Opuestos En Común. Nomin

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Se mantuvo con él mientras terminaba de arreglarse, estaba sentada en el borde de su cama mientras él se peinaba y aplicaba un poco de maquillaje sobre su rostro tratando de disimular las imperfecciones que tenía en su rostro. Una vez listo, tomó su billetera, llaves y celular. El chófer le estaría esperando debajo para llevarle hasta el lugar de encuentro.

— Te vez hermoso mi niño.

La señora Lee sonrío de manera amplia mientras dejaba una pequeña caricia en su cabeza. Esa mujer se volvió una especial de madre para él y se permitía llamarlo de manera informal cuando su verdadera madre no estaba en casa. Ella le cuidó de niño, quién básicamente le había criado mientras que su madre estaba en reuniones de negocios junto a su padre.

— Yo... gracias. Ya es hora de que me vaya.

No entendía porque ella se encontraba mirándolo de esa manera, con una sonrisa algo traviesa en sus labios. No quiso darle demasiadas vueltas al asunto por lo que solo bajó las escaleras y salió de casa saludando al chófer Kim antes de entrar al auto.

Revisaba sus mensajes viendo que sus otros amigos también estaban en camino. Jeno era el único quien aún no había respondido, le habían agregado al grupo en común el día anterior. Mordió su labio algo nervioso ante la idea de que no fuera a su pequeña reunión. No es como si estuviera ansioso de verle ese día pero sería algo triste que no asistiera a la primera salida juntos, como grupo.

Se puso sus auriculares y colocó la música a todo volúmen, tratando de no estar pensando demasiado las cosas. Casi media hora después estaba ya en el centro comercial. En la fuente ya estaban Mark y Chenle. Se sentó junto a ellos esperando a que los otros dos llegaran. Ren Jun llegó cinco minutos después y se mantuvieron esperando al último. Pasaban los minutos y el alfa no llegaba. Empezaban a pensar en que no vendría hasta que el aroma a café inundo sus fosas nasales y Jaemin sabía que ese no era el olor de los lugares a su alrededor. Jeno apareció casi corriendo entre las personas. Traía unos jeans ajustados y un suéter celeste de cuello de tortuga, el cabello aún ligeramente húmedo y peinado hacia atrás.

— Lo lamento, perdí el autobús por lo que se me hizo tarde.— Llegó con ellos sonriendo de manera suave y haciendo una pequeña reverencia viéndose tenso. —

— ¿El autobús? ¿Has venido en autobús? Nunca he subido a uno. — Chenle le miró curioso y Jeno abrió sus ojos sorprendido y luego su rostro mostró una clara expresión de diversión. —

— ¿Por qué no me sorprende? No son tan malos, al menos puedo viajar solo sin tener que depender de nadie para hacerlo.

No preguntaron mucho luego de eso, se levantaron los que estaban sentados y comenzaron a caminar por el lugar. Compraron un par de cafés en el Starbucks para beber mientras recorrían el lugar. Jeno se mantuvo al lado de Jaemin hablando con él de manera casual, sacando temas al azar de conversación mientras que los otros tres chicos iban en frente hablando sobre banalidades.

Jaemin se estaba divirtiendo, era en si algo muy normal, una salida como tantas que había tenido antes pero se reía más de lo que alguna vez lo había hecho. El alfa parecía saber exactamente que debía de decir para provocar la risa de sus labios.

Pasaron por un par de tiendas en donde Mark les pidió que le acompañaran a comprar un traje que necesitaba para una cena de negocios a la cual su padre le llevaría. Entraron a una de las mejores del lugar, comenzando a revisar todo a su alrededor mientras que la pobre beta atendiendo trataba de no volverse loca entre tantos chicos pidiendo cosas diferentes.

Finalmente el canadiense había encontrado uno que le gustara por lo que entró al probador, mientras tanto los otros tres chicos hablaban sobre la calidad y las telas. El castaño se percató de que Jeno no estaba con ellos, por lo que le buscó con la mirada encontrándole no muy lejos de ellos. Observaba uno de los trajes mientras sostenía la manga del mismo y sonreía suavemente.