Extra01.•Amigos con derechos•.

Start from the beginning
                                    

―Tu―respondió inmediatamente. Como si estuviese ansiando mi pregunta con tal de responder su veneno habitual.

Mi madre me había advertido sobre este tipo de situaciones, sobre él en especial. Sobre ignorarlo y fingir que no lo había escuchado. ¿Pero cómo podría ser capaz de hacer algo así cuando aquel idiota se reía en mi cara?

―¿Yo? ―repetí con sorna―¿Tan importante soy como para hacerte reír?

Su sonrisa mágicamente se desdibujó.

―Te crees la gran cosa, bastardo―dijo aquellas palabras como quien escupe el veneno de una herida. Con asco y amargura.

Fue como un golpe, uno fuerte. En especial porque era la primera vez que me llamaban de esa manera. Como si no fuese nadie y mi existencia fuese un error.

Como si fuese un monstruo.

Me quedé perplejo, observando a mi hermano de manera expectante. Consumiendo mi último poquito de esperanza en vano al ver que él no decía ni una palabra.

―¿No dirás nada?

El alzó ambos hombros.

―Si nos ponemos a analizar la definición de la palabra, no está mintiendo.

Un pequeño frio se apoderó de mi cuerpo. Sentía las manos cubiertas de un sudor frio, casi congelado. Solté una pequeña risa sarcástica e incrédula, para ocultar un poco mi postura dolida y me crucé de brazos.

―¿Eso es lo que piensas de mí?

―Eso es lo que todos aquí pensamos de ti―contestó mi primo a cambio.

Le dediqué la mejor mirada de repulsión que alguna vez pude haberle dedicado a alguien y entonces, sin quererlo, comencé a pasear mi vista por el resto de mis familiares. Había escuchado varias veces a mi abuela juntarse con mis tías y criticar entre algunas cosas, la política, algunos países extranjeros y, como no podía faltar, a algunos vecinos y amigos de la familia. Comentarios como "¿oíste que la hija de la señora Kim dejó la universidad?" o "El señor Cho le es infiel a su mujer con su secretaria" nunca faltaban. No pude evitar pensar si alguna vez yo protagonicé alguno de sus encuentros cotillas.

―¿Siquiera sabes cuál es tu verdadero apellido?

Esta vez no respondí. Dejé que el golpe me afectara solo porque una parte de mí siempre quiso saber eso desde que me había enterado de la verdad. Mi madre nunca había querido decírmelo. Supongo que por la vergüenza o quizá miedo a que yo me decepcionara de ella. Ya que, para mi, mi padre biológico era un signo de pregunta sin nombre ni rostro. Algo casi inexistente. Pero, al agregarle un nombre a esa mancha borrosa que tenía en mi cabeza entonces poco a poco se haría verdad. Sin embargo, era algo que tarde o temprano debería saber, estaba en todo mi derecho.

Finalmente, mi hermano mayor recordó quien era. O al menos se percató de que su primo estaba degradando a su hermano menor frente a él.

―Jun, para de una vez, no tiene sentido―pidió levantando una mano, como si hiciese una señal de "stop" pero menos exagerada.

―Mírate, queriendo encajar entre nosotros cuando eres un Jang.

―¡Para de una vez con esto! ―pidió JungHo. Justo a tiempo para cuando mi padre posó una mano sobre mi hombro.

Sin quererlo, me sentí incomodo ante su tacto, dando como resultado que moviese mi hombro de manera disimulada para soltarme de él. ¿El también pensaría que soy un bastardo? ¿se sentirá obligado a quererme solo porque quiso a mi madre?

―¿Qué sucede aquí? ―preguntó con suma seriedad.

―Nada―respondí sin animo―me iré a la playa.

FRDZ: Friendzone |J.JungkookWhere stories live. Discover now