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JeongGuk sostenía la mano de JiMin por millonésima vez en el día cuando decidieron separarse del equipo de grabación para comer un poco. Avisaron que se separaban del grupo, y la mayoría de los que guardaban confianza con él bromearon sobre un 'rapidito', lo que causó risas y corazones nerviosos entre los dos jóvenes. Las calles de aquella zona no eran tan concurridas de noche, pero eran más seguras debido a su localidad. Sin embargo, al llegar los dos a un puesto de comida mexicana, se dieron cuenta de la cantidad de gente que había ahí.

Eran como mosquitos yendo en dirección a una lámpara eléctrica. Sólo que eran veinte personas sin relación alguna haciendo fila para pedir tacos al pastor. De fondo, se podía escuchar el chocar de las olas con la firmeza de las rocas y la suavidad de la arena tersa. JiMin apoyó su cabeza en el hombro de JeongGuk, mirando al frente con los ojos entrecerrados y la mente en en quinto cielo. Seguía preocupándose, aunque los días y el tiempo, la compañía, le habían ayudado a no irse por completo en sus pensamientos.

- Hace un poquito de frío. - murmuró el muchacho con una expresión taciturna. La reacción inmediata de JeongGuk fue abrazarle y dejar un suave beso en su cabeza, sin ningún sonido exagerado o duda alguna. JiMin soltó una risita burbujeante, como si fuera un niño pequeño al que acababan de pillar haciendo una travesura, cosa que enterneció el corazón de JeongGuk, como si no pudiera más.

- Si quieres, te paso mi sudadera. - ofreció el rapero. JiMin río un poquito más fuerte, cubriéndose la boca con su mano, pues la idea de tener puesta una prenda de ropa que ya le quedaba gigante a JeongGuk... le causaba gracia. No quería usar cosas excesivamente grandes, no era de su estilo.- ¿Qué es lo divertido, hyung?

- Me vería como un saco de papas. - respondió suavemente el modelo, usando un acento de Busan muy sutilmente, de forma inconsciente. De todos modos, con JeongGuk no le dificultaba, ya que la familia del rapero había nacido en la misma ciudad y, por tanto, el acento también quedaba en él.

- Aw. - JeongGuk bajó sus brazos a su cintura para tomarle fuertemente y alzarle un par de segundos, como si fuera su peluche más delicado y favorito.- ¡Un saco de papas muy tierno!

- ¡No, Gguki! - rió JiMin con el corazón en cada voluta de su voz, fluyendo como un río desde sus labios carnosos. Sus pies tocaron el concreto rugoso de la vereda, y los dos se rieron lo más discretamente posible, para no molestar a los demás con sus voces. Aunque nadie le estaba mirando o recriminando nada: casi un sueño.

- ¿Cuál es el problema con usar mi sudadera? Yo luzco como un saco de papas y está bien. - ahora JeongGuk hacía un puchero, desde aquel ángulo JiMin podía ver sus ojos y la forma en que el entrecejo se le arrugaba con suavidad y ternura, similar a un conejito. ¡JeongGuk era un conejo! Recordó un tweet que había visto hacía un tiempo, donde una fan ponía una compilación de fotos de su boca al lado de bocas de conejitos. Decir que el thread le había derretido el corazón era poco.

- Ya, pero a mí no me gusta.

- Entendible, tienes más estilo que yo.

- Así es.

JeongGuk le dió un suave golpe en el hombro, JiMin no paraba de reírse. Avanzaron dos pasos, entre risas y miradas llenas de goce y cariño. No se fijaron en que más gente llegaba, porque no lo creían necesario. Generalmente no es necesario, ¿no? No hace falta porque bueno, no esperamos usualmente las sorpresas tan casuales. Coincidencialmente, la tercera persona detrás de ellos pensaba lo mismo, maldiciendo por lo bajo porque otra vez estaban grabando en la playa, ¡justo en la zona donde visitaba! Qué mala suerte. Al menos estaba cerca de un conocido puesto de tacos al pastor.

- Muy bien, JeongGuk. Tú que sabes hablar inglés, - instó JiMin tras una charla animada sobre lo adorable que podían llegar a ser las papas, y que los sacos podrían usarse como moda.- dime cómo debo pedir los tacos.

JEON97 𐙚 来る . GGUKMIN AU.Where stories live. Discover now