Capítulo 35

2 0 0
                                    

Suena el timbre de salida,por fin se terminó la tortura,es viernes y sienta genial,solo queda una semana para salir de vacaciones de Navidad y la verdad es que tengo muchas ganas.
Lo malo es que al final me han castigado a estar toda la última semana ordenando libros en la biblioteca,pero no me molesta.Aunque al final todavía no he podido preguntarle a Kurt que le pasaba ayer.
—Vamos Walter.—Dice Benja ya con la mochila colgada en su hombro derecho.
Cierro la cremallera de la mía y salgo con mi mejor amigo de clase.
En el camino Benja se va con Savi y yo me voy con Kurt.
Ninguno dice nada hasta salir completamente del instituto.
—Todavía tienes puré en el pelo.
—Ya,pero es que se ha pegado.
Ambos reímos por la dorma en que lo ha dicho.
—Tengo que preguntarte algo...
—Claro,dime.
—Ayer.—Hago una pausa.—¿Qué estabas haciendo que estabas tan raro?
Lo miro y noto como se tensa,luego baja la vista mientras un color rojo invade sus mejillas.
—Estaba ocupado,ya te lo dije.—Dice nerviosamente.
—¿Con que?—Cuestiono intrigado.
—Dejame.—Dice dándome un golpe en el hombro.
—Pero ¿qué te pasa?
Se acerca a mi y en mi oído susurra lo que estaba haciendo,lo cual me averguenza totalmente por andar preguntando.
—Yo...perdon,no sabía que tu estuvieras haciendo eso.—Me expreso incómodo.
—No importa,es solo que es un poco incomodo ir hablando de esto contigo.
—Enserio perdoname por ser tan metiche,es que estaba preocupado.
—Ya he notado que estás más preocupado por mi últimamente.
—Bueno pero...—Dejo de hablar cuando una pregunta invade mi mente.—Espera,¿en quien pensabas mientras hacias eso?
Se sonroja notablemente y avanza un poco delante de mi.No dice nada hasta divisar mi casa.
—Ya estamos llegando.
—Si,pero respondeme,no me dejes con la duda hombre.—Digo divertido.
—Si quieres saberlo te invito a mi casa esta tarde,mi madre no estará porque tiene que ir a comprar con mi hermana lo que sea que me vayan a regalar...estaremos solos tu y yo.—En cuanto dice que estaremos solos me inunda un poco de miedo por la situación,no es bueno tener imaginación en este instante.
—Vale.—Murmuro abriendo la puerta nerviosamente.
—Hasta luego mi héroe.—Dice robandome un beso.
Me quedo como tonto viéndolo irse.
Por la tarde,aviso a mi madre se que me voy a ir con Kurt,aunque no comento nada de que voy a su casa y tampoco que etsaremos solos.Porque sé con lo que saltará y bastante incómodo es saber lo que hacía Kurt,como para tener que soportar a mi madre hablando de condones.
Riley me pide que la lleve para jugar con la hermana de Kurt,pero le explico la situación del regalo y a duras penas,accede a jugar otro día.
Entonces me voy,de camino pasan muchas cosas por mi cabeza,entre ellas me imagino como debió ser hablar conmigo haciendo eso.Meneo mi cabeza intentado no oensar en ese tema y por fin llego a su casa.Subo al porche,luego presiono el timbre.
Después de unos segundos me abre Kurt con el pelo húmedo,supongo que se habrá duchado para quitarse el puré de la cabeza,ya que no tiene ni rastro.
Aunque la situación ya era incómoda,ver como las gotas de agua caen por su cara,me hacen tensarme y de inmediato siento mi entrepierna bajo el pantalón.
—Pasa hombre.
Entro sin decir nada.
Observo su casa,no es tan grande como la mía,pero es acogedora y bonita.
—Vamos a mi habitación si quieres.—Comenta observandome.
—Si,claro.—Digo entrecortadamente.
Subimos las escaleras y paseamos por el pasillo,hasta la última puerta,él la abre,dejándome pasar primero.Es una habitación diferente a la mía,hay posters de basquet y veo algunos libros de deportes,también hay retratos de su familia.
—Esta guay.
—Me alegro,en fin,sientate.
Me siento en su cama,que es bastante comoda a decir verdad.

Walter,hijo de Still (Terminada)Where stories live. Discover now