Llegue a casa algo cansada de las preguntas que no paraba de hacerme Kathia, ya que no nos habían mandado deberes decidí dedicarme la tarde para mí, me lo merecia ¿no? Entre a mi cuarto y tire la mochila en el suelo sin importar dónde ni como cállese. Me tire en la cama y medite durante unos minutos que podía hacer, pero unos pequeños golpes en la ventana no me dejaban concentrarme en ello.
Me levante, la abrí y me asome, pero no había nada ni nadie, así que me fui al baño...
Abrí el grifo y llene la bañera con agua caliente y junto con algo de espuma, baje la luz y me puse canciones de Ed Sheeran, relajantes, me metí, cerré los ojos y me olvide de todo...
Cuando la lista de canciones acabo, me aclare y al salir casi me caigo por culpa de mis pies mojados pero eso es lo de menos.
Me había estado una larga hora allí metida, ahora iría a merendar un ice-cream junto a Kathia y tendría la tarde perfecta.
Dani se colocó una toalla para su cuerpo y otra para la cabeza, así el pelo se secaría antes.
Cogió el móvil y puso de nuevo música a todo volumen dejándolo encima de la cama, entro al baño y cuando se estaba secando el pelo…
Estaba secándome el pelo mientras cantaba cuando oí un ruido extraño decidí ignorarlo y seguir a lo mío, pero no pude.
-Princesa sabes que el secador estropea las puntas. -Dijo Drake apoyado sobre el marco de la puerta de mi cuarto de baño haciéndome dar un pequeño salto a causa del susto que me había dado. Además que sabía el de puntas abiertas.
-¿Qué haces tú aquí? y ¿cómo has entrado?-Pregunte… ¿enfadada?
-Visitar a mi princesa y saber si ya se había decidido por pasar una tarde conmigo.
-¿Tu princesa?-Pregunte algo desconcertada.-Y no, no voy a pasar una tarde contigo.
-Eso ya lo veremos. -Dijo apartándose de la puerta puesto que yo quería salir.
-¿Te acuerdas de que tienes mi pulsera, y de que me la tienes que devolver?
-No te preocupes que cuando te la devuelva te va a hacer mucha más ilusión que si te la devuelvo ahora.
-Idiota que eres...-Dije negando.- ¿Se puede saber cómo has entrado?
-No es mi culpa que sea tan fácil escalar hasta tu ventana. Ten cuidado princesa cualquier día se te cuela alguien. -Dijo con una sonrisa algo insoportable, ¿porque no dejaba de sonreír, que le hacía tanta gracia?
-¿Dani hija con quien hablas esta Ann dentro? -Los pasos de mi madre se aproximaban a mi habitación.
-Yo estoy en mi habitación mama. -Contesto a gritos Ann.
-Mama estoy cantando. -Dije haciendo gestos a Drake para que no hablase.
-Puedo entrar necesito coger una cosa. -Dijo mi madre mientras daba golpecitos en la puerta.
-Espera un momento que me tengo que cambiar.-Me gire continuamente para buscar un sitio donde esconderle mientras el reía. -¿De qué te ríes?-Dije en voz baja
-De ti princesa-Dijo con mi mismo tono de voz.
-Ven. -Le agarre del brazo
-Mmm contacto físico, vamos avanzando princesa.-Dijo riendo
-Cállate y metete en el armario.-Le mostré el armario abierto para que se metiese.
-Hija pero cuanto tardas en cambiarte.
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Tú ©
Teen FictionY una noche apareciste tú y me cambiaste la vida. *** Prohibido copiar y/o adaptar la novela. Obra registrada en Safe Creative. Código- 1412202811329 Fecha-20/Diciembre/2014