El día que ibas a recoger tus cosas del trabajo, te dije que hablaras con tu jefe, te di una charla entera de como convencerle, tu me escuchabas atentamente, asintiendo. Con tu cigarro en la mano, en tus labios, en la terraza pensabas y yo realmente creía que estabas buscando las palabras adecuadas en tu cabeza para recuperar tu trabajo.

"Nat, amor no te preocupes lo vas a hacer genial" me acerqué a ti, estabas apoyada en la barandilla, fumando. Rodeé mi brazo por tu cintura, mi cabeza en tu pecho besándote ahí. Rodeabas mi cuello con la mano del cigarro y mientras le dabas caladas. Ese día estabas demasiado pensativa.

Pensé que te estaba ayudando, pero después me di cuenta que le estaba hablando a la pared. Lo único que hiciste fue liarla, lo que se te daba tan bien últimamente.

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"Eres un hijo de puta, sabes que vivo de esto y me lo quitas. Que sepas que no vas a encontrar a otra mejor que yo. Observa como tu mierda de negocio se viene abajo"

Te lo juro Alba que lo iba a hacer, le iba a pedir perdón a ese hijo de puta. Pero cuando le vi la cara dije: ni de coña.

Iba de camino a ti con la capucha puesta y mirando al suelo, andando a un ritmo ligero. Subí las escaleras de dos en dos y te dije la verdad. La otra semana me prometí a mi misma ser sincera contigo, de verdad quiero que me tomes enserio y pensé que lo que más deseabas de mi era la honestidad. Y te la di.

Tu llorabas, tus codos apoyados en tu rodilla, tus manos en tu cara. Tu en el sofá y yo arrodillada en frente de ti. Me preocupaba, no sabía como consolar tu dolor causado por mi. Me sentía como la puta mierda cuando llorabas por las estupideces que yo cometía. Sabía que estarías mejor sin mi, pero siempre he sido egoísta, te necesitaba, te quería tanto que ya era enfermo.

"No te pongas así amor, es solo un trabajo. Ya encontrare otro o yo que se que haré, pero te juro que encontraré la forma" dije mientras secaba tus lagrimas y tu te dejabas. Tu cara estaba roja y respirabas irregular.

Acerqué mis labios a los tuyos, ya era costumbre después de estos meses. Pero cada vez el pulso me subía, cada vez. Tu casi no me correspondiste, solo dejaste que yo te besara. Me pregunté si era porque estabas demasiado decepcionada o si solo querías sentir mis ganas. Acaricie los tuyos con los míos, a veces la delicadeza ganaba.

Te separaste un centímetro hablando en mis labios. "¿Cómo no me voy a poner así Natalia? Te has despedido tu misma, tu tienes la culpa." Pusiste tu mano en mi mandíbula, con cierta brusquedad, sentí la presión. Yo nunca te consideré violenta.

"Ahora como coño vamos a llegar a fin de mes con mi sueldo de mierda" Con el mismo aguante acercaste mi cara rozando mis labios con los tuyos. "Dime" dijiste más alto. No me importaba que me echases las cosas en cara, tu siempre me culpabas y tu siempre la perfecta. Estaba acostumbrada a eso, en eso se basaba mi vida, en la gente señalando mis errores.

"No empieces" susurré.

"Entonces que quieres ¿Que te aplauda?" Dijiste elevando tus cejas. "Muy bien cariño, lo haces todo genial, de premio me puedes follar. No pasa nada de amor también se puede vivir" dijiste tan cínica y sarcástica. Ahora con tu mano acariciando mi mejilla. Era todo tan falso, me daba asco cuando te ponías así.

"Venga ahora bésame, haz como si todo fuera perfecto" seguías y seguías. Y yo quería estampar algo contra la pared.

"Cállate de una puta vez" Dije con asco. Quite con fuerza tu mano de mi cara y me levanté. Empecé a dar vueltas, no en círculos, pero si de un lado a otro. Y sin pensarlo le di un golpe a la pared. Otra fractura, pero ya estaba acostumbrada, el dolor no me sorprendía.

Intentabas hacerte la dura, pero tu cara expresaba algo distinto. Tus ojos encharcados, te mordías el labio por dentro para contener tus lagrimas.

"Cariño no empieces, si. Solo relájate, ven conmigo" No querías que me hiciera daño. Parecía que te dolía a ti más que a mi.

Y me di cuenta del dolor que te causaba, como otra vez estaba siendo una gilipollas real.

Fui encima tuya. Me senté con una pierna en cada lado de tu cuerpo, apoyaste tu frente en la mía. Mientras acariciabas mi mano herida. La besaste un tiempo y yo te miraba tan enamorada, lo sentía por el dolor que se me hace en el pecho, y lo difícil que es tragar saliva cuando te miraba a los ojos.

"Perdón mi amor. Es que no puedo más, me supera todo y yo te necesito, tengo miedo a que un día no estés. Eres todo lo que tengo. No te quiero ver llorar. Me rompes cuando lo haces" Te dije en un hilo de voz. Susurrándote en los labios.

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Y con tus 'te quiero' 'eres mi vida' me dejé llevar, una vez más. Acabamos en la habitación. Me lo hacías con tanto dolor acumulado, tus gemidos eran más frecuentes y tu piel no perdía el contacto de la mía. A veces notaba el sabor salado de tus lagrimas en tus labios y tu creías que no lo iba a saber teniendo los ojos cerrados. Saboree tu dolor, con mi lengua te lamí despacio, capturando tus labios en los míos, mientras me pedías perdón y me rogabas que no te dejara. Mis dedos dentro de ti mientras tu me susurrabas "no me dejes" era todo tan irónico. Te estaba haciendo el amor y tu seguías con tus miedos.

Te sostuve el rostro para que tus ojos no se desviaran, te lo hice con más rapidez, tu boca entreabierta dejó camino para que mi lengua te llenara, la capturaste con ansias.

"No me voy a ir a ninguna parte. Te quiero" recalqué.

Pero realmente si me fui, lo siento mi amor. Por una vez en mi vida fui egoísta.


Este flashback es solo la primera parte que explica de donde viene todo. De porque ya no están juntas.

Para dejarlo claro y que no hayan dudas: son 4 meses. Agosto, Septiembre y Principios de Octubre es el pasado (flashbacks). El resto de Octubre están separadas. Noviembre es el presente.

Seguro que lo pillais, pero yo por si acaso.

Albalia | Lost When You're Not AroundTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang