Solo amigos *Editando*

Casate conmigo

-¿Estas bien? - pregunto Felipe preocupado. Los demás conversaban animadamente entre ellos

-Si, no te preocupes - sonreí - voy al baño y vuelvo - me levante y camine hasta el baño. Me moje un poco el rostro y salí. - Felipe yo... - me paralice por completo al ver la escena.

Felipe estaba arrodillado con un ramo de rosas rojas en la mano. Todos los que estaban comiendo quedaron mirando la escena

-Kassandra - sonrió - ¿Te casarías conmigo? - de su bolsillo izquierdo saco una pequeña caja rosada, que tenia un hermoso anillo de plata con una rosa sobre el.

Mi corazón no reaccionaba, ¿Esto era en serio?                             

-Felipe yo... - una lagrima corrió por mi mejilla. Se levanto del suelo, quedando frente a frente - Te amo - me lance a el y le di un beso. Toda la gente comenzó a aplaudir

-Gracias - me levanto y me dio unas cuantas vueltas en el aire - ¡TE AMOOOOOO! - grito.

Lagrimas de felicidad inundaban mis mejillas, no podía creer lo que estaba sucediendo.

Felipe me bajo y me puso el anillo

-Te amo - susurro

-Ahora te daré la noticia - sonreí. Aun tenia mis manos en su cuello, y el sus manos en mi cintura

-Dímela - sonrió como un niño con la idea de tener un juguete nuevo

-Estoy embarazada - sonreí. Si su rostro tenia formada una sonrisa, esta se formo en una sonrisota

-Dios, dime que no es una broma

-No lo es

-¡VOY A SER PAPÁ! - Grito mas que fuerte. Toda la gente que ya estaba comiendo nuevamente, lo quedaron mirando y volvieron aplaudir, pero esta vez gritando felicitaciones, que sean muy felices juntos y cosas por el estilo.

Creo que estaban mas felices ellos que yo y Felipe.

Reí por mi estupido comentario

-¿En serio? - pregunto George con una sonrisa de oreja a oreja

-Dios, hija - me abrazo mi madre

-Mi amor - dijo Felipe más calmado - me haces el hombre mas feliz de la tierra

-Y tu la chica mas afortunada del mundo -sonreí- te amo, Felipe -lo mire directamente a los ojos

-Y yo a ti, mi pequeña. Y a ti, mi hermoso bebito -hablo como un niño pequeño

-¿Bebito? -Reí- será bebita mi amor

-Que sea lo que Dios quiera -beso mi nariz

El resto de la cena paso entre bromas de parte de George y coqueteos a la chica que nos atendió. Mi madre no dejaba de felicitarme, aunque se sintió "vieja". Los padres de Felipe estaban muy emocionados porque nunca pensaron que su hijo, "el mujeriego", seria padre y se casaría.

Felipe me hablo de nuestra boda, seria en casa de sus padres ya que es más grande que el departamento y la casa de mi madre. Estaba de acuerdo, no tenia inconveniente con eso.

Mi madre me dijo que ella me regalaría el vestido, pero George le dijo que no, que como el era mi primo tenia el deber de regalármelo. Felipe no estaba de acuerdo con eso porque el mismo me lo quería comprar.

-Ya basta -reí- ninguno de ustedes me comprara el vestido

-¿Qué? ¿Por qué? -pregunto mi madre extrañada