—No tienes algo mejor que hacer—él menor trato de ignorarlo y seguir buscando entre los tartamudeos de Pansy sobre la chica de la que se había enamorado; estaba convencido que era Hermione, pero entonces Charlie volvió a tomarlo de la cintura y lo atrajo hacia él.

—¿No tienes hambre?—pregunto observándolo con sus fríos ojos azules.

—No realmente—respondió secamente esperando que él se fuera con su grupo de alumnas que lo habían tenido entretenido desde el principio de la noche las cuales estaban haciendo alboroto en algunas mesas al fondo del salón.

—Que lastima porque yo si tengo hambre—le mostró una sonrisa un tanto traviesa, pegando sus cuerpos un poco más—Yo te quiero almorzar.

Entonces Draco abrió los ojos lo más que pudo por lo sin vergüenza que era el mayor. Charlie nunca se había mostrado tan abiertamente.

—No solo eres un pervertido—exhalo Malfoy nerviosamente—también eres un acosador.

—Tú eres el que entra a mi casa—e respondió con simpleza el mayor.

—¿Qué?

—Aléjate de él—le dijo quien asumía era Blaise Zabini molesto.
Luego de notar de que Draco no regresaba fue a buscarlo, realmente no esperaba encontrarse al tío de los gemelos Black asechando al chiquillo rubio como si fuera un trozo de pastel, o al menos Blaise pensaba que era tan dulce como un pastel.

—No le hecho nada—gruño Charlie, le fastidiaba que su mejor amigo de Draco se metiera en sus asuntos—él me lo pedirá después.

Pero que piernas
hermosas piernas
sacan mis ojos para verte mejor

tu eres caperucita y yo
tu eres caperucita y yo tu lobo feroz

—No te quiero cerca de él—le advirtió él otro adolescente—Draco regresa con Pansy—él rubio no replicó y simplemente se fue lo extraña que se había puesto la situación—no puedo creer que estés rondando a un menor de edad. Eres hasta maestro en esta escuela—pero Charlie no lo escucho porque se quedó embobado en el contoneo de Draco al caminar.

-—¡Pero que piernas!—grito y le silbo para resaltar que decía la verdad. Entonces el rubio sin pensarlo le sonrió sonrojado, dejó de ver al adolescente cuando juraba que podía escuchar como Zabini hacia corto circuito—no me mires así a cual quiera que lo ve caminar se le puede antojar.

—Lo se—respondió con un suspiro por que no podía negarlo, siempre observo a los demás chicos devorar a su amigo con la mirada con la ropa de Quidditch.

—Solo porque soy un lobo me acusan de todo—Comento Charlie indignado.

—Yo siempre te vi como un simple entrenador—contesto sarcástico él moreno.

Blaise nunca se había sentido tan amenazado en su vida. No sentía una atracción por él rubio. Era como un hermano desde que se conocieron. Era más por cuidarlo que por tenerlo.

—Si me disculpas este lobo se quiere comer a caperucita roja—sonrió como nunca lo había hecho en su libertina vida.

—¿Espera que?—Blaise frunció el ceño y comprendió luego que su maestro no planea rendirse. Cuando salió de su trance completamente, noto que Charlie ya estaba sentado con Draco haciéndolo sonrojar y la tarada de Pansy no decía nada porque él estaba embobada con Granger.
Theo miraba a Longbottom como si fuera la cosa más hermosa del mundo.

Le dieron ganas de girar los ojos con desesperación para luego ir a separarlos. ¿Y dónde estaba Black cuando más se le necesitaba? Claro, con él Lord Oscuro bailando en algún lugar del salón. Y tal vez él profesor Snape detendría el intento de coqueteó del hombre. Pero lo vió mirando a Black con dulzura mientras esté le invitaba ha bailar por lo menos una pieza.

—Estoy rodeado de idiotas—murmuro lastimero mientras caminaba hasta la mesa.

—Vamos regálale una sonrisa a este lobo galán—Charlie le susurro a Draco intentando ser confidencial pero todos los cercanos a ellos lo escucharon.

—Nunca pensé verte otra cualidad más que la de enseñar sobre criaturas—Blaise no dió tregua aún cuando le estaban ganando—o tal vez cuidar dragones.

—Tengo muchas cualidades como—no tuvo que pensar mucho porque comenzó a sonar Jailhouse Rock y entonces se levantó y jalo a Draco para sacarlo a bailar—baila conmigo.

De verte no me canso
si no corres yo te alcanzo
yo te quiero almorzar

—Espero que seas tan bueno bailando como lo eres de hablador lobo feroz— se atrevió a sonreírle coquetamente.

Ellos se perdieron entre el baile y miradas suspicaces acompañadas de comentarios sarcásticos y coquetos. Mientras tanto Blaise se había quedado en la mesa donde hacia mal tercio con Theo y Pansy quienes se estaban besando tan apasionante con sus respectivas parejas mientras él solo quería golpear su cabeza contra la mesa ante el fracaso de su noche intentando alejar al profesor Black de Malfoy. Solo los gemelos habían soportado su forma de ser y luego llegaba ese profesor a arruinar su racha.

—Parece que haz perdido—señalo Harry que se acercaba tomando de la mano a sus citas de la noche.

—No, aún puedo derrotarlo—dijo resignado a soportar por lo menos en esa noche la situación.

—No lo creo—declaro burlón Harry—Lucius Malfoy va ha reprenderte.

—¿Qué demonios?—murmuró disgustado al ver que Draco se paraba de puntas para corresponder el beso de Charlie. Logro más en un día que lo que el había avanzado en meses intentando alejar a sus pretendientes.

Terminó con la cabeza contra la mesa con la risa de Harry haciéndole sentir inútil. Theo le miraba sorprendido ante sus falta de modales. Blaise tenía derecho a quejarse sobre su miseria como el peor cuidador.

Longbottom le dió una triste mirada mientras que Granger intentaba animarlo. Era casi imposible, él profesor había ganado y él padre de Draco sería capaz de colgarlo de pulgares cuando su hijo perdiera su inocencia esa noche. Lo que no estaba seguro de sí decir que Draco había dejado de ser inocente con los gemelos hace mucho tiempo.

—Es su lado criatura—revelo Hermione al ver que nada animaba al chico de ojos oscuros.

—Granger nadie podría creerse...—se detuvo pensándolo mejor—para ser una nacida Muggle eres genial—se lanzó encima de la castaña llevándose a Pansy de paso—merece todo lo que me pidas.

Tu eres caperucita y yo
tu eres caperucita y yo tu lobo feroz...

Colateral (En Revisión). Where stories live. Discover now