EDITANDO Seduciendo a mi Jefe [HS] (2da Temporada de Sexo con el Nerd)

Capítulo Veintitrés "Being rude with a little bit of love"

-¿Cómo te sientes, bebé? -pregunté a orcajadas de Harry aún.

-Ti-tienes unas manos mágicas, Serena. -gimió. -¡Oh, Dios!

-Harry. -reí. -No hagas ruidos raros, tus vecinos pensaran que estamos haciendo el amor.

-Haciendo el amor también eres una diosa. -siguió gimiendo.

Ya llevaba más o menos como media hora haciendole masaje en la espalda a Harry y no me aburria.

-¿Ya te sientes mejor, bebé? -Él soltó un gemido que parecía un "sí", me acerqué a su espalda y deposité un beso en ella. -No quiero que te estés estresado. -besé su cuello. -No es bueno para tu salud.

-El estrés es inevitable para todo ser humano. -respondió.

-Sabes que puedes contarme lo que quieras, ¿no? Soy tu novia y estoy para escucharte no para juzgarte.

-Lo sé, Serena. -se movió e hizo que yo bajara de su espalda y aterrizara en la cama. -No es que no te tenga confianza o que me vallas a juzgar pero creo que es algo que no vas a entender.

-Puedes explicarlo.

Harry sacudió sus rizos haciendo que quedaran peinados de una manera rebelde que hizo que me babeara la boca, dió un suspiro y después clavó ésos hermosos ojos esmeralda en mi.

-Creo que no soy lo suficientemente bueno en la cama para ti. -¿¡QUE!? ¿Por ésa cosa tan insignificante hizo un drama? ¡Matenlo!

-No pude evitar reírme a lo que Harry me miró confuso. -¿Ésa es tu gran preocupación que te hizo estar de malas conmigo?

-No es para que te rías. -se paró de la cama. -Es un tema muy serio para los hombres.

-¡Pero es una estupidez que te enojes por éso! -me paré igual que él y me puse en frente. -Y es un tema que ni siquiera deberías de pensar ya que tú no sufres de éso. -rodeé su cuello con mis brazos. -Eres muuuy bueno en la cama, bebé.

-¿En serio crees eso? -preguntó.

-Ahora que lo dices, no estoy tan segura. -me frunció el ceño. -Creo que necesito otra muestra mas para...

No pude terminar de decir cuando Harry ya me había tumbado sobre la cama fuertemente y él ya estaba en sima de mi peleando con mi blusa.

-Te daré todo...todo, nena. -dijo con voz grave que ¡oh! Me mata.

-Hazme lo que quieras, bebé. -sentí como los botones de mi blusa se desprendian de esta y caían en algun lugar de la habitación.

-Cristooo. -murmuró y después hundió su cabeza en mi cuello y después depositó besos humedos en el haciendome retorcer de placer.

Bajé mis manos hacia sus pantalones y logré sacarlos de él rápidamente, Harry se separó un poco de mi para sacar su camiseta y después jaló mi falda haciendo que se rompiera.

-No sabes como me excita que me romoas la ropa. -susurré en su oído.

-A mi me excita que te excite que te rompa la ropa.

Cuando ambos ya estabamos solo con una capa de sudor en nuestro cuerpo, enredados en unas sábanas blancas comenzamos lo que debimos haber estado haciendo más seguido.

-¡DIOS! Serena, me encantas. -ladró.

-Y tú a mi. -apenas podía hablar.

-Vamos hacerlo diferente esta vez. -fue bajando por mis pechos hasta mi vientre. -Voy a ser rudo contigo, quiero ver hasta donde estás dispuesta a soportar por mi placer.