Soulmate ➳ Yoonmin┊2™

⚛ 06

Ya era de mañana y un pelirosa se encontraba guardando la poca ropa que tenía en una mochila, al terminar volteó y miró el lugar por unos minutos, en la habitación no había nada especial pero quizá para Jimin si, gracias a la confusión de Yoongi, lo conoció, aunque éste aún lo confundía con otra persona y aveces sentía una molestia, tan pronto lo sentía siempre lo negaba, seguro que eran celos de amigos, si, debe ser eso.

— ¿Nos vamos? — la voz de su mamá resonó en las paredes, el menor la miró y asintió para cargar su mochila, dio una última mirada al cuarto para luego cerrarla.

Mientras pasaba con su mirada buscaba a Yoongi, este dijo que iría a hacer algo y luego lo buscaría para despedirse, pero ya tardaba bastante y sentía un gran vacío en él.

— ¿A quién buscas cariño? — preguntó su mamá viendo algo rara al ver a su hijo con un extraño comportamiento.

— No, nada — la desilusión llegó de golpe en él así que solo se iría, al fin y al cabo no lo extrañaría para nada, era un simple desconocido quién se aferraba a él.

Su mamá tomó un taxi para decirle la dirección pero se negó, mientras esperaba parado su vista fue hacia su derecha y lo vio, Yoongi estaba ahí pero no solo, sino que con una chica, este tenía un pequeño ramo de flores y le sonreía a aquella chica, su ceño se fruncio mientras miles de pensamientos se apoderaban de él.

¿Acaso le dejo por hablar con aquella chica? ¿Porqué no fue con él? ¿Acaso esa chica es su novia? ¿No que gustaba de él?

Eran tantas preguntas que no sabía las respuestas, rendido solo bajó la mirada mientras miraba sus pies, al menos se entretenía con eso, pero vio como unos zapatos se ponían delante de los suyos, algo dudoso alzó su cabeza y casi grita del susto al ver a Yoongi ahí.

— Perdón por tardar, me había encontrado con una amiga de secundaria y me entretuvo — explicó.

— Ahh no tienes porque explicarme nada, al fin y al cabo sólo nos veremos por hoy, seremos desconocidos y ya — dijo como si fuera lo más fácil, pero esas palabras hirieron un poco el corazón de Yoongi.

— Ehhh si, eso...—  su mirada cambió a casi una triste y fingió una sonrisa — esto es para ti, adiós Jimin — dicho eso besó la mejilla del menor y se alejó de ahí con el corazón roto.

El pelirosa se sentía una mierda, sabía que al decir esas palabras notó como el semblante del mayor se volvió triste, prefirió no decir nada pero al sentir como algo suave se situaba en su mejilla se puso rojo, su cara ardía demasiado y su corazón empezó a latir desenfrenadamente.

— ¿Que fue eso? — susurró para sí mismo.

— ¡Hijo! ¡Ya ven! ¡Porfin encontré un taxi para que nos lleve!

El pelirosa sólo miro hacia atrás por última vez y no lo encontró ahí, con un suspiro fue hacia su madre y entró al taxi, éste arrancó y pronto se iba a su casa.

✨✨✨✨

El taxi se estaciono en una casa casi elegante, Jimin junto a su madre salieron de ahí para abrir la puerta y así ver el interior de ésta.

Nada había cambiado, las paredes color blanco, las paredes del mis contorno, las fotos colgadas en las paredes, sus muebles marrones, en medio una alfombra negra con rayas grises, la televisión grande al frente, más al fondo había una mesa de barra que separaba la sala con la cocina, a su derecha en un pasillo había un baño y casi en medio había una escalera que llevaba al segundo piso.

— Como extrañaba la casa — dijo Jimin con una sonrisa — iré a ducharme y cambiarme

— Te apuras, haré el almuerzo — el menor asintió y subió a su habitación.

Al subir había tres pasillos, a su derecha había sólo una puerta que también era un baño y a su izquierda no había nada, sólo unas escaleras que te llevaban al sótano de arriba, donde estaban las cosas viejas y que ya no utilizaban, de frente de él otro pasillo donde habían tres habitaciones, en la primero puerta donde sus padres dormían, bueno, sólo su mamá ya que su padre había muerto cuando él tenía sus 8 años, él era hijo único, a la segunda puerta que era pegada a la izquierda era la de invitados y la otra que era al fondo pegado a su derecha, su habitación.

Entró en ella y dejó sus cosas en su mesa de estudio, su habitación estaba igual como la dejó, sus paredes de color celeste pastel, también sus fotografías de él colgadas, su cama estaba en el medio, una pequeña mesa de noche a su derecha, a su izquierda sólo una pequeña biblioteca de libros, a su izquierda pegado a la pared estaba su armario y delante de él una televisión casi grande, sus medallas en una mesa apartada en una esquina, donde había ganado por ser el nadador más rápido y también por baile, especialmente por danza contemporánea.

Dejó de ver su habitación y fue a ducharse, apenas entró al agua disfruto de ella y trato de quedar completamente limpio ya que ¡Por dios! ¡Estuvo cinco años en coma! y no le habían bañado.

Al ver una cicatriz en su cadera izquierda la tocó pero al toque sintió un dolor, de pronto de vio a él en una casa con un chico que no podía ver el rostro completamente, ambos comían juntos y de un momento a otro de la nada desapareció y tal pronto apareció en esa casa el chico lo abrazó.

Al volver a la realidad se tocó su cabeza algo adolorido — mierda....

Dolía horrores y no sabía exactamente de donde vio eso, se había sentido tan real, trató de calmarse así que se bañó rápido para cambiarse e irse abajo con su mamá.

— Tardaste mucho

— Perdón, me había quedado pensando en algunas cosas — se excusó y empezó a comer — ¡carne!

Una sonrisa se formó en sus labios mientras comía de ella pero de la nada recordó cuando estaba con Yoongi, cuando éste le había llevado almuerzo en el hospital, su sonrisa se ensanchó más y comió de ella sin dejar se sonreir.

No sabía porqué sonreía como un tonto si tan sólo apartir de hoy no volvería a ver a Yoongi, sin duda una sensación algo extraña para él. 

Ym-