el prime paso… es sólo que… es tan duro necesitar a alguien. – dijo nuevamente llorando.

Amor IntempestivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora