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-Impresionante.

Miraba fascinado los avances que llevaba su experimento, con el pasar de los meses se iba desarrollando el pequeño ser, se veía ya como un humano, mas que eso, muy pronto en algunos meses mas estaría con ellos. Termino sus anotaciones tomando así otra fotografía, lo pego en aquel álbum donde llevaba todos sus registros.

-Cheol, no se te olvide que hoy tienes que almorzar con el jefe- Mingyu apareció atrás de su compañero, miro las anotaciones viendo la emoción que su compañero tenia en esos ojos marrones, levanto la mirada notando asi el pequeño ser ya mas desarrollado.

-Si... El almuerzo, no se me olvido- SeungCheol estaba tan centrado en su proyecto que no prestaba tanta atención en las palabras que su compañero le decia.

-Es dentro de unos minutos.

-Si lo s...- ¡Diablos! ¡¿Es ahora?!

Mingyu al ver a su amigo guardar sus cosas algo alterado le ayudo a terminar de ordenar para que se fuera pronto, a veces le sorprendía como este podía ser algo olvidadizo con las cosas.

-Rápido antes de que el jefe se enoje sabes que no le gusta la impuntualidad- le entrego las carpetas que debia llevar antes de que este las olvidara como la ultima vez.

-Gracias, no sé qué haría sin ti.

Sonrió quitándose la bata de laboratorio, tomo las carpetas junto con su chaqueta y salió del laboratorio no sin antes decirle a su compañero que siguiera registrando avances de la pequeña cosa que tenía ahí. Comenzó a caminar por aquellos pasillos desolados, no había casi gente pues era la hora que todos iban a almorzar, paso por el área de las maquinarias que se veían a través de aquellos ventanales, por un momento se quedo observando la fabricación de las muñecas. Pero su reflejo se vio en aquel ventanal, atrás suyo había una persona pero, no podía verle bien el rostro, solo veía esos ojos tan brillantes como los de una muñeca de porcelana.

"Tu me hiciste esto Demonio, me vendiste con el ¿Con que te vendiste SeungCheol? Me condenaste"

Negó con la cabeza, otra vez esa voz estaba inundando su cabeza pero, se sentía tan real, podía incluso sentir su respiración en su nuca cuando esa persona se acerco cada vez mas a el.

Lo hice por amor.

"Tu amor me condeno, ahora vivirás con el remordimiento, SeungCheol regrésame mi libertad"

Su respiración estaba siendo casi nula, atrás de el estaba su tormento, quien poco a poco le llenaba la cabeza de recuerdos, le susurra las cosas que ha hecho y el solo responde que fue por amor. No hay nadie que lo ayude, esta solo en ese lugar y lo sabe, es ahi cuando esa voz decide atormentarlo aun cuando esta del todo bien. Se termino por apoyar sobre la pared de cristal, sus manos tiemblan, las imágenes se distorsionan, el se encuentra ahi, en su sótano, las paredes manchadas de sangre, esos gritos.

"¡Detente!¡Detente por favor, me lastimas!"

"¡Demonio!¡¿Que me has hecho?!"

Basta.

¡Basta! ¡¡Basta ahora!!

-¿SeungCheol? ¿Que estas haciendo en el suelo..?

Jihoon estaba ahi, mirándolo con duda, encontró a uno de sus mejores empleados tirado en el suelo en posición fetal, susurrando cosas que ni el mismo podía comprender. Se coloco de cuclillas para poder mirarlo mejor y notar que en los ojos de ese hombre se encontraba el terror. SeungCheol poco a poco fue recobrando la cordura, todo a su alrededor volvía a la normalidad, el se levanto de donde se encontraba. Limpio sus ropas al igual que recogió los papeles que llegaba consigo.

-Yo...

-Creí que ya estabas con los inversionistas, ¿Que hacías tirado en el suelo?

-Ah, yo... Yo estaba comprobando si el suelo estaba solido porque ya sabe, con tantos temblores uno nunca sabe si esta pisando bien o no.

Fue la excusa mas estupida que se le pudo haber ocurrido pero, nadie sabia, ni siquiera su jefe de lo que pasaba por la mente de SeungCheol, al ver como su jefe comenzaba a reírse de la situación se sintió nervioso.

-Si y eso de los "temblores" no es por otra cosa ¿Verdad Choi?

-Ah-h, si...

-Te lo dejaré pasar Choi solo por esta vez, en fin, vamos no debemos hacer esperar tanto a los inversionistas.

Seungcheol asintió con la cabeza así que subió a el auto de su jefe, el camino estuvo muy silencioso pues si bien, el pelinegro a veces solía temerle mucho a su jefe, este lo intimidada demasiado aunque también se mantenía un poco alejado del más bajo, por qué había escuchado algunos rumores en la empresa de que era el favorito de Lee, siempre le daba lo que quería y todo eso, otros rumoraban de que SeungCheol le había dado una buena mamada a Jihoon para estar en un puesto tan grande, pobres ingenuos si supieran en realidad de que el trabajo día y noche trabajando sacando todos sus trabajos con sudor para que pensaran así de el. Pero ninguna de esa gente que habla sabe tambien como entro con un sacrificio a ese gran puesto.
Cuando llegaron a el restaurante bajaron del auto y se adentraron al lugar.

La conversación con los inversionistas había sido todo un éxito y más cuando estos habían aceptado apoyar su proyecto, estaba demasiado feliz tanto así que quería ir a su hogar y gritar como loco, camino un poco cuando sintió su hombro ser tocado lo cual volteó dándose cuenta de que era su jefe así que se puso algo nervioso ante la presencia de este.

-SeungCheol, me agradó la verdad que los inversionistas apoyarán tu proyecto, así que vamos a celebrar, yo invito.

-Jefe yo quisiera pero, tengo muchas cosas que hacer.

Lo que menos deseaba era pasar mas tiempo con su jefe, conocía las intenciones de el y lo que era capaz de hacer. Estaba cansado, su mente solo deseaba la paz y estar a lado de Jihoon no se la daba. La terquedad de su jefe salio a relucir cuando el dijo lo siguiente:

-No me digas que no, además no debes rechazar las ofertas de tu jefe - lo sermoneo observando esa mirada que tanto le gustaba, ese brillo tan asustadizo de Choi era lo que mas le fascinaba-. Sabes dentro de una semana vendrá un músico a tocar a la ciudad estaba pensando que podrías acompañarme, sera divertido.

-Yo...

Jihoon se acerco cada vez mas a el al punto que sus anatomías estaban demasiado cerca, el aroma de la colonia de su jefe la reconoció al instante lo que ocasiono el miedo en sus ojos que el solo sonrió por cortesía. Su jefe no desaprovecho el momento y tomo sus manos para sentirlo mas y le susurro.

-Te dejaré pensarlo Choi, espero que no sea un "no" como respuesta de lo contrario te irá mal.

Con esas palabras ambos se separaron, su jefe mando a pedir a su auto con los mozos y estos enseguida se lo trajeron, al verlo irse suspiro pesado pues bien a veces sabía que su jefe lo obligaba a ciertas cosas que el realmente odiaba.

Esa noche Choi SeungCheol tomo tantas pastillas que fuesen necesarias para poder dormir. No pudo dormir, las pastillas ya no estaban haciendo efecto en el, la noche se volvio pesada y esa voz se presentaba mas en sus sueños. El problema con su jefe tambien lo estaban consumiendo, ese acoso tan extremo que tenia con el lo estaba volviendo loco y debia de encontrar una solución.

Definitivamente debía buscar una solución ante tal problema que ni siquiera las matemáticas y reacciones químicas podrían salvarlo.


Sálvame.

 𝐸𝑥𝑝𝑒𝑟𝑖𝑚𝑒𝑛𝑡. Место, где живут истории. Откройте их для себя