Capítulo 25

13.3K 957 324
                                    

Jade's POV

Odio admitirlo, pero todo era mucho más fácil cuando Tori estaba conmigo. Estoy comenzando a temer convertirme en una de esas novias locas y excesivamente cursis que sólo quieren estar cerca de sus parejas y no pueden soportar verlas un centímetro cerca de alguien.

Esperen...

¡Diablos!

Necesito relajarme un poco antes de que quiera proponerle matrimonio.

- Iuuu - Escuché la desagradable voz de Trina - ¿Qué haces abrazando a mi hermana? -

Resulta que Tori se había quedado dormida en mi hombro y todo era perfecto hasta que la chica ronquidos de oso despertó.

- ¿Qué te importa? - Respondí a la defensiva al mismo tiempo que, disimuladamente, apartaba un poco mi brazo que se encontraba alrededor del torso de la chica.

- Vega...- La moví un poco para que despertara. Estaba pegada a mí como sanguijuela. - Despierta bruta - La moví un poco más.

Ahora resulta que si se parecía a Trina; Estas chicas no dormían, hibernaban.

- ¿Como haces para despertar a una de tu especie? - Pregunte con desagrado a la hermana mayor.

- Una vez mi hermano me lanzó un cubo de agua con hielo - Dijo Cat.

Esa sería una gran idea, si quisiera matarla de un susto o una pulmonía.

Aunque mi antigua Jade habría estado complacida con la idea.

- ¿Ya llegamos? - Escuche la voz de mi novia que no hacía esfuerzo alguno por incorporarse.

- Casi - Dijo André

- ¿Te quitas de encima? - demandé con desagrado.

No me molestaba en absoluto, pero teníamos varias miradas puestas sobre nosotras.

- Lo siento - Se incorporó en el sofá.

- Si yo fuera tú, lo primero que haría al llegar sería bañarme - Habló Trina.

- Y si yo fuera Beck, lo primero que haría al llegar sería quemar esa cama - Respondí señalando el lugar donde aún se encontraba desparramada.

- De recordar que dormías aquí... Si yo también lo haría - dijo con asco.

- Al menos yo dormía con alguien - Me crucé de brazos.

- ¿¡Se quieren callar!? - Interrumpió Tori. Ambas la miramos.

- Ella empezó - Dijimos al mismo tiempo.

Noté que Tori me dio una mirada profunda y luego se cruzó de brazos mirando para otro lado.

¿Estaba molesta de verdad?

¿Que dije?

¿¡Por qué se enoja conmigo si Trina también estaba atacándome!?

A no... Pero tenía que conseguir a la menor de las Vega como novia.

Luego de unos veinte minutos en un silencio un poco incómodo, el vehículo comenzó a detenerse hasta que mi amiga rubia apareció por la puerta.

- Pasajeros con destino a la mansión Vega, favor de tomar su equipaje - Dijo Valery.

- Creo que somos nosotros - Nos susurró Cat.

- ¿Mansión? - Pregunté.

- Ya lo verás... - Dijo Tori alzando una ceja antes de dirigirse a la salida.

La cita - JoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora