{Narra ________}
Mangel nos miró con su típica sonrisa cínica, lo que hizo que una corriente recorriera mi cuerpo y sacara la pistola. Rubén, Mangel y Angela hicieron cómo yo.
—Hombre, Rubén, cuánto tiempo. Veo que ______ y tú son novios, me duele saber que mi ''amigo'' sale con mi enemiga—dijo en tono descarado. —¿Sabes que en mi cuerpo no habrá ningún remordimiento por mataros a los tres verdad?
—Mangel, tú sabes que esto no esta bien—Rubén estaba asustado, lo notaba por su frágil voz.
—Soy capaz de todo Rubén, matar o morir. Y por lo que veo tu también me traicionaste—Mangel empezó a acercarse a pasos lentos y con ojos repletos de odio y maldad. —Me dolió en cierta parte que mi amigo me abandonara por una zorra cómo ____—me señaló— es una lástima que tenga que matarte, ¿no crees?
Mangel era capaz de todo, pero algo que nunca hubiera pensado que pasaría sucedió.
Rubén disparó a Mangel.
Trás un ''pum'', Mangel cayó adolorido con un disparo en el hombro, la bala le había rozado, sólo le irritó y dañó la piel, pero la bala bo llego a atravesarle.
—Corre _______—me ordenó Rubén.
—No sin tí.
—¡Qué corras!—gritó soltando alguna lágrima.—Cuándo Mangel se levante iré contigo al coche, no hay tiempo para despedidas, corre.
Derramando lágrimas salí corriendo con Angela y… ¿Isa? , detrás de mi.
Llegamos al coche y sólo nos quedaba esperar a que Ust viniera…
{Narra Rubén}
Mi amigo estaba en el suelo, retorciendose. Todo por mi culpa.
Mi maldita culpa.
Solté mis maletas y ante la mirada de la gente. Que en esos momentos corrían cómo locos. Me acerqué a mi amigo, me senté a su lado y vi la herida que tenía sobre en hombro, la bala no le tocó, pero sangre salía de la herida. Apoyé la cabeza en su pecho y lágrimas traviesas corrieron por mis mejillas.
—Lo siento Mangel… no quería hacerte daño—mi voz era entrecortada. Pero la voz de Mangel me sacó de mis pensamientos.
—Yo no siento lo que voy a hacer—Mangel sacó su pistola y me disparó en el abdomen.— Nunca me importaste, y ahora tú no serás la ecepción por que seas mi mejor amigo. Debiste quedarté en casa jugando a Outlas.
Mangel se levantó y salió corriendo.
El aire me faltaba, me dolía a horrores y no me atrevía ver la herida. Me levanté con una fuerza de voluntad enorme y corrí lo más rápido que pude al coche, me metí y Lara Croft me miró preocupada y las lágrimas caían cómo si de una cascada se suponiera.
—Te… te disparó.
—¡Al hospital! —dijo Angela.
Mientras _______ me cogía de la mano y me susurraba que no me murierá, me dormí.
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Todo era blanco, mi cabeza dolía a horrores y mi abdomen, ni lo sentía.
Abrí mis ojos lentamente y estaba en una habitación de… ¿hospital?, sí, de hospital. La sala era sencilla, la camilla recubierta por sabanas blancas, un sillón negro al lado izquierdo, un perchero, una mesilla con revistas y una tele en la pared.
Pero había algo que la hacía especial.
Mi chica estaba tumbada en el sofa, dormida. Su cara tenía lágrimas secas y al abrir sus ojos, pude notar que estaban rojos. Al verme, se levantó del sillón y vino corriendo a mi. Yo pensaba que me iba a besar, pero mr dió una cachetada.
—¡¿Cómo me haces eso?! ¡No debí abandonarte! ¡¿Tú sabes lo mal que lo he pasado?!— empezó a llorar—Pensé que morirías— se subió a la cama y me abrazó ante mi cara de sorpresa—Te amo.
—Eres la muyaya más bipolar que he visto en mi vida—Lara Croft rió en mi espalda y me miró a los ojos—Erea una delicia de persona, yo también te amo.
—Yo más—me dió un beso y se sentó cómo un indio delante mio y repetí la acción.—¿Te encuentras mejor?
—Ñah, no me quejo—dije sin importancia. —Sólo espero no quedarme estéril—le miré pícaro—ya tú sabeh— Me miró sorprendida y me dio un suave golpe en el hombro, sus mejillas estaban sonrosadas y se veía muy tierna así.
—Idiota… mi idiota—dicho esto me besó.
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{Narra el narrador}
Mangel entró en la gran sala de su despacho, su hombro ya había curado y la rabía que tenía por su amigo y enemiga eran inigualables. ¿Cómo ha podido su mejor amigo traicionarle de esa forma? ¿a caso todos sus amigos le traicionarian?
Pegó un grito y le dio un golpe a la pared, haciendose daño en su pierna, pero le daba igual. Su mejor amigo había preferido a su enemiga que a él.
Y se aseguraría de que ''Lara Croft'' muriera, aunque perdiera la vida en ello.
Alguien llamó a la puerta y Mangel se sentó en la silla giratoria de cuero negro perteneciente a su viejo escritorio.
—Entre—espetó.
Un hombre entró por la puerta de hierro. Era alto y su tez era morena, sus ojos marrones eran parecidos a los de Mangel pero su pelo corto con unos cuantos rizos lo separaba cómo hermanos.
—Cheeto, pasa primo. Necesito que me hagas un favor—una sonrisa torcida apareció en su maligna cara.
—Que necesitas primo del alma—dijo con un marcado acento sevillano.
—Necesito que mates a _______.
—¿Y qué harás con Rubén?
—A ese lo mataré yo—él y su primo sonrieron cínicamente.
¿Será este el final de nuestros héroes?
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Huooooola piojos que tal como estais yo bien me alegroooo.
Sé que hoy toca del otro libro, pero hoy me vino la inspiración. Pero subiré del otro, don't worry babies (?.
Un abrazo \( ;-; )/ un beso :-* vomenten y chao chao :D
