La Guardaespaldas [EDITANDO]

Capítulo 31

#Poché

No sabía que había sucedido con el señor Germán, Johann no me había dado mucha información sobre él y eso no me ayudaba para calmar a Daniela. Verla llorar me destrozaba y más al saber que no podía hacer nada para desapareciera su angustia. No puede evitar rodearla con mis brazos aunque me había pedido tiempo sabía que me necesitaba en este momento.

—Calle, él va estar bien —susurré antes de ser interrumpida.

—¿Qué pasa? —preguntó preocupada Juliana al ver cómo estaba Calle, Karol no tardó entrar en la cocina. Al parecer Juli aún no sabía nada.

—Hay que irnos al hospital —respondió Daniela separándose de mis brazos para limpiar sus lágrimas. —Es papá, él está...

—Él va estar bien —la interrumpí antes de que pensara lo peor. —Aún no sabemos que sucedió.

—Tenemos que irnos —Juliana se acercó a Daniela.

—Yo las puedo llevar —negué la oferta de Karol, no correría el riego que sucediera algo más.

—Es mejor que venga conmigo, no quiero correr riego —dije mirando a Juliana, ella asintió.

—¿Qué estas insinuando? —preguntó Karol.

—Soy la guardaespaldas de Daniela, mi trabajo es cuidarla y es lo que hare —contesté sin dejar de mirar a Karol.

—¡Basta! Iré con Karol y tú iras con Poché —señalo a Juliana estaba a punto de protestar por su decisión pero Daniela no me dio tiempo de hacerlo.

—Nosotras las seguimos —dijo Juliana al ver que no tenía otra opción. —Vamos —asentí saliendo de la cama.

Entre al auto y esperé que Juliana hiciera lo mismo, una vez que lo hizo comencé a conducir con cuidado sin dejar de mirar al auto que estaba adelante, aún no comprendía cómo había aceptado que se fuera con ella.

—No lo tomó nada bien ¿no? —preguntó Juliana, asentí sabiendo que tenía su mirada en mí. —Sólo dale tiempo, se le pasará cuando entienda que no tenías otra opción. Aunque no entiendo por qué le da tanta importancia —la mire de reojo mientras sonreí a media recordando que ella no tenía ni una idea sobre el romance secreto que tenía con su hermana.

—Soy más que eso... —dije lo suficientemente despacio para que no me oyera pero no funciono. —Tú hermana y yo nos conocimos antes de que fuera su guardaespaldas —me adelante a decir antes de que me preguntará.

—¿Qué? Ella nunca habló de ti.

—Bueno creo que ella no quiere hablar de ese día —sonreí recordando todo lo que pasó en ese día con Daniela. —Fue los Ángeles y la verdad fue algo embarazoso así que no la culpa.

—¡Tú eras la chica! —murmuro entusiasmada.

—¿Qué? —cuestione confundida.

—¡Claro! Ahora todo tiene sentido, por eso esta tan molesta Daniela. Ella me habló de ti pero no tenía idea de que se trataba de ti —intento explicarme pero aún no entendía a lo que se refería.

—No entiendo —murmure.

—Tú eres la chica que conoció hace unos meses, ella no dejó de pensar en ti desde ese día lo recuerdo porque yo la molestaba con eso —confesó.

Sonreí un poco avergonzada al saber que Juliana estaba a tanto de cómo nos habíamos conocido Calle y yo. Al menos esta conversación me había ayudado a calmar mi rabia, después de eso no volví a preguntar por miedo a que dijera algo más, luego de aparcar el auto Juliana soltó un suspiro.