#5 Eterna espera - Logan A.K.A Wolverine 💔

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LOGAN X LECTORA
#DE PALABRAS: 1.318
ADVERTENCIAS: Mención de accidente, pérdida de memoria. ¡Leanlo hasta el final!
ESCRITO POR: PomeloVillano
N/A: Logan es uno de mis personajes favoritos de Marvel, tanto en los comics como en las películas
#PomeloFangirl
#BenditoSeaHughJackman  #ArañameConEsasGarrasPapu

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-¿Qué te sirvo, cariño?- Una voz cargada de dulzura interrumpió mis pensamientos. Al elevar la mirada, vi a la criatura mas exquisita del planeta. Su sonrisa era calmada y amable  -típico de su rubro- tan natural en ella.
-Wisky y quizá tu número.- Las palabras simplemente escaparon de mi boca. Una suave risa se escapó de ella.
-Puedo con lo primero, pero lo segundo quizá no sea lo mas conveniente, cariño.- Posó un vaso frente a mi y sirvió la bebida ámbar.
-Te propongo un trato,- Dije sonriendo. Ella solo elevó una ceja intrigada. -Si para cuando cierre este bar aun no quieres darme tu número, lo aceptaré. Pero, si sientes la impetuosa necesidad de darme tu número, aceptaras ir a una cita conmigo.- Di un trago a mi vaso, sin alejar mi mirada de la suya. Extendió su mano, sin dudarlo la tomé.
-Trato.- Dijo sonriendo.
Esa vez no tuve que esperar demasiado. Al final de la noche nos encontrábamos besandonos frenéticamente en el asiento trasero de su auto. Fue magnífico.
~
Por la primera cita esperé dos semana. Fue eterna la espera, pero valió la pena. Toda la pena del mundo.
No quise caer en el cliché de llevarla a cenar a algún lugar caro porque ella merecía algo mejor, así que preferí cocinar yo. Su sonrisa era inmensa, como si jamas hubieran tenido un gesto tan simple con ella.
Fue imposible no enamorarme. Era sencilla en todos los aspectos y tan compleja a la vez. Indescifrable y abierta, dulce y pasional, hermosa por dentro y por fuera.

No esperé demasiado para que su amor me correspondiera. Su corazón era inmenso y mi amor por ella aun mas.
Tampoco esperé demasiado para que nuestro amor escalara; A los dos meses de comenzar a salir nos mudamos juntos. Su casa parecía como salida de un cuento, era el lugar que resguardaba nuestros mejores momentos.
A los seis meses nos comprometimos y dos meses después nos casamos. Fue una ceremonia rápida en Las Vegas, solo nosotros dos.
En nuestro primer aniversario nos enteramos de que tendríamos a nuestro primera hija. Ambos lloramos de felicidad.
Ocho meses después, nuestra hija Gabrielle se unió y agrandó la familia. Era un pequeño clon de ella, hermosa y dulce como nadie. La amé instantáneamente, tanto como a su madre.
~
Quizá para mi diez años sean un suspiro, pero a su lado pasaron lenta y calmadamente. Los años mas felices de mi vida, sin duda alguna.

No teníamos por costumbre celebrar San Valentin ya que a ella nunca le gustó eso y yo soy un maldito cínico.
Ese San Valentin quise hacer algo diferente por llevar una década juntos, por lo que allí me encontraba esperándola en un restaurant demasiado elegante para mi gusto.
La hora de encuentro se hizo presente y ella, quien siempre llega puntual a todos lados, no había llegado aún. Le envié un texto preguntando si llegaría pronto o si había cambiado de opinión y, para mi sorpresa, no respondió aquel mensaje.
Al pasar los primeros treinta minutos comencé a preocuparme, por lo que decidí llamarla. Iba directo al buzón de voz lo cual era aun mas extraño. Llamé a casa y la niñera me dijo que todo estaba en orden pero que T/N no estaba allí.
Ya pasada una hora, una de las meseras me dijo que debía desocupar la mesa para el siguiente cliente. Accedí amablemente, mientras llamaba a T/N una y otra vez. Salí del restaurant cuando finalmente alguien respondió... Dijo llamarse Amy y que trabajaba en el ala de emergencias de un hospital, que lamentablemente ella respondía porque T/N había sufrido un accidente. Un conductor ebrio o algo así, embistió al taxi en el que ella iba. El taxista murió mientras T/N se encontraba muy grave. Colgué la llamada y me dirigí hacia aquel hospital a toda prisa.
Esto simplemente no podía estar pasando...

Al llegar al hospital, la chica de recepción me indicó a donde debía ir. Ya en el ala de cuidados intensivos, la espera fue eterna.
Algunas tortuosas horas después, un médico de nombre algo extraño me dijo que T/N había salido del quirófano, que estaba fuera de peligro pero que su cabeza había sufrido un daño algo importante, su pierna derecha tenía una fractura compuesta, dos costillas fracturadas, que a pesar de todo era un milagro que haya sobrevivido y había que esperar a que evolucionara de manera favorable. Ahogué momentáneamente mis ganas de llorar y le agradecí por todo.
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Pasada una semana, el peso de la culpa comenzaba a aplastarme lenta y dolorosamente. Ella se estaba recuperando pero aun no despertaba. Todo era una horrible pesadilla, una que no terminaba mas.
La tercera semana, la idea de perderla pesaba en mi como si llevara todo el universo sobre los hombros. Los médicos seguían diciendo que debía esperar, que ella despertaría.
Para la sexta semana finalmente sucedió. Ella despertó y todo parecía estar en orden.
Cuando finalmente me permitieron ingresar a verla, mi corazón palpitaba con tanta fuerza como la primera vez que la vi.
Me acerqué lentamente a su cama, una sonrisa se formó en mi rostro al verla despierta.
-Hola cariño.- Mi voz sonó calmada a pesar de querer gritar de felicidad. Ella me observó por un momento, frunciendo en ceño.
-Disculpe, ¿Quién es usted?- Su voz algo suave y ronca me noquearon. Sentí como su mi corazón se fuera a salir de mi pecho.
-No hagas bromas, no es divertido T/N.- Dije sonriendo. Ella simplemente negó con la cabeza haciendo que mi sonrisa se desvaneciera.
-Hablo en serio, ¿Quién es usted y por qué diablos me llama cariño?- Ella elevó levemente su voz demostrando que, muy a mi pesar, hablaba en serio.
-S-soy Logan... Tu esposo.- Dije con un hilo de voz. Ella abrió sus ojos en sorpresa.
-Esto no es posible. No, no. ¡Yo no puedo estar casada!- Una enfermera ingresó y me pidió amablemente que me retire, que T/N debía descansar. Al salir noté que ella estaba llorando. Jamas la había visto llorar de esa manera. Eso simplemente me destruyó.

Ella recordaba a Gabrielle, a sus padres, a sus amigos e incluso donde vivía... Pero no a mi. El destino, tan cruel como podía ser, borró por completo mi existencia de su mente.
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Los días se transformaron en semanas, las semanas en meses y los meses en años. Sin importar todos los intentos de su familia y amigos, yo seguía siendo un extraño para ella. Aun podía ver a Gabrielle, pero siempre con sus padres o alguien mas como intermediario, ya que ella no quería verme.
No pasó mucho para que me pidiera el divorcio,  ella no quería estar casada con alguien a quien no conocía. Yo accedí, no podía negarle absolutamente nada aun si eso significaba que ella se alejaría aún mas de mi.
~
Al quinto año, Gabrielle me contó que T/N comenzó a tener citas. Si quedaba algo de esperanza de que ésta eterna espera terminara, simplemente se esfumó. Ella estaba buscando ser feliz, pero no a mi lado.
La realidad es que, a pesar de todo, seguía inmensamente enamorado. Pero si ella no tenía idea de quien era y no quería saber nada de mi, ¿Quién diablos soy yo para intentar convencerla de algo que no quiere y no necesita?
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Dos años después, supe que T/N se casó nuevamente. Al parecer él es un buen sujeto y le dio la boda que ella siempre soñó, algo que yo no hice. Gabrielle dice que él es cool, que es abogado en una firma importante y que va a pagar la universidad a la que ella quiera ir. Que T/N y él se mudaran a una casa nueva cuando Gabrielle parta a la universidad.

Dice que T/N es feliz y eso me hace feliz. Ella se merece el universo entero y más. Muchísimo más.

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☆ ONE SHOTS MARVEL ▪ VOL. 1 ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora