CAPITULO 15

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He de decir que el salir por Roma no es tan distinto de salir por España. Al menos eso me ha parecido hasta ahora. Quizá la razón de esto sea que la finalidad de salir es siempre la misma: conocer gente y ligar, pero sobre todo pasárselo en grande y en eso se podría decir que todos nosotros somos especialistas.

A mi alrededor todo lo que veo son personas que aparecen entre la oscuridad gracias a la luz de los focos que, cambiando de color y posición, van iluminando el local al que Gio nos ha traído. Lo que escucho es la música a todo volumen incitándome a mover mi cuerpo y en su ayuda acuden las manos de Cart que se posan sobre mi cintura y me obligan a moverla. Al rato dejo de notar la mezcla de olores para abrir paso a la colonia que Cart se pone y que me encanta. Y, poco después, mis papilas gustativas prueban el sabor de la sal, del tequila y del limón hasta que esa substancia alcohólica llega a mi garganta donde noto la sensación de que me quema y del calor que se apodera de mi cuerpo.

Como no podía ser de otro modo lo estoy pasando realmente bien. Estoy bailando con todo el mundo, recibiendo halagos de muchos y viendo como todos tienen una gran sonrisa en sus rostros. En algún momento de la noche me fijo en que un grupo de gente se acerca a Gio y este los abraza, poco después nos está presentando a esa gente de la que yo por mi mala memoria, las copas de más y la música alta no recuerdo sus nombres. Por esta razón intento no hablar, bueno gritar, mucho con ellos para no meter la pata. Y todo estaba yendo realmente bien hasta que al chico que está frente a mí se le ocurrió acercarse. Tengo que admitir que es muuuy guapo. Imaginaos: Un chico de 1’85 de altura y con un gran cuerpo. Su pelo castaño revuelto y sus ojos entre marrones y verdes. Y todo eso sin contar sus maravillosos hoyuelos.

La verdad no sé qué decirle cuando se acerca. Menos mal que a buen entendedor pocas palabras bastan y se volvió a presentar.

- Aria ¿no? –Preguntó y yo asentí con la cabeza- Yo soy Luca, te lo digo por si no te acuerdas o algo porque a mi suele pasarme.

- Encantada Luca –le respondo intentando disimular que eso es exactamente lo que me había pasado.

- ¿Bailas? –me pregunta colocando su mano en mi espalda indicándome el camino. Camino delante de él hasta que siento como su brazo me rodea y me hace girarme hasta quedar de frente a escasos centímetros.

Él empieza a moverse al son de la música y me hace seguirle. Estamos así un buen rato pero todo lo bueno se acaba, unas veces para dar paso a algo mejor y otras a algo peor. Esta vez para mi suerte la situación mejoró. Luca me preguntó si me apetecía salir a hablar y yo acepté encantada su invitación.

- Ahora que estamos fuera te tengo que preguntar una cosa –exclamó en cuanto pude oírlo bien.- Entre tu y ese chico no hay nada, ¿no?

- ¡Qué manía! –respondo ya un poco exasperada- Ese chico como tú lo acabas de llamar es mi mejor amigo desde que tengo memoria.

- No te enfades preciosa. Eso yo no lo podía saber y no quería meterme en medio de una relación –Me había pasado con el pobre chico, que como todo el mundo me preguntaba lo mismo.

- Lo siento Luca –le digo derrotada- No quería hablarte así, es solo que si no me hacen esa pregunta una vez al día no es un día normal.

- Ey, tranquila –susurra mientras acaricia mi mejilla.- Por mi parte me encargaré de que nadie más te lo vuelva a preguntar.

- Y ¿cómo vas a hacer eso? –Esto se pone interesante. Si me da la solución para que me dejen de preguntar eso será mejor que si me diera la formula de la juventud eterna.

- ¿Y si fueras de otro chico de la mano? –me propone acercándose poco a poco a mi- ¿Y si fuera a otro chico al que besaras?

- ¿Qué me estás proponiendo? –le pregunto ya excitada por culpa de sus labios que rozan los míos sin dar el paso y jugando con mi autocontrol.

- Lo que te propongo, -dice siguiendo con el juego para ver quién de los dos aguanta más - es que mañana me des la oportunidad de conocerte mejor.

- Mhhh, no sé yo. Siempre me han dicho que no quede con desconocidos –si él quiere jugar jugamos, pero con mis reglas- Convénceme de que eres de fiar. Quiero ver tus argumentos para que yo acepte esa cita. –Mierda. La palabra maldita. Mi bocota siempre armando de las suyas. Luca tan solo se ríe y sin separarse lleva sus labios a mi oreja para susurrar: “No hace falta que te convenza porque de todos modos mañana cuando Gio os acompañe a algún lugar me verás y así todos los días mientras estés aquí.”

- Bueno, eso no será un problema.

- Dejando eso un momento Aria. –Luca deja el tonteo y se pone serio- ¿Mientras estábamos bailando no sentiste como si alguien nos observara?

- Estábamos rodeados de gente. Pues claro que había personas observándonos –No lo quiero admitir en voz alta pero sí: yo también sentí como alguien nos observaba, como nos quería separar tan solo con la mirada. Lo mismo que había sentido en la discoteca con Iván. Pero eso no era importante en este momento. Ahora lo que quiero es disfrutar de este chico que me puede hacer olvidar a Iván y el error que cometí con JP.

COMO SOY UN AMOR HE DECIDIDO ESCRIBIR OTRO CAPITULO Y SUBIRLO, QUE QUEREIS... ESTABA INSPIRADA.

NUEVO PERSONAJE EN LA NOVELA... A VER CÓMO TERMINA ESTO!

DANAIDE 🖊(Terminada)Where stories live. Discover now