- Es que no soy como las demás, Michael.
Abrió la boca de sorpresa.
- Recuerdas mi nombre, así que algo funcionó – sonrió victorioso y me sonrojé levemente.
- Sí, bueno… mi vecina es fan tuya y…
- Claro, claro, y ahora me dirás que llevas mi disco para regalárselo, ¿no? – no quitaba esa sonrisa burlona de su rostro.
Ese chico me estaba irritando. Miré el disco y después a él.
- Pues sí, ¿algún problema?
- No sabes mentir – me sorprendió – se te arruga el entrecejo cuando mientes – explicó.
Rodé los ojos e intenté pasar por delante de él para colarme, pero pasó su mano por mi cintura, parándome.
- Colarse es de mala educación, rubita.
Bufé y me coloqué en mi sitio. Me dio la espalda durante unos segundos pero después no pudo resistirlo y volvió a girarse, conectando sus ojos esmeraldas con los míos.
- No quiero perder el contacto contigo – dijo sincero.
Me aparté con horror.
- ¡Ves como eres un acosador!
Rió con más fuerza que antes.
- Por favor, toma – en un papelito apuntó su número de teléfono.
“Aw, tengo el número de un famoso”, pensé. Aparte, este chico creo que flirteaba conmigo.
- Gracias.
Me guiñó el ojo y su turno para pagar tocaba, así que se separó de mí y yo me fui a una cajera que estaba libre. Pagué lo correspondiente y cuando intenté salir, alguien tomó mi brazo.
- Espero que me llames – sonrió.
- Ya lo veré, depende de cómo tenga la agenda – contesté divertida encogiéndome de hombros.
- Nos vemos – se despidió.
Me quedé quieta sin poder asimilar lo que pasaba: ¿de verdad me había encontrado un famoso cantante y guitarrista dos veces en un mes, y en distintas partes del mundo? Si creyera en el destino, diría que esto lo había hecho él.
***
- So light them up, light them up, light them up, I’m a fire – cantaba animadamente a coro de Patrick Stump mientras cambiaba de sitio los muebles de mi habitación.
Cuando al fin terminé, me estiré en la cama rendida mirando el techo color crema – que pronto sería sustituido por un color que aún debía pensar –, relajándome. Mis ojos se iban cerrando, pero recordé la preciosidad que me encontré el día anterior. Me levanté apresuradamente hasta el recibidor y, allí la encontré. Ya le había cambiado las dos cuerdas rotas y le había quitado toda la mata de polvo que llevaba encima mi tesoro. Sonreí cuando la cogí y me la llevé hasta el comedor para después sentarme en el sofá rojo y acomodar la guitarra entre mis piernas. Intenté afinarla, pero eso nunca se me había dado bien, así que me descargué una aplicación con mi nuevo móvil y pude hacerlo con facilidad. Cerré los ojos tranquila y empecé a rasgar esas seis melodiosas cuerdas, recordando las notas de una de mis canciones favoritas, una de las que me enseñó mi padre. Yo solía tocar la guitarra eléctrica, pero la acústica era una de mis debilidades y cuando demostrabas si tenías talento o no. Dejé mis dedos volar por los trastes y canté con un hilo de voz.
"My ship went down
in a sea of sound
when I woke up alone
I had everything;
a handful of moments
I wished I could change
and a tongue like a nightmare
that cut like a blade
in a city of fools
I was careful and cool
but they tore me apart
like a hirricane
a handful of moments
I wished I could change
bue I was carried away...Give me therapy, I'm a walking travesty
but I'm smiling at everything
Therapy, you were never a friend to me
and you can keep all your miseryMy lungs gave out
as I faced the crowd
I think that keeping
this up could be dangerous
I'm flesh and bone
I'm a rolling stone
and the experts say I'm deliriousGive me therapy, I'm a walking travesty
but I'm smiling at everything
Therapy, you were never a friend to me
and you can keep all your miseryArrogant boy, love yourself so no one has to
they're better off without you
Arrogant boy, cause scene like you're supposed to
they'll fall asleep wihtout
you're lucky if your memory remainsGive me therapy, I'm a walking travesty
but I'm smiling at everything
Therapy, you were never a friend to me
and you can keep all your misery"Sólo me equivoqué en un par de notas, por lo demás, lo recordé a la perfección, algo que me alegró mucho; ¡mi memoria no me había fallado! Pero un nudo en la garganta apareció en mi garganta, mientras mis ojos empezaban a aguarse. No, no volvería a llorar, no por recuerdos lejanos otra vez.
Estaba hecho un ovillo en mi cama mientras ‘Therapy’ de All Time Low resonaba por toda mi cabeza a través de los auriculares. De mis ojos no cesaban las lágrimas rebeldes, recordando a mi padre, el que me enseñó a tocar esa canción, el mismo que hacía un año que no aparecía por casa. No quería llorar, estaba harta de hacerlo cada noche, con miles de sentimientos melancólicos a flor de piel. Quería arrebatarme todo, no tenía ganas de existir y, mucho menos, de no ver a mi progenitor nunca más. Mi madre estaba como yo, lloraba y lloraba en silencio cada noche y yo, para no oírla, escuchaba canciones tristes, las únicas que me ayudaban a vivir cada día. Sabía perfectamente que podía acabar con mi vida, pero era demasiado cobarde como para hacerlo y, a pesar de todo, tenía a Fletcher con el mismo problema que yo y no quería que siguiese mi ejemplo.
Me incorporé de nuevo y me puse de pie, dejando a un lado la guitarra. Respiré hondo para que las lágrimas no salieran como años atrás, quería estar bien de ahora en adelante, pero sabía que había algo que me impedía ser feliz…
Decidí echarme al fin en la cama, había sido un día completamente agotador, con muchas emociones, reencuentros y una nueva amistad.
Lo siento por el retraso, pero es bastante más largo :D Espero que os gusteee
YOU ARE READING
|Forgiven| Michael Clifford.
Fanfiction«Cada día, un día menos para mi libertad, para salir de esta mierda, para abandonarlo todo. Quiero volver a sonreír, sin que mi pasado y mi familia esté presente. Deseo volar, emprender el viaje. Necesito respirar de nuevo, no estar atada constantem...