Capítulo 38

2 0 0
                                    

Narra Walter
—Venga mamá,que quiero ir a esa zona de ahí,seguro que hay algo que pueda gustarle.—Meto prisa a mi madre mientras señalo la zona del centro comercial donde hay una tienda de deportes.
Me he puesto pesado para venir,ya que quiero encontrar un regalo fantástico para Kurt.
Riley esta mirando una tienda de juguetes,por eso mi madre no avanza.Es una lástima que papá haya decidido quedarse en casa,aunque hoy llueve,yo he querido salir.
Por andar distraído,choco con alguien,que cae al suelo.
—Lo siento,iba distraído.
Miro a quien he tirado y me sorprende lo que veo,Alice me da una mirada curiosa y luego se ríe.
—Me parece raro ver a un chico en el centro comercial,¿qué haces aquí?
—Yo...bueno,es que,yo venía a buscar un regalo para Kurt,prontp es su cumpleaños y bueno,quería regalarle algo especial.—Siento mis mejillas arder,hasta que Alice hace una mueca de ternura.
—Cuanto lo quieres eh.
Asiento todavía avergonzado.
—¿Como van las cosas entre los dos,ya hay algún te amo o qué? ¡Vamos cuentame!
Mi cabeza recuerda el día de ayer con claridad,un tono rojo inunda mi cara y la vergüenza se hace presente.
Me acerco a ella y a su oído.
—Me ha tocado.
Ella se queda quieta,literalmente,esta rígida.Me hace reír,luego empieza a saltar emocionada.
—Oh dios mío,Walter eso es increíble.
—Ya...
—¿Qué ocurre?
—Es que todavía no me ha pedido nada y me da miedo que no lo haga,no quiero que me utilice.
—Ah bueno...ten paciencia hombre,puede que te esté preparando algo increíble para pedirte que seáis novios.
—Puede ser.
Mi madre llega,acompañada de Riley y una muñeca.
—Al final le he comprado una muñeca,por cierto tenemos algo que enseñarte.—Mira a Alice extrañada.—Hola.
—Hola,soy Alice,una amiga de Walter.
—Genial,si quieres puedes venir un rato con nosotros.
Mi amiga niega con la cabeza.
—He venido con una amiga,pero había ido al baño cuando me he encontrado a Walter.
—Bueno esta bien,entonces nos vamos,hasta luego Alice.
—Chao Alice.
Nos alejamos de ella y mi hermana tira de mi brazo emocionada,aunque me molesta que me están alejando de mi destino,que es la tienda deportiva.
Riley deja de arrastrarme,por ello levanto la vista,una tienda de animales se posa frente a mi.
—Vaya,una tienda de animales.
—Si,pensamos que podría gustarte.
—Si me gusta,pero...—me callo al notar la mirada de un tierno conejo en mi.—Aún hay tiempo.
Seguidamente entro al local,veo un montón de animales,qye sinceramente no sé porque los admiten en el centro comercial,si normalmente están prohibidos.
Me aproximo a los perritos,todos son adorables,me hacen sentir muy alegre.
—Walter,¿te apetece un conpalero para Max?—Cuestiona mamá,la miro sorprendido.
—¿Enserio?¿Podemos tener un perro más?—Pregunto emocionado.
—Ya sabes que Max esta mayor,así que quizá un amigo lo alegre un poco.
—¡Mira Walter,ese es súper bonito!—Grita Riley señalando a un cachorro de Pit Bull,que nos observa con una cara muy tierna,es de color gris y blanco.
Me acerco a la cajuela donde está encerrado y le acerco la mano,este sin pensarlo se pone a chuparla con ganas.
—Mamá este es muy tierno...Pero ¿tú crees que un perro adoptado pegará con uno de tienda?
—Seguro que si,vamos Walter,si quieres cogerlo,puedes.Seguro que Max estará muy contento de ver a otro perro con él.
—Bueno está bien,entomces nos llevamos a este.Riley,¿te apetece ponerle nombre?
Riley asiente súper alegre y empieza pensar.
Compramos el perro y cosas para que pueda estar en casa,luego salimos de la tienda,yo con el perrito en brazos,ya que todavía es muy pequeño como para ir en el suelo.
Vamos hasta la tienda que yo quería ir y mamá me da dinero para comprar el regalo mientras sujeta al cachorro.
Empiezo a buscar,pero no se me ocurre nada.
—¿Chaval necesitas ayuda?—Me pregunta un chico de la tienda.
—Estoy buscando un regalo de cumpleaños para un amigo.
—¿Qué deporte le gusta?
—Basquet.
El chico me guía hasta un zona con balones de baloncesto,uniformes de equipos grandes y otras cosas.
—Gracias,creo que ya sé que coger.—Digo estirandome para alcanzar un uniforme de su equipo favorito.
—Buena elección amigo.
Le doy una sonrisa al chico mientras nos acercamos al mostrador.Dejo el uniforme sobre este y el chico pasa el código por la máquina,para marcar el precio.
Una vez pago y me envuelve el uniforme,me dispongo a salir de la tienda, entonces me llama.
—Oye chaval,toma el recibo.
Me doy la vuelta y cojo el recibo.
—Miralo.—Dice guiñandome un ojo.
Salgo de la tienda y abro el recibo doblado.Ha puesto su nombre y su teléfono,me guardo el recibo en el pantalón y cojo al cachorro de los brazos de Riley,mientra le doy la bolsa a mi madre,la pobre esta infestada de bolsas con cosas para perro,la muñeca de mi hermana y ahora el uniforme.
—¡Se llama Nico!—Exclama Riley cuando lo cojo.
—Bonito nombre le has puesto.—Le digo.
Salimos del centro comercial rápido,para llegar al coche y evitar que nos mojemos,yo llevo a Nico tapado con mi chaqueta,para que no se moje.
Somos tontos y olvidamos los paraguas en el coche.
Entramos en este y ponemos la calefacción.
Hago salir al perro de mi chaqueta mojada,este se tumba en mi regazo,yo lo acaricio.
Mamá arranca y vamos hasta casa.
—Por cierto,¿papá tiene idea del nuevo miebro de la familia?
—No,es una sorpresa.—Nos echamos todos a reír por saber como lo tomará.
La primera vez que Max piso la casa,al llegar de la perrera,apenas era un cachorrito de un mes.El perrito fue hasta la cocina y allí mi padre estaba haciendose un café,cuando lo vio se puso a gritar,primero del susto,luego de la emoción y finalmente ya estaba en sus brazos.
Abrimos la puerta de casa,yo dejo al perro en el suelo para que pueda explorar,según ha dicho la de la tienda,tiene dos meses y medio,así que con la vacuna,podrá empezar a salir dentro de poco.
Max viene a recibirnos y encuentra a Nico,no le hace nada,simplemente lo olisquea curioso.Nico intenta jugar con él,pero Max le da un ladrido.
Acaricio a los dos perros y me hago cargo de que Nico se adentre en la casa,pues esta un poco asustado.
—Walter tiene a Max,así que yo dormire con Nico.—Replica mi hermana.
—A mi me parece bien.—Digo a mi madre,pues es cierto,yo tengo a Max y mi hermana siempre lo ha querido en su cama pero nunca le he dejado llevárselo.
Mamá asiente mientras observa como el perro se dirige al sofá.
—¡Hostia puta!—Grita mi padre.—¡Un perro más!—Exclama asomándose con el perro en sus brazos,nosotros nos reímos.—¿Como se llama?
—Nico.—Dice Riley.
—Entonces bienvenido a nuestra casa Nico.Por cierto Walter,tengo que hablar contigo de hombre a hombre.
Mi madre me observa intrigada,me encojo de hombros y voy con mi padre,que sigue llevando al perro con él,vamos hasta mi habitación.

Walter,hijo de Still (Terminada)On viuen les histories. Descobreix ara